Sábado 6 de enero de 2018
¡Cómo se escribe la historia!. Miren lo que decía Mas en el año 2002 cuando nos dejaron solos en el Congreso a cuenta de la ley de Partidos. Sí, entiendo que eran otros tiempos, pero como decía Don Manuel de Irujo, ”los hombres y los rocines, cada uno va por sus fines”.
El entonces vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, destacó el 10 de Mayo de 2002, el desmarque público del Conseller en Cap de la Generalitat, Artur Mas, de los nacionalistas vascos para «formar un frente común contra la Ley de Partidos». Rajoy dijo, tras el Consejo de Ministros, que esta posición le satisfacía y, además no le sorprendía porque «nada tienen que ver las actuaciones de CiU y las del PNV en relación con el terrorismo, la eficacia en la lucha contra ETA y todo lo que significa».
«Haremos lo que creamos que le conviene a CiU, al Gobierno de la Generalitat y al conjunto de Cataluña y actuaremos así, independientemente de lo que piensen los vascos, el PP y el PSOE», dijo Mas, quien recordó que CiU ha presentado más de 30 enmiendas a la ley y ha asegurado que no decidirán su posición final hasta saber si éstas son aceptadas o no.
No obstante, el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, cuestionó la «oportunidad política» de la Ley de Partidos «por los efectos que podría tener sobre la cohesión de la sociedad vasca».
Parece que han pasado mil años.
Mas: “Euzkadi es casi independiente financieramente, no así Catalunya”
Y lean ahora, lo que dijo el expresident de la Generalitat, Artur Mas, hace solo un mes sobre su financiación y la nuestra:
Dijo Mas que “ la financiación y la cuestión fiscal son los dos grandes motores que han impulsado el proceso soberanista en Catalunya hasta la fecha. Y lo hizo comparando la situación de Euzkadi con la de la comunidad que presidió, que se encuentra en clara desventaja en materia presupuestaria, según su parecer. “Una gran diferencia que no se puede obviar nunca -aseguró- es que las relaciones vascas con el Estado español son unas relaciones donde el País Vasco, desde un punto de vista financiero y fiscal, es un país casi independiente”, dijo. Y estuvo muy bien dicho. Otra cosa es que Sortu se lo crea y vote abstención ante el acuerdo del Cupo y no diga nada en relación a Navarra.
En una entrevista en Radio Euzkadi, el dirigente del PDeCAT lamentó que el caso de Catalunya “es absolutamente distinto, es un país absolutamente dependiente”. “Comparada con la que pueda tener el País Vasco, no tiene nada que ver. Y esta es una diferencia sustancial para entender también la evolución” de ambas sociedades. El acuerdo sobre el Cupo y el Concierto Económico en Euzkadi marca esa diferencia, y el anhelo de alcanzar ese grado de autonomía está en gran medida detrás de la escalada soberanista de los últimos años en Catalunya.
Sin embargo, Artur Mas aclaró que el tema fiscal y financiero “no es el único que impulsa el proceso soberanista catalán”, cuya situación definió como “mucho más compleja”. Así, apuntó que en el caso catalán, “además del tema fiscal y financiero, que evidentemente existe, hay otros muchos factores de tipo cultural, de proyecto de futuro, de relaciones internacionales, de ejercicio de las competencias y de capacidad de decisión que pesan mucho en este proceso soberanista”. Agregó que “si en Catalunya se ha llegado a algún acto de tipo unilateral es porque no ha habido manera de sentarse a la mesa y de dialogar francamente con las instituciones del Estado”.
Los árboles tienen raíces
George Steiner, un judío europeo de procedencia diversa y con una identidad tan compleja como múltiple, asignaba a los judíos un papel ejemplar que podría decirse del hombre en general: «Demostrar que aunque los árboles tienen raíces, los hombres tienen piernas y son huéspedes unos de otros. Si no se quiere que se destruya el potencial de la civilización, tendremos que desarrollar lealtades más complejas, más provisionales. Hay, como enseñaba Sócrates, traiciones necesarias para hacer una sociedad más libre y más abierta para el hombre. Hasta una gran sociedad es algo limitado, efímero, comparado con el libre juego de la mente y la anárquica disciplina de sus sueños».