¿Hasta cuando la violencia en el fútbol?

No tiene ningún sentido hablar de fútbol tras lo ocurrido. ¿Cuántas desgracias más tienen que pasar para que alguien tome cartas en el asunto y lo solucione? Ayer falleció un ertzaina, Inocencio Alonso García, de 51 años y natural de Ermua, otra  persona que hay que añadir a los nombres que todos tenemos en la cabeza. ¿A quién hay que dar las gracias? Entre todos los estamentos que participan en este negocio que cada vez es más asqueroso, ¿no hay nadie capaz de hacer algo? Supongo qué es un problema económico, de dinero, y que por lo tanto me tendré que ir olvidando de que se encuentre una solución.

Una vida rota más, bueno una no. Muchas más. Toda su familia, todos sus amigos, todos sus compañeros,… todos hemos perdido algo. Siento muchísimo que esto sea así. No entiendo cómo es posible que una ciudad, ayer Bilbao, el otro dia Sevilla, otro … la que sea, tengan que entrar en estado de sitio… ¡por el fútbol! ¿En qué momento hemos perdido la cabeza? ¿No les da vergüenza no intentar solucionarlo? Se sabía que venían unos animales, armados y peligrosos… y se les venden entradas, se les deja pasar,… Toda la ciudad patas arriba, mil medidas de seguridad preventivas y no preventivas y las fuerzas del orden, supongo, rezando para poder controlar todo este sinsentido y para poder volver sanos y salvos a casa. ¿Y nos quieren hacer creer que no es posible solucionarlo? ¿Por qué se les deja viajar a estos ultras? Incluso diría más… ¿por qué se ha jugado el partido? Sobran los ultras. TODOS LOS ULTRAS FUERA. TODOS. Y edito para que no queden dudas. FUERA TAMBIÉN NUESTROS ULTRAS, ELLOS TAMBIÉN SON VIOLENTOS. Me da igual quién es el que empieza la lucha. Si alguien la sigue… mal. Los primeros salvajes y los segundos también. ¿Qué más da quién es más salvaje de los dos? Dos no discuten si uno no quiere. Dos no se pegan si uno no quiere. HAY QUE HACER ALGO.

Por supuesto, gracias a toda la policía, ertzaintza, guardias de seguridad,… que han participado en protegernos. Gracias por vuestro trabajo y mi mayor apoyo y solidaridad, porque trabajar en esas condiciones… en fin… no parece el ideal.

Lo siento muchísimo y un abrazo enorme a todas las personas a las que ayer se les rompió la vida.

Goian bego. Descanse en paz.