El Athletic me da dos disgustos en Las Palmas

El mal juego del Athletic tenía que acabar en algún momento en derrota y nos ha pasado a la cuarta jornada.

Cuco ante su primera derrota (Foto: EFE)

Por supuesto, éste ha sido mi primer disgusto. Perder el partido ante un equipo, la Unión Deportiva Las Palmas, que tampoco es que hiciera grandes maravillas. Ziganda volvió a optar por las rotaciones. En este partido 8 cambios, con respecto a Berlín. No seré yo quien las critique porque ya he comentado que no me parece mal que dé descanso a los jugadores y así se tiene a toda la plantilla con las orejas tiesas porque pueden desaparecer de la alineación si no están bien. Sino que se lo pregunten a Beñat, que supuestamente ya estaba descansado porque no estuvo convocado contra el Hertha y ayer tampoco jugó de titular. Sus partidos anteriores, no muy buenos, supongo que le han llevado a Cuco a ello. Ayer de todas formas ni el juego de Vesga, ni el de Iturraspe tuvieron que enamorar al entrenador, ya que si de algo careció el equipo de nuevo,  fue de creación. Estamos planos. Seguimos perdiendo unos balones que es como para mirárselo. Recuerdo un contrataque llevado por Vesga que tenía a dos compañeros a su izquierda y optó por lo más difícil, regatear al defensor que le salía de frente y, claro, perder el balón propiciando, con un único pase de ellos,  un contrataque peligrosisimo, que si no acabó en gol fue porque al delantero se le escapó largo el control y dio tiempo a Kepa para llegar al balón. Esta jugada fue en el primer tiempo, pero como ella hubo un montón durante todo el partido. Visto que el centro del campo no funcionaba  no sé podía haber sacado antes a Beñat (salió en el 86). No suelo entender los cambios tan cercanos al final, salvo que sean para perder tiempo o algún problema claro. Algo más que Vesga o Itu ya creo que podía haber hecho con más minutos. En fin.

Williams tampoco estuvo especialmente afortunado en el pase. Así como en el mano a mano que tuvo con el portero. Si lo hubiese estado quizá ahora estaríamos hablando de otra cosa, igual un triunfo, porque oportunidades sí que tuvimos, tantas como la Unión Deportiva, pero esta vez ellos se han llevado el gato al agua. No siempre la suerte va a estar de nuestro lado.

Para el triunfo, Remy fue determinante saliendo desde el banquillo, por su movilidad que metió en graves problemas a nuestra banda derecha,  hasta llegar su gol, por medio de una jugada individual, en la que hizo todo perfecto. Agur tres puntos. Agur imbatibilidad. Agur portería a cero.

El segundo disgusto que me llevé fue por la poca o nada deportividad que demostró mi equipo al no devolver el balón en una jugada en la que deberían haberlo hecho. ¡Vaya cabreo que me agarré! Me recordó a esos equipos… … … que no me gustan nada, nada, nada. ¡Qué desilusión! Gure estiloa. ¿Dónde queda así Gure estiloa? La falta de Muniain fue clara. Sí ya sé que el jugador exageraría y que no se estaba muriendo, pero los contrarios tiraron el balón fuera y nosotros teníamos que devolverlo y si no lo haces…  … eres bastante… … Una pena, que espero sea un error puntual que no se vuelve a repetir.

Y sin descansar, en tres días el Atlético de Madrid en La Catedral. A solucionar los problemas, sobre todo de creación,  a por ellos y …

¡Aúpa Athletic!