Un país paralizado

Evidentemente, en los sindicatos no se han dado cuenta, pero el bloque del Teleberri sobre el 1 de Mayo fue muy elocuente. Como lo son sus mensajes en Twitter: “Euskal Herria está a la cabeza del número de huelgas”, decía (y tuitean) con orgullo Mitxel Lakuntza. Orgullo de paralizar un país. Y sonreía el tío. Igor Arroyo, de LAB, hablaba a los candidatos de Bildu que le acompañaban (porque todo vale para el mitin) de lucha feminista. Claro que sí. Porque el feminismo es algo que algunos hombres indican a todas las mujeres cómo y cuándo tienen que hacerlo. Ambos dicen estar cerca de las y los trabajadores, pero parecen lejos de la sociedad.

¡Qué ridículo!

Y después del 1 viene el 2 de Mayo en Madrid. Una jornada de celebración que ayer, además, sería especial en la comida que compartiría Ayuso con otros miembros del PP. Su victoria moral sobre el gobierno español, apartando de malas maneras al ministro Bolaños de la foto, es de las que recordarán. El mérito es las dos responsables de protocolo que frenaron el intento de acceso al escenario del socialista después de haber dejado pasar a un Núñez Feijóo que solo se representaba a sí mismo. Pero el ridículo lo hicieron todas y todos, el esperpento merece el visionado y el evento es, sin duda, el mejor ejemplo de lo que es mala política.

Y así le va

Isabel Díaz Ayuso se sentía fuerte para parar a todo un ministro. La encuesta de La Razón (el periódico que dirige Francisco Marhuenda, ex diputado del PP y ex asesor de Rajoy) le da tres escaños más en las próximas elecciones, con los que conseguiría mayoría absoluta en la Comunidad de Madrid incluso sin Vox. Si la noticia se convierte en realidad, el éxito de la presidenta autonómica sería incuestionable. Y también sería incuestionable el éxito del trumpismo versión cañí, que es lo que practican la propia Ayuso y su jefe de gabinete, Miguel Ángel Rodríguez. El riesgo es que a otros políticos les parezca una buena idea.

Que nada les detenga

Parece increíble, pero Pablo Cambroreno va a preguntar en el Congreso “si el Gobierno está manipulando el tiempo con productos químicos”. El diputado en cuestión es un “ex” de Ciudadanos que abandonó el partido pero no el escaño, que se ha ido aproximando a Vox (votó a favor de Ramón Tamames en la moción de censura) y que, ahora, se echado en brazos de los conspiracionistas. No sabemos si por llamar la atención o por ignorancia supina, el parlamentario y policía nacional ha hecho suya una paranoia y ha logrado que los conspiracionistas estén representados. Siempre tiene que haber sitio para la idiotez.

Qué temazo

Me acuerdo perfectamente de las crónicas de Xabier Lapitz desde Somoto, Nicaragua, sobre los terrenos que allí había adquirido prevaricando y malversando la entonces delegada del Gobierno López en Chile, Ana Urchueguía. Me acuerdo de cómo tuvo que defender su profesionalidad el periodista. Me acuerdo de los ataques y las descalificaciones, y de quiénes participaban en el linchamiento. Me acuerdo de lo incómodo que fue para todos ellos, miembros del gobierno y miembros de la clac, el Grupo Noticias, con todas sus limitaciones. Así que ahora celebro la resolución favorable. Favorable a la verdad y a quien la contó.

Dulceida abandona Instagram

Si alguien sabe manejarse en Instagram y lo que esta red puede llegar a dar es Dulceida. No es la que más seguidores tiene pero sí la más icónica de las instagramers y una de las primeras que supieron generar un modelo de negocio (y no solo para ella) por medio de posados, colaboraciones con marcas y una comunidad de seguidoras y seguidores. Pues bien, Aida Domènech ha decidido tomarse un tiempo en esta red y ha hecho pública su intención, lo que debería de servir como toque de atención, sobre todo, para quien quiera seguir sus pasos (o quien ya lo haga): las sonrisas de las y los influencers son solo para la foto.

Twitch baja los precios

Hoy debuta Leo Messi con el PSG y podremos verlo en el canal de Twitch de Ibai Llanos, que este verano también ha emitido la Copa América. De momento, es una excepción, pero muchos estamos atentos a que se normalice la difusión de eventos en esta plataforma que tampoco es gratis. De hecho, esta semana hemos visto cómo varios generadores de contenido en Twitch protestaban porque la empresa ha rebajado unilateralmente el precio de las suscripciones y el margen de beneficio de esos creadores que convocaron una huelga sobre la que no hay datos. Los conflictos laborales ya han llegado a Twitch.

¿Habrá porno en OnlyFans?

La gente joven (o sus amas y aitas) paga por contenido, incluso por el porno, algo que para nuestra generación es casi impensable. El éxito de Twitch y, al mismo tiempo, de OnlyFans, con un modelo de negocio similar pero unos contenidos diferentes, no es casual: estamos ante un nuevo tipo de consumo, un mercado maduro y un público joven. Pero aún está por ver si el porno se mantendrá en OnlyFans (mi apuesta es que sí): en pocos días han anunciado que bloquearán estos canales y que no lo harán porque tienen “garantías de los socios bancarios” (El Plural). Por si acaso, en Trecbits ya han publicado 10 alternativas, también de pago.

Twitter no es el problema

Los 300.000 nuevos seguidores en Twitter de los principales líderes talibanes no deberían de ser un problema: igual que en Telegram, Facebook, Instagram y hasta TikTok, solo se trata de un canal al que seguir al líder de un estado. Un líder retrógrado y dictatorial, pero un líder al que leerán muchísimos periodistas en todo el mundo y, por supuesto, un porcentaje de los idiotas que abundan en las redes sociales. El problema, insisto, no es este canal de difusión, sino los foros (por medio de grupos, mensajes directos o en público) que difunden ideas integristas de cualquier tipo y que son los que tienen que cerrar las plataformas.

La tecnología no puede embobarnos

La mejor pieza sobre el robot que ha anunciado Elon Musk la ha escrito Ignacio Crespo en La Razón, desmenuzando las imposibilidades (básicamente, la empresa más avanzada en este campo es Boston Dynamics y Tesla ha prometido en un año unas innovaciones tecnológicas impensables para la primera) y, sobre todo, la capacidad para vender “puro humo” del empresario sudafricano. Musk ha conseguido atraer la atención sobre el “teslabot” y, seguramente, obtener un beneficio bursátil con la colaboración de casi toda la prensa mundial, pero nada invita a pensar que su robot humanoide pase de un dibujo en los próximos años.

Limpia, fija y da esplendor

Arnaldo Otegi se mostró contundente (en Twitter) ante las pintadas aparecidas en Hondarribia. Lo dejó muy claro: “No cuentan ni con la comprensión ni el apoyo de Bildu” expresiones que “siembran en nosotros dudas razonables sobre su autoría” por sus flagrantes faltas gramaticales en euskera. Muchos del entorno de quienes siempre las han hecho son capaces incluso de acusar a Ertzaintza y al PNV de realizarlas para culpabilizarles. ¿Les ven incapaces de usar correctamente el euskera… O sugieren que quien pretenda imitarles sabe que tiene que escribir un mensaje que insulte a la inteligencia?

Hablemos de Cospedal

Esta semana ha estado más justificado que nunca leer La Razón. Si en algún sitio conocen bien al PP, sobre todo a aquel que era coetáneo a Luis Bárcenas, es en el periódico en el que encontrábamos esta noticia: “Rajoy teme que Bárcenas vaya a por Cospedal y le deje sin escudo”. En efecto, Cospedal es una pieza muy importante en el dominó del tesorero: ella fue la que quiso acabar con su poder y el riesgo al que exponía al partido con ese manejo del dinero y la situación… Y él ahora querrá acabar con ella porque le culpa de sus desgracias después de haberse beneficiado de sus repartos, supuestamente.

¿El motivo? El business

En la truculenta historia de dinero y mujeres que protagoniza Juan Carlos I hay una actriz secundaria de la que se habla menos de lo debido: Sofía de Grecia, cuya dignidad está siendo vapuleada. Por supuesto, ella decidió aguantar los desprecios y el escarnio, y evidentemente lo hizo por el business: ¿qué hubiera sido de la familia real griega sin ella como reina de España? En Vozpópuli ponen el precio: “Si la princesa se separaba debía devolver su dote de nueve millones de dracmas al pueblo griego”, que pagó sin saberlo por sostener el último reducto de su monarquía. Un negocio entre familias pagado por los estados y los impuestos.

Semanas de mierda

Ana es ilustradora, autónoma y una tuitera muy conocida por sus reflexiones sencillas que nos representan: “Iba a decir que ojalá se acabara ya esta semana de mierda pero es que la siguiente va a ser igual. Y la siguiente”. Así es, nos está tocando vivir semanas de mierda autoconfinados, teletrabajando quien pueda y pendientes de que no llegue por WhatsApp alguna mala noticia en forma de contagio de un familiar, amigo o en el aula de alguno de nuestros hijos. Además, llueve. Un momento de la historia de cada una y uno que nos está poniendo a prueba… Pero que vamos a superar.

Una época para la historia

Antes del coronavirus ya estábamos viviendo tiempos intensos, inimaginables solo unos años antes: el Brexit o Trump agitaron nuestro mundo “macro”. Los partidos que se autoproclamaban de la nueva política irrumpieron tan cerca que empezamos a notar sus ecos con una sucesión de elecciones inusitada. Y el virus hizo saltar por los aires nuestro círculo más próximo. Vuelvo al principio: para no olvidar lo que supuso Trump, en Flickr han creado una gran galería con las fotos de su mandato. Un mandato para la historia pero no por bueno. Para la suya y para la nuestra. Y que no debemos olvidar.

Si Vox marca la agenda…

Si Vox pretende marcar nuestra agenda, adelante. Así que, hablemos de Vox y de Santiago Abascal: “Tres meses después de haber adquirido un chalé de 185 metros cuadrados con garaje, jardín de 100 metros, localizado en una zona de alto nivel al norte de Madrid y de precio desconocido pero sujeto a una hipoteca de nada menos que 736.000 €, Santiago Abascal sigue sin actualizar su declaración de bienes. El Congreso obliga a los diputados a hacerlo (…). La compra se formalizó ante notario seis días antes de que Abascal anunciase su intención de presentar la moción de censura” (InfoLibre).

La noticia que no lo parece

A estas alturas, no resulta “noticioso” que Vox maneje cuentas falsas o automatizadas en redes sociales. Es lo esperable, es lo que hemos visto o barruntado e incluso tengo la sensación de que lo ha leído antes. Lo grave es el hecho en sí que describe el equipo de César Calderón: que la extrema derecha haya montado una estructura digital para difundir sus mensajes extremistas y populistas, por ejemplo, para calentar una moción de censura que solo busca los focos, porque no busca realmente los votos. No podemos permitirnos que el fascismo coja el micrófono. La historia nos lo ha enseñado.

Iglesias se apunta

Curiosamente, esta moción de censura va a ser más incómoda para el líder del principal partido de la oposición que para el presidente del Gobierno. De hecho, Sánchez estará encantado de enfrentarse, con todas las cámaras enfocándoles, a Santiago Abascal. Tan claros están los beneficios para el gobierno de la maniobra de Vox que se ha apuntado hasta Pablo Iglesias. De este modo, Podemos tendrá doble turno, como el PSOE (la portavocía del grupo parlamentario y el gobierno) y ayudará a alimentar al monstruo con cierta irresponsabilidad. A la extrema derecha, ni agua. Y mucho menos, voz y atención.

Y Casado tiene al enemigo en casa

Haga lo que haga, Pablo Casado va a generarse un problema. Así que solo le queda medir bien y decidirse por el menor de todos. En El Nacional explican que “el diario La Razón se aventura a asegurar categóricamente que el PP votará ‘no’”. Hoy lo sabremos. Pero ese rechazo hará que Vox tense la cuerda (el lunes leíamos en República.com que podría pedir entrar en los gobiernos madrileño y andaluz) y que el partido cruja por la derecha: Cayetana Álvarez de Toledo pedía en su canal en YouTube que el voto no fuese negativo, liderando una corriente que el PP ahora minimiza pero antes impulsó.

Arrimadas, ¿por la moderación?

Voy a ser bueno y voy a pensar que Inés Arrimadas está siendo sincera en sus deseos: a la de Ciudadanos le gustaría ser la centrada y moderada durante la moción de censura, pero su historial indica otra cosa. Arrimadas, como muchos otros en su partido, entendieron la nueva política como la de la puesta en escena de la tensión artificial. Ya sin ETA, la tensión había que crearla acudiendo al desfile del Orgullo después de haberse asociado con un partido homófobo como Vox o montando teatrillos para insultar a compañeras de hemiciclo. La tensión creciente en la política española tiene padres y madres que ahora se esconden.

Amanecer Dorado, primer aviso

¿Con qué amenaza Vox cuando responde al ministro José Luis Ábalos, que protesta en Twitter por un ataque a la escultura que recuerda a Largo Caballero, con este mensaje: “Derogad la Ley de Memoria Histórica. Primer aviso”? ¿Dónde está la fiscalía para actuar de oficio contra quien amenaza a un ministro y ataca a una norma básica como es la memoria de las víctimas del golpe de estado y la dictadura franquista? El primer aviso del que Vox tiene que tomar nota debería de ser el que ha dado la justicia griega con Amanecer Dorado, al que ha considerado organización criminal. Lo que son los fascistas.

Fascistas haciendo cosas nazis

Y si la fiscalía no actuó con el primer aviso porque en España ya se sabe que para las cosas de los herederos de Franco todos se ponen remolones, debería de haberlo hecho con el segundo aviso, que lo dio el diputado Juan José Aizcorbe (de Vox, por supuesto) nada menos que en el Congreso ayer: “Reitero la presentación de una proposición de derogación de la liberticida Ley de Memoria Histórica. Segundo aviso, señorías” (El Plural). Segundo aviso, ¿de qué? ¿Van a salir a quemar libros o a marcar puertas de casas con pintura? ¿Van a tomar las cortes con un golpe de estado y una guerra civil apoyados por Hungría y Polonia?

¿No les están regalando la oportunidad?

La reforma que proponen PSOE y Podemos para elegir a la cúpula de la judicatura, rebajando la mayoría cualificada hasta la absoluta, abre la puerta a que, en cuanto cambien las tornas, nos comamos unos jueces ultraconservadores. Más incluso de lo que son ahora, aunque algunos vayan de progres. ¿O qué creen que van a hacer PP y Vox en cuanto sumen mayoría absoluta, dejar a otros que metan la cuchara? Por otro lado, esta rebaja sí permite a otros partidos entrar en la jugada (como ahora) que, hasta ahora, tienen monopolizada PSOE y PP, y supeditada a que se pongan de acuerdo.

La estrategia de Ayuso

El PP y Vox comparten muchos vasos comunicantes: la base de votantes, las necesidades de unos y otros, y el trumpismo. Y aunque en general los de Abascal tarareen la música trumpista más a menudo, nadie la interpreta como Isabel Díaz Ayuso: la manera más efectiva de mejorar las cifras de la afección del coronavirus es dejar de hacer pruebas. Sobre todo, pruebas que sabes que pueden dar positivo, como la de las personas próximas a un contagiado. En eso se basa la mejora de datos que presenta Madrid para enfrentarse al gobierno español, lo que es, en esencia, una barbaridad y una irresponsabilidad.

El problema es medirlo

Algo está haciendo mal alguien si el resultado de unas medidas sanitarias se ofrece en votos y escaños. No parece muy lógico, desde luego, ni muy recomendable porque de esta manera solo se consigue hacer el juego al populista. ¿De verdad que del enfrentamiento entre Díaz Ayuso y Sánchez la primera va a rascar 15 escaños más en el congreso madrileño? ¿De verdad que es momento de que La Razón haga esta encuesta? ¿De verdad se puede mezclar una pandemia con unas encuestas electorales con esta sencillez, como si no fuera ampliar la irresponsabilidad con la que ejercen y envilecen la política?