Hoy va a ser un día difícil y complicado. Difícil porque no será fácil mantener la calma y complicado por lo que puede suponer de colisión de emociones pero también de ideas.
Han quedado atrás las discusiones sobre la legalidad o la ilegalidad y sobre la democracia o sus limitaciones. También sobre la bondad o maldad de los nacionalismos confesos o silentes.
Para quienes más bien aspiran a naciones sin Estado o , más teóricamente, a la concepción de nación como estructura abierta, la jornada resulta , además, un tanto angustiosa.
Por todo ello, y para asumir hoy toda la responsabilidad de lo que digo, sólo puedo recordar aquel poema que yo escribí…
PATRIA
Luz, mar azul,
cóncava nave negra
y sin bandera.
Pero, ya se sabe, la poesía es poesía y no pretende convencer a nadie…