Nuestros negacionistas

La pandemia produce extraños compañeros de cama. Ni en mis más profundos delirios habría sido capaz de concebir que el negacionismo gamberro, egoísta y descerebrado se fuera a casar en segundas nupcias con el nacional-jatorrismo que nos llenó las calles de cascotes, incendios y cristales rotos. Pero los hechos repetitivos son tozudos y no dejan lugar a dudas. Mungia, Ondarroa, Donostia, Pasaia, y como corolario, mi propio pueblo, Santurtzi, donde unos botelloneros reincidentes de aluvión encontraron el auxilio de tipos con amplia bibliografía violenta acreditada para evitar que la por ellos motejada como zipaiada acabara con el festejo insalubre.

Una vez más, la anécdota es una categoría. Los campeones mundiales de cantarnos las mañanas con lo que hay que hacer para acabar con el virus se alían con sus propagadores más cerriles porque en realidad son tal para cual o, sin hacer precio de amigo, porque son los mismos. Su negocio consiste en que todo vaya lo peor posible, que ahí hay pesca segura. Lo que no se esperaba es que se sumara al jolgorio la coalición aquí llamada Elkarrekin Podemos, negándose a censurar el comportamiento incívico de los Euskal Kaietanoak (Copyright, Iñaki González) y señalando con su dedo acusador a la Ertzaintza. Cosas, supongo, de la lucha por la hegemonía de la oposición.

6 comentarios en «Nuestros negacionistas»

  1. “ Cosas, supongo, de la lucha por la hegemonía de la oposición.”
    Pues sí, Javier, por ahí van los tiros. Y en ese afán “todo es bueno pal convento”, que dijo el fraile, echando mano a la monja. Ya lo he repetido más de una vez, hay que leer más a Gramsci y menos a Sabino Arana. Si consigues desmoralizar al adversario ( o enemigo) y que la sociedad metabólice tu ideología, tienes la partida ganada. En eso estamos.

  2. Es increíble como se alejan cada vez más los políticos del sentir de los ciudadanos
    Es por esas aptitudes carroñeras de cuanto peor mejor para desgaste de mi adversario Me salto el
    protocolo y me vacuno y luego me revuelvo contra todo lo que se mueve para salvar mi prestigio creando más desconfianza
    No poniéndose ni mínimamente de acuerdo en nada . Todo eso crea desafección y mala leche . Alguien tiene que pilotar porque si no vamos a la deriva . Falta mucha responsabilidad por parte de todos .
    Todo junto crea muchísima desazón y bastante tenemos con la amenaza del virus como para aguantar a los que se mueven solo por unos votos envenenando más el ambiente

  3. En Holanda también hay gilipollas de éstos. Alli les han refrescado las ideas con chorrazos de agua y no ha protestado ni Dios
    Aquí veo la foto de unos tipejos, pocos, en la calle 31 de Agosto con la mascarilla por debajo de sus narices, encarándose sin distancia de seguridad que valga, con los ertzainas vestidos para hostiar e incluso un lelo de aquéllos grabando a los polis con su super móvil 5G. Santa paciencia.
    Igual habría que dispararles con chorrazos de kalimotxo, que al fin y al cabo es su santo grial.
    Aunque a escasos pasos de allí una pelota de forma reventó la mandíbula de un mexicano que iba con un amigo a coger el bus. O eso dicen.
    Algo, o mucho, no funciona. Además de los cerebros de los Euskal Kayetaners.

  4. Por cierto: “ Ceterum censeo Carthaginem esse delendam”

    La Unión Eurpea”, en el tema de las VACUNAS, es un “CARAJAL”.

  5. No sé yo. Yo pensaba que no se atrevían a llamar a esto kale borroka porque está pasando en toda Europa pero… Usted dice que no pensaba que el negacionismo fuera de la mano del «jatorrismo» ¿Y eso por qué? pues porque los negacionistas que conocía eran de otro bando ¿no? Pues ahora conoce a los «jatorristas» negacionistas. Hay que rehacer esquemas.

  6. El sábado pasado había convocada, a las 12:00, una concentración, protesta, manifestación…en el Boulevard donostiarra, contra las actuaciones de la Ertzaintza, contra la criminalización de la juventud, etc.
    No era, ciertamente, una concentración «negacionista» pero sí estaba relacionada con todo esto. El detonante, pues la juventud alegre y combativa que decidieron hacer las «no fiestas» y mientras el resto, con las mismas ganas de fiesta que ellos (lo aseguro) se limitaba a unos marianitos de mediodía en una terraza con tres amigos, ellos se arremolinaban por la noche en grandes y los jolgoriosos grupos, y bailes y abrazos y litros.
    Y cuando fueron los municipales a parar eso…pues les agredieron. Y a la Ertzaintza la recibieron a botellazos, pedradas, quema de contenedores…como en los viejos tiempos (había ganas).
    Bueno; todo el mundo conoce lo que ha pasado y cómo se ha posicionado cada cual. Y nos lo sabemos de memoria. Cualquier excusa es buena. Y apuntarse a lo que sea; ecologismo, feminismo, etc, para apropiárselo y llevarlo al terreno de siempre, con las formas de siempre.

    Pues el sábado tuve que ir pronto por la mañana a la Parte Vieja a hacer un recado. Y a las 10:30 o así apenas hay abierto nada para tomar un café. Abren algo más tarde.
    Menos…en la Juan de Bilbao…que los tres o cuatro de referencia estaban abiertos y de bote en bote de chavalería alegre y combativa. Con el uniforme de gala. La sudadera con la capucha, todos con unas mochilas llenas que casi ni cerraban…y trasiego imparable en el Herria y en la Arrano. de la Arrano no paraba de entrar y salir gente, con más mochilas, con las pancartas…
    Vamos, lo de toda la vida.

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