Qué llevo en la mochila en una ruta BTT?

Antes de cualquier ruta en bici debemos prepararnos para cualquier imprevisto. Pero, ¿qué meter en la mochila? En estas líneas voy a compartir qué es lo que  suelo llevar en mi caso y espero que sirva de ayuda a cualquiera que tenga dudas.

Lo más importante que debemos llevar con nosotros en una salida es COMIDA y AGUA. Una buena nutrición durante el esfuerzo hará que nuestro cuerpo sea capaz de superar las exigentes pruebas físicas a las que lo vamos a someter. A través del sudor perdemos gran cantidad de sales y agua que debemos reponer si no queremos sufrir la temida pájara.

Además de que cada cuerpo es un mundo, también hay que tener en cuenta el tipo de ruta que estemos haciendo y la meteorología. Normalmente se recomienda dar un trago de agua cada 15 minutos aproximadamente y consumir una barra energética cada hora y media (pudiéndose partir en tres y comer un trozo cada 20 minutos). Esto es la teoría. Personalmente, bebo agua cuando me lo pide el cuerpo pero no dejo que pase mucho rato entre sorbo y sorbo. Respecto a la comida, nunca me falta un plátano y unos frutos secos para comer en la parada más larga (normalmente en la cima). También suelo llevar un par de barritas energéticas por si noto que necesito un aporte extra de energía.

Lo segundo que considero fundamental en una mochila bien equipada es la HERRAMIENTA. Un simple pinchazo puede convertirse en un auténtico problema si estamos en medio del bosque lejos de la civilización y no tenemos el material necesario. No hace falta llevar encima todas las herramientas existentes, pero sí las mínimas para poder solucionar las averías más comunes:

• Parches, cámaras de repuesto, bomba y desmontadores o mechas para reparar los pinchazos en ruedas con cámara o tubeless.
• Unas socorridas bridas siempre pueden venir bien.
• Una multiherramienta nos sacará de apuros en bastantes situaciones ya que incorpora muchos accesorios en un sólo elemento. Dispondremos desde llaves allen para apretar un tornillo hasta un tronchacadenas. En mi caso llevo la completa Crankbrothers Multi 17.
• Ya que llevamos la multiherramienta, no cuesta nada echar un eslabón rápido en la mochila para reparar una posible rotura de cadena.
• Por último, la patilla del cambio es un elemento relativamente frágil que puede partir alguna vez. Dado su poco peso y lo fácil que es cambiarla, merece la pena llevar una de repuesto con nosotros.

Si somos capaces de reparar la bici, también debemos ser capaces de «repararnos» a nosotros mismos. La multiherramienta de nuestro cuerpo se llama BOTIQUÍN. Del mismo modo, tampoco es necesario llevar el hospital a cuestas. Puede ser suficiente con meter antiséptico y tiritas/gasas para las heridas, puntos de aproximación para los cortes y algún analgésico o antiinflamatorio.

Por último, siempre llevo conmigo ROPA de abrigo o de recambio. Evidentemente no sudamos lo mismo pedaleando cuesta arriba que dejándonos llevar cuesta abajo. Además, en las cimas suele pegar el viento y esto unido al sudor de la subida puede ser una combinación letal si no nos ponemos algo de abrigo o nos cambiamos de camiseta. En invierno sigo la regla de las 3 capas, llevando camiseta térmica, camiseta transpirable (otra de recambio) y un cortavientos / polar / chubasquero. En función de la sensación térmica que vayamos teniendo es cuestión de ir jugando con las prendas y llevar el resto en la mochila. En esta época de frío también suelo llevar por si acaso unos manguitos, perneras y un buff, que no ocupan ni pesan nada y pueden significar una gran diferencia.

Si la salida va a ser más cañera y/o técnica también cargo con las PROTECCIONES. Cuando no las estoy utilizando, la mentonera del casco y las rodilleras tienen su propio sitio donde ser amarradas con las correas correspondientes. Las coderas irían dentro con el resto de cosas. La propia mochila también lleva incorporada una protección para la espalda que siempre se agradece. De esta manera estamos cubiertos en cierto modo ante posibles caídas.

Tal y como he dicho al principio, esto es lo que llevo yo y no tiene por qué ser una norma para todos. Hay gente que prefiere cargar con el menor peso posible y otra que se lleva la casa a cuestas. Lo mejor es que valores las opciones, pruebes y encuentres el punto en el que TÚ te sientas cómodo.