Domingo 7 de octubre de 2012
Hoy 7 de octubre se celebran las elecciones presidenciales en Venezuela.La Mesadela Unidadme invitó a asistir en Venezuela a la jornada. Pero desde hace dos semanas no hay un solo cupo para los vuelos a Caracas. Y, al final me convencieron que era mejor votara en el consulado de Venezuela en Bilbao donde estoy inscrito. Un voto es un voto, y no es cuestión de desperdiciarlo. Y los cuatro hermanos hemos ido a votar.
Previamente ayer vi la rueda de prensa en directo de Chávez desde el Palacio de Miraflores. La broma duró hasta las dos de la mañana. Le vi con buen tono, tratando de agradar, no riñendo a los periodistas, aparentemente bien de salud y con respuestas medidas. Detrás de ésto se veía el ventajismo del presidente. El que la jornada de reflexión estuviera respondiendo preguntas de todo tipo y mostrándose como un caballero con lenguaje democrático. La iniciativa no dejaba de esconder su preocupación ante la jornada de hoy.
El consulado en Bilbao abarca Bizkaia, Gipuzkoa, Navarra, Rioja, Araba y Cantabria y el censo de venezolanos inscritos es alrededor de unos mil veinte. En el estado español hay unos veinte mil y en Madrid unos siete mil. Gentes inscritas en el consulado porque hay quienes votan directamente en Venezuela o al no estar inscritos no votan.
He ido a votar a las once. Para mi sorpresa había una respetable cola que se dividía en tres para votar en tres mesas. Gentes de la organización que han trabajado extraordinariamente bien te decían la mesa que te correspondía y el número que tenías. Y con buen ambiente he llegado a mi mesa, dado mi cédula, firmado y dejado la huella, cogido la sábana y poner una X en la foto de Capriles, salir, meterlo en la caja y a esperar. Lo más probable es que más de un noventa por ciento de vasco venezolanos de venezolanos vascos y de venezolanos votarán a Capriles en Bilbao.
El ambiente en la calle con sus banderas venezolanas era magnífico. He saludado a decenas de conocidos y amigos que no veía hacía tiempo y el ambiente era de victoria dela Unidad. Paracelebrarlo nos hemos idos a una tiendita donde vendían arepas, tequeños, empanadas y maltín polar. Al mediodía había votado la mitad del censo.
De allí he ido a Sondika donde había otro acto electoral, este de Urkullu. El PNV había organizado una feria del vino y la gente degustaba un buen txakolí. Les he dicho que mejoren mi record, ya que voto hoy a Capriles y el21 aUrkullu.
Y ahora a esperar el resultado. Que se confirmen las expectativas y que Chávez reconozca el triunfo. Un nuevo camino para Venezuela y América está a punto de nacer.