LOS DESAYUNOS DE LOS MARTES: MAYO DEL 68

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La Reunión Ordinaria de la Junta Extraterritorial del Desayuno de los Martes ( 1)se  ha celebrado hoy jueves  en la Cafetería Gorliz a partir de las ocho  de la mañana, a propuesta de  Koldo que, una vez más, acababa de salir de guardia y necesitaba un aparte de  buen café con leche y mejor tortilla de patatas ( para él picante, para los demás de cebolla.

La perentoreidad  de la convocatoria ha sido debida a la inminencia del final de este mes de mayo, mes de las flores en sentidos varios, y en este caso de las de mayo-del-68.

Nada ha dicho el convocante pues ,  según ha contado Marta , ha debido atender a las tantas de la madrugada a un sujeto que decía ser  Carlos VII y no paraba de dar ordenes de ataque.

Y ha sido ella misma , en su condición de filósofa  peripatética, la que ha arremetido contra lo que ha denominado » la visión buenista» del 68, prescribiendo que todo por lo que entonces se luchaba no era sino el programa de la sociedad de consumo de hogaño alistada al banderín de  » Tengo derecho a todo y además ahora mismo».

Mikel ha levantado el ceño, sabiéndose hijo de aquellos banderines que él pensaba banderas de liberación no sólo del capitalismo mundial sino también de la izquierda comunista desvigorizada por tanto condón parlamentario, pero no ha dicho nada pues del trotskismo pasó al estructuralismo sin solución de cotinuidad y ahora es muy condescendiente sobre todo desde su arrejuntamiento con Itzi, nuestra última hippie.

Laura nos ha mirado con ojos atónitos mientras bebía a pequeños sorbos su café solo con sacarina. » ¿Y la liberación sexual? ¿Y el porro?» ha musitado con sorpresa.

Le ha respondido Marta en tono un tanto ácido señalando que, en efecto,  aquello formaba parte de  una alternativa  pero que ha sido tan comercializada como los pantalones vaqueros , signo entonces de la working class. Y ha terminado mostrando músculo hegeliano con una frase muy contundente: » Todas las revoluciones no hacen sino fortalecer  y perfeccionar el Estado».

Sumidos que nos hemos quedado en cierta desesperación, Koldo, en dando por terminada su tercera ración de tortilla, ha comenzado a cantar a grandes voces aquello de  «We shall overcome…» para risas de los camareros, escándalo general y  miradas de extrañeza de los menores de sesenta.

Y calmado que se ha nuestro psiquiatra, a las nueve y un minuto se  ha dado  por finalizada la tenida.

De todo lo cual doy fe, pridie Kalendas Iun.  Anno DCCXVIII ad Bilbao urbe condita.

[ hay firma: Ataúlfo ]

(1) Quienes no conozcan a los personajes de esta saga, pueden consultar: http://blogs.deia.com/el-paseante/2016/11/20/dramatis-personae/

 

Publicado por

Vicente Huici

Sociólogo, neuropsicólogo y escritor.

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