¡He encontrado un filón… electoral!

PodemosLas ideas se le agotan a la clase política, mientras sus asesores se afanan en encontrar nuevas fórmulas de aproximación a la ciudadanía. Es un camino equivocado, porque el problema de la desafección social hacia el sistema de partidos no es de naturaleza comunicativa: es ética y de conducta, lo que va más allá del arte de llamar la atención, incrementar la simpatía, cambiar de imagen o diseñar teatralizadas elecciones primarias. Es una cuestión de mensaje. Y el mensaje no es el eslogan o los tópicos repetitivos de los líderes, sino el relato dominante percibido por la gente, que determina, finalmente, su disposición electoral.

Las elecciones son como una mina. Un yacimiento en el que se extraen, escarbando y abriendo boquetes, el mineral de los votos. Con pico y pala. Con mucho trabajo y riesgo. Hay que ir despacio, sosteniendo las galerías y afianzando las zonas exploradas. Los partidos saben que es un espacio inestable y que las posibilidades de excavación son limitadas. Hasta que alguien encuentra un nuevo filón.

Un filón electoral es una veta sociológica, muy superficial, cuya explotación se realiza de forma intensiva en la medida que su composición emocional suele dar resultados inmediatos. Eso sí, sin la menor consideración y a sabiendas de que su producto tendrá salida en el mercado a precios inmorales. Los nuevos filones electorales dependen de la situación de crisis o las contradicciones del sistema y permiten resolver las penurias de quienes las encuentran y deciden aprovecharlas, pese al riesgo que para la seguridad de la mina -la sociedad- tiene su excavación salvaje.

La ventaja del filón electoral para quien lo explota es que condiciona la campaña y hace girar alrededor de su eje los mensajes y estrategias de todos. Se convierte en referente, al margen de su sustancia democrática. Casi todas las elecciones han tenido su veta: la catastrófica herencia de Zapatero fue el filón afortunado de Rajoy, mientras que el victimismo de la ilegalización fue el tesoro que llenó de votos las vagonetas de Amaiur y EH Bildu. Para el PNV fue un regalo el fiasco del frente españolista López-Basagoiti. Uno se puede encontrar el filón en superficie o hallarlo por sondeo en lo más oscuro y fétido del yacimiento ideológico.

El filón de la RGI

El PP ha localizado un gran filón electoral en esa zona baja de la mina: el sentimiento de agravio hacia los inmigrantes como beneficiarios de uno de los instrumentos solidarios de los que está dotado el sistema social vasco desde hace 25 años, la Renta de Garantía de Inserción, creado por el Gobierno Vasco del lehendakari Ardanza con consenso general. La ferocidad de esta bolsa de votos estriba en que, en su ignorancia o mala fe, no pocos ciudadanos creen que los extranjeros se aprovechan, mediante fraude, de estas ayudas sin contar con los requisitos exigibles y que viven del cuento, sin trabajar. Es una opinión muy extendida, aunque carente de base real. El gran explorador, el alcalde gasteiztarra, Javier Maroto, puso palabras a este sentimiento inequívocamente canalla: “Marroquíes y argelinos viven de ayudas que pagamos todos”. Un mensaje premeditado que actuó como explosivo para abrir la veta populista.

A partir de ahí, todo ha ido rodado para Maroto. Los partidos e instituciones han denunciado su propósito de poner exigentes limitaciones a la solidaridad, sin percatarse de que cuanto más arreciaban eran esas críticas mayor era la recogida de votos para el PP en determinados nichos electorales. La grotesca recogida de firmas para una Iniciativa Legislativa Popular, propiciada por el alcalde-parlamentario a favor de la exclusión de los foráneos sin recursos, es la extensión a la calle de su estrategia electoralista. Y lo ha conseguido: la próxima campaña de las elecciones municipales y forales girará en torno de este asunto y es muy posible que Maroto conserve una alcaldía que, antes de este descubrimiento xenófobo, tenía perdida. Con su victoria pírrica heredará la deshonra de ser siempre el político desalmado que enfrentó a los pobres contra los más pobres para ganar miserablemente unas elecciones.

El filón de los presos

Sólo hay que tener un escaso sentido ético y una gran capacidad de oportunismo para recabar votos a cuenta de los agravios recibidos a la vez que se olvida el daño causado. En esto la izquierda abertzale es un genial gestor. La negación de los derechos de los presos de ETA es un poderoso filón electoral para EH Bildu, en la medida que esa vulneración pone de manifiesto una injusticia, además de una ilegalidad e inmoralidad democrática, aún mayor en el caso de Arnaldo Otegui y otras personas a quienes se ha llevado a la cárcel por obvias e inconfesables motivaciones políticas.

La causa de los presos favorece el victimismo y los sentimientos de rencor, que a su vez se transforman en votos, cohesiona ideológicamente a la izquierda nacionalista y proporciona excusas útiles para que este sector siga sin reconocer, indefinidamente, que su apoyo tácito y táctico al terrorismo fue un desastre moral, político y económico para Euskadi y que sus víctimas y la sociedad vasca merecen un resarcimiento sincero y completo, sin el cual no se cerrará el ciclo más negro de nuestra historia.

El filón de los presos es un regalo que España ofrece a la radicalidad de EH Bildu y la tensión política en Euskadi. Es una distorsión que cada uno -la España constitucional y el extremismo abertzale- aprovecha para sus propios fines. Sin el pretexto de la dispersión, el alejamiento y la no excarcelación de quienes, según las leyes, tendrían derecho a volver a casa, la izquierda nacionalista estaría desnuda ante su estricta miseria y el recuerdo de su complicidad criminal. En esto, como en otras muchas cosas, la democracia española es tan mezquina como estúpida.

El filón de la corrupción

¿Quién puede administrar la limpieza de un sistema político al que se percibe corrupto de arriba abajo? Difícilmente los partidos clásicos, porque el problema está en su propia raíz y en los males de su financiación y a los excesos de su poder sin contrapesos ni control. Esta es la oportunidad de las nuevas marcas que, como Podemos, surgen por la indignación social frente al saqueo de los recursos públicos y sus consecuencias en los recortes de derechos y servicios públicos.

El mal de la corrupción es el gran filón de Podemos, y está bien que exista una marca electoral sin mácula. Se necesitan nuevos referentes, con expectativas de honradez, al margen de sus proyectos redentores y la inconsistencia gestora de líderes como Pablo Iglesias. Estamos en uno de esos momentos de la historia en que se hace urgente una mudanza, aunque sea arriesgada e incierta. El sistema se merece esa humillación regenerativa. ¿Qué más se puede perder además de la repugnancia?

La gestión del saneamiento del modelo actual deja -demasiado- libres las manos al populismo y se ponderan proyectos de poca enjundia, irreales y dispersos que merecerían un examen democrático más exigente y severo. Este es su filón: se prima el cambio apresurado a la autorregeneración de un estándar político en el que casi nadie cree. Al final, los filones electorales pueden ser ricos y provechosos, incluso necesarios; pero son transitorios. Se agotan en su ansiedad. Esquilman la democracia y la dejan exhausta. ¡Viva la humana imperfección!

4 comentarios en «¡He encontrado un filón… electoral!»

  1. Excelente árticulo. Lo cierto que el tema de las ayudas ha generado una gran polemicadentro de la población. Siempre hay personas que no tienen escrupulos para defraudar. No tienen que ser extranjeros , eto es igual también los de aquí hacen lo mismo. Hay oersonas que encubren sus propios bienes patrimoniales , con el fin de solicitar ayudas sociales. Ahora se las etan quitando y ponen el » grito en el cielo». ¿Qué quieren?. algunos tienen hasta tres o cuatro viviendas, encubiertas , y percibiendo la prestación de ayuda social.
    Y hay extranjeros que son de otros países , por ejemplo Peru , que el descontrol que tienen en sus registros de hacienda , son inmensos, y por lo tanto aquí etan percibiendo las ayudas. Que injusticia.
    Da igual que lapersona sea de qui o de fuera, es la condición humana de quien deliqnqui y etafa.
    Y etoy de acuerdo que hay que favorecer al que no tiene, pero para bienes de primera necesidad, que son los alimentos, sanidad.
    También se etan abonando por parte de las instituciones, complementos de ayuda a familias con pocos recursos con el fin que puedan satisfacer sus hipiotecas. ¿Es justo?. entiendo que no, cuando pueden habitar viviendas de alquiler.
    Y el Sr. Maroto, ante todas eta injusticias , ha hecho algo muy mal,, crgar contra el extranjero cuando el problema es de la condición humana. Quiro decir » poca ctegoria humana».. Y asi quiere gnar votos, para un partido indigno, que no se sostiene . Y si es capaz de hcer eto, con tan poca naturaleza y dignidad, que espera el votante de ete partido?.
    Mucha felicidades por su articulo, y por su valentía en sus manifestaciones que ayudan a ver muy claramente la realidad. Se necesita personas asi.
    Y ppienso asi mismo, que para solucionar todo este «desastre», hay que realizar un cambio total con pesonas valientes , que no tengan miedo a decir la verdad. Excelente árticulo.

  2. Cierto.

    Aunque antes de hablar de la ciudadanía vasca como gente con «mala fe» o «ignorante», también cabe otra posibilidad: tal vez tengan algo de razon en cuanto a la injuticia e insotenibilidad del actual estado de la RGI en Euskadi, y el efecto llamada que ha generado.

    Una sola cifra revelada por el Consejero Aburto en el Parlamento de Gasteiz: el 95% de los ciudadanos de origen Argelino en Vitoria cobran, entre otras ayudas, RGI.

    El 95%.

    Es decir, prácticamente TODOs.

    Existe o no existe un efecto llamada a Euskadipor las ayudas?

    Esta claro.

    Sigamos negandolo.

    Y ni es sostenible, i es justo.

    Y que Maroto sea un oportunista no significa que lo dicho arriba sea cierto y que tengamos un problema, y grave.

    Pero nada, ignorantes y/o de mala fe ….

    Sic …

    1. La mala fe y la ignorancia no son de todos, sino de sus propietarios, los que albergan sentimientos de rechazo hacia otras personas. Allá cada cual con sus rencores.

  3. Egun on !

    Noticia de hoy:

    “La justicia avala que los Estados de la UE nieguen ayudas a comunitarios

    El tribunal aprueba que se denieguen las prestaciones a aquellos que no buscan trabajo

    Ignacio Fariza Bruselas 11 NOV 2014 – 11:52 CET

    La justicia europea avala que los Estados miembros de la UE denieguen ayudas sociales a ciudadanos comunitarios que no ejerzan ninguna actividad económica en su nación de acogida. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha facultado este martes a los países de la Unión a negar las prestaciones del seguro social básico a nacionales de otros Estados miembros que se hayan desplazado a su territorio “con el único objetivo” de obtener una ayuda social. La sentencia del Tribunal de Luxemburgo se basa en la directiva comunitaria sobre el derecho de circulación y residencia, que condiciona el derecho de residencia al ejercicio una actividad económica (tener trabajo) o a disponer de recursos suficientes y que pretende impedir que los europeos se desplacen a un Estado miembro distinto del suyo para hacer uso de su sistema asistencial.”

    Link: http://internacional.elpais.com/internacional/2014/11/11/actualidad/1415701072_974445.html

    En Euskadi, mientras tanto, concedemos ayudas (en teoría de por vida) a quien aquí llegue sin necesidad de haber cotizado, procedente de la UE o de fuera de esta.

    Injusto para quienes aquí han contirbuido (y noteses que «raza», o color es lo mismo) e INSOSTENIBLE.

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