Los suizos han escrutado a fondo el corazón de la radiotelevisión vasca. La consultora South 180, radicada en Ginebra, es la autora del informe “El valor e impacto de EITB en 2023”, resumido en 84 páginas. Por su encuesta a 1600 personas y 50 empresas del sector audiovisual sabemos que la ciudadanía tiene una percepción positiva de sus medios y valora su vocación en la promoción del euskera, deporte, cultura, diversidad, cohesión territorial, igualdad e impulso del cine vasco, que en los últimos premios Goya sumó hasta 33 candidaturas. Y todo esto haciendo equilibrismos con nuestra dualidad lingüística, lo que solo es posible desde una visión/televisión pública.
Sin ánimo de enmendar a los competentes suizos, yo plantearía esta simple ucronía: ¿Cómo imagina hoy la situación del país de no haber existido ETB? Es seguro que informativamente estaríamos dominados por los medios que antes vitoreaban la dictadura de Franco y ahora nos españolizan, que el euskera sería marginal y nos habrían extraviado parte de nuestra autoestima colectiva. Necesitamos más innovación, creatividad e internacionalización. Y producimos poco con los 192 millones que aporta este año el Gobierno Vasco, porque hemos olvidado el humor que nos llevó al paroxismo con Vaya Semanita y perdido la audacia exhibida en Generación Porno y el espacio Necesito ayuda sobre salud mental.
Tenemos buenos diagnósticos, pero no nuevos resultados. Y en la tele son programas, mejores programas. Con una plantilla sobredimensionada, en medio de una brutal revolución tecnológica e insertada en una sociedad exigente, EITB no puede vivir de sus rentas estratégicas y su poderoso simbolismo. Menos huelgas políticas y de privilegio (tres en los últimos cinco meses) y más talento: esto no lo dicen los suizos.
JOSÉ RAMÓN BLÁZQUEZ
Si quitaran el conquistador, que se lleva un dineral del presupuesto, se podrían hacer muchas cosas
Es un programa de éxito en audiencia, difícil de eliminar.
EiTB es, para mí, una cadena comercial más. Siempre que sintonizo radio Euskadi o ETB tienen anuncios. Será que tengo mala suerte. Y la mayor parte de las veces sobre sí mismos, ya sea corporativo o sobre lo que van a emitir, lo que ya han dado, unido a lo abundante de sus cortinillas, fanfarrias y demás presentaciones para noticias con un corto desarrollo… Se hace difícil entender eso en una cadena pública.
Creo que falta lo que apuntas al final de tu comentario : Talento. Y se rellena con tecnología audiovisual.
En mi opinión, les falta contenido cultural, debate social y político y producción propia de calidad. Les sobra concursos y desafíos.
El modelo (salvando las distancias) debería ser la BBC y no Mediaset o Mediapro
ETB tiene anuncios como parte de su financiación. Yo he vivido toda la vida redactando anuncios y campañas de publicidad. Lo cierto es que la publi financia la prensa libre, porque de lo contrario quedaría en manos de los ricos y poderosos, más aún. Los británicos pagan una tasa anual de obligado cumplimiento para financiar su modelo. ¿Estamos dispuestos en Euskadi a pagar esa misma tasa?