La metáfora de la España actual es ese avión del Príncipe que no hace más que dejarle tirado. Los recortes de Mariano han llegado al cielo y en poco más de dos meses, el AirForce Two ha dejado al heredero de la Corona dos veces en tierra. ¿Quién le repara el Airbus al muchacho este? ¿Pepe Gotera y Otilio? De todas maneras hay que ser muy valiente para subirse a algo que vuele, pagado por un gobierno del Partido Popular. Recuerden, si no, aquel Yak-42 con 65 militares muertos, o el helicóptero de Rajoy y Espe estrellado en la plaza de toros. Cosas del bigotes. Aznar compró dos aviones viejos por 172 millones, cuando dos aparatos nuevos costaban 112 millones. ¿Más chanchullos de la trama Gurtell?
La aeronave asignada a la Casa Real ha tenido dos averías serias… igual a la tercera va la vencida. Esto suena a que don Felipe quiere un jet nuevo, por supuesto, con cargo a los Presupuestos Generales del Estado. Pero como no creo que le llegue con la paga que le damos, seguro que le tendrán que dejar un dinerillo la hermana y el cuñado y de paso, inventar algún Plan Pive para aviones. Mucho mejor que vaya en líneas comerciales y arreglado el problema. Le entraría el síndrome de la clase turista y seguro que se olvidaba de tanto viaje diplomático por una temporadita. Y si sigue teniendo ganas de cruzar el charco, le darían puntos para regalarle una vaporetta a Letizia. Venga, ya está, decidido. Que vaya nadando a Honduras, que le prestamos un flotador.