AUSTER ( y el realismo)

El azar es parte de la realidad; continuamente nos vemos transformados por las fuerzas de la coincidencia

Ha fallecido el escritor estadounidense Paul Auster, autor de una singular obra literaria, en la que sobresale por motivos propios su ya famosa Trilogía de Nueva York.Inclinado como soy a la escritura autodiegética disfruté y mucho en su momento con  La invención de la soledad. Y también con una larga reflexión sobre el realismo de la que me hice eco en Aproximaciones a la Razón Narrativa (Historia, Novela, Autobiografía):

«En una entrevista de la obra miscelánea  Experimentos con la verdad, dice Paul Auster a propósito del realismo: “ El azar es parte de la realidad; continuamente nos vemos transformados por las fuerzas de la coincidencia. Lo inesperado ocurre en nuestras vidas con una regularidad casi paralizante. Y sin embargo, existe  una idea generalizada de que las novelas no deberían abusar de la imaginación. Todo lo que parece improbable se considera necesariamente forzado, artificial, irrealista. No sé en qué realidad ha vivido esta gente. Están tan inmersos en las convenciones de la  denominada  literatura realista que su sentido de la realidad se ha distorsionado. En estas novelas, todo ha sido uniformado, despojado de su singularidad, encerrado en el predecible mundo de causa y efecto. Cualquiera que tenga la sensatez de asomar la nariz fuera del libro y analizar lo que tiene frente a él, comprenderá que ese realismo es una absoluta farsa. Para decirlo de otro modo: la verdad es más extraña que la ficción. Supongo que mi propósito es escribir una ficción tan extraña como el mundo en que vivimos”.

La cita merece la pena, ya que en ella se plantean, al menos, dos interesantes  cuestiones. La primera  es la que  intenta desbaratar la convención del realismo, mostrando la falsedad de la ecuación realidad = representación realista. Aquí Auster no puede ser más explícito: por lo general, eso que  se llama «realismo» es una absoluta farsa ya que pretende hacer pasar por una representación exacta de la realidad lo que no es sino una reducción uniformada de la misma, sometida a la coherencia obligada del vínculo causa – efecto. Sabiendo, desde Schopenhauer, que el mundo es, para los seres humanos, fundamentalmente representación, lo que el escritor norteamericano apunta es el abuso de una modalidad de representación que se afirma como normativa de todas las demás, utilizando para legitimarse un sentido común que suele tener  muchos intereses particulares. El realismo, así, no es tan inocente como parece, además de ser falsario.

La segunda es la distinción implícita entre fantasía e imaginación, proponiendo la  incorporación de esta última al dispositivo creador y desterrando la primera  como potencia falseadora y  pretenciosa. En efecto, el uso de  la imaginación  abre   la exploración de lo que podría ocurrir a partir de lo que ocurre, incorporando la dimensión del azar. Por el contrario, el recurso a la fantasía opera con una combinatoria arbitraria de ocurrencias que reivindica, al cabo, una verosimilitud imposible. Como se ha podido ver en muchas ocasiones, la confusión terminológica y, sobre todo, conceptual, entre estas dos potencias humanas, abre camino a  su sinonimia, haciendo un flaco favor al espíritu crítico.

Además, curiosamente, de la reflexión cruzada acerca de estas dos cuestiones, puede llegar a deducirse que lo que Auster denomina «realismo», o «representación realista»,  es  más bien el fruto de un empleo inconsciente del recurso de la fantasía, y que su propuesta literaria, tildada por algunos como  de pseudo ciencia-ficción, resulta de una aplicación muy medida de la tantas veces confundida imaginación»( 48-50).

Y reproduzco estas palabras de Auster – que, por cierto, presentó en septiembre de 2017 en Azkuna Zentroa de Bilbao la novela ‘4 3 2 1‘ – porque acaso pueden servir de referencia reflexiva en estos tiempos de auto-ficción en el espacio literario… Y de fake-news en el ámbito político…

(c) by Vicente Huici Urmeneta

PRIMERO DE MAYO ( ¿del 71?)

El primero de mayo de 1971, durante el gobierno de la Unidad Popular ,se celebró en la Plaza Constitución de Santiago de Chile, una gran concentración con la presencia del Presidente de la República, Salvador Allende Gossens como único orador, que comenzó su discurso diciendo : «Trabajadores de Chile: Éste no es un día de fiesta; éste es un día de recuerdo, de rememoración. Un día para mirar hacia atrás, más allá y dentro de la frontera de la patria y rendir un homenaje a todos aquellos que, en distintas latitudes, cayeron luchando por hacer más digna la vida del hombre…».

En aquellos años todavía se confiaba en que era posible una vía democrática hacia el socialismo, pero pronto se pudo ver que en el marcado juego democrático, las fuerzas conservadoras, apoyadas por el imperialismo, no iban a consentir que el Estado fuera gestionado por las coaliciones progresistas. Y así, como es bien sabido, el 11 de septiembre de 1973,tras unos meses de desestabilización trufado de insidias y algaradas, el gobierno de la Unidad Popular fue derrocado por un golpe de Estado encabezado por el general Augusto Pinochet, desatando una terrible represión.

Entre tanto, en 1972, el cantautor Oswaldo gitano Rodríguez, había compuesto una canción-En la plaza del pueblo, primero de mayo del 71 – que dio para siempre testimonio de aquel entusiasmo , y que decía:

En la plaza del pueblo
Primero de mayo del 71
En la plaza del pueblo
Primero de mayo del 71
Hay que cantarle a todos los trabajadores
que allí se juntan
Por eso nos citan muy temprano
aún no llega la gente, la plaza está vacía.
De pronto se oyen los parlantes
llamando voluntarios a cargo del transporte
deben llevar a varios compañeros
al punto de partida
De la maratón obrera
que del cerro a playa ancha
está a punto de largarse.
Cumplida ya esa tarea
el acto ya comienza y la gente va llegando
Llegan los hombres del puerto
con sus implementos de trabajo
La plaza se cubre de banderas
sigue llegando gente con lienzos y estandartes.
Saludo a los estudiantes
que han llenado la plaza de gritos y clarines
El tambor resuena y el clarín nos llama
a todos a la lucha
Y canto un canto que les dice
que ya nada ni nadie podrá deternernos.
En la plaza del Pueblo
Primero de mayo del 71…

Hoy que se celebran varias manifestaciones para celebrar el Primero de Mayo no estaría de más recordar por lo menos aquel entusiasmo…de 1971…

(c) by Vicente Huici Urmeneta