DOS LECTURAS ( y una peli)

«TESTAMENTO» (Denys Arcand, 2023)

Ya que no me veo particularmente inspirado a fuer de sudoroso no ya para dar cuenta de los eventos consuetudinarios que acontecen en la rúa – que son muchos y agrios, por cierto- ni para juntar las diecisiete sílabas de un haiku, creo que debo insistir en las recomendaciones de lectura de los escritos de algunos buenos amigos que permanecen activos, pluma o tecla en ristre.

Así, y en primer lugar, la estupenda recensión que ha llevado a cabo Iñaki Urdanibia sobre del octavo tomo del Journal hédoniste– La foudre gouverne le monde- El rayo gobierna el mundo- de Michel Onfray, en la que , además, se hace un interesante y sugerente recorrido de la obra completa de este polémico pensador francés.

Por otro lado, en otro registro y en un medio asaz diferente, me ha gustado mucho el artículo de Jesús Ferrero titulado «De bosques y emboscados», en el que se recupera la figura del «emboscado» de Ernst Jünger ampliándola hacia otras similares en las que se manifiesta una leve apología de la serenidad.

Y, si se me permite, quiero cerrar esta breve entrada con una recomendación cinematográfica para rebajar la cierta severidad que pudieran ocasionar las menciones ensay´ísticas anteriores: se trata del film Testamento (2023),(M+), del director quebequense Denys Arcand- muy conocido por  El declive del imperio americano   (1986) y su continuación dieciocho años después: Las invasiones bárbaras – que viene a ser un canto optimista en tono menor en un mundo de corrección política máxima, identidades radicalmente contrapuestas, activismo polimorfo y tifones mediáticos…

(c) by Vicente Huici Urmeneta

CANÍCULA (¿activa?)

He comprobado que entre mis amistades la tecla está rielando sobre la pantalla más que la luna sobre la mar salada.

Soy más de primavera y de otoño que de verano, pues no llevo bien ni el sol ni el calor ni ninguna de las actividades aeróbicas adjuntas, por lo que nada más alejado de mi imaginario paraíso que una playa sin fin festoneada de palmeras y cocoteros.

Esta disfunción veraniega solo la he podido sobrellevar hasta hace poco proponiéndome lecturas drásticamente homeopáticas, pasando de Hegel a Heidegger, y llevando un esforzado diario filosófico, a veces hasta moderadamente publicable.

Pero este verano, y supongo que será cosa de la edad, me he dedicado a la relectura reposada de la Odisea, comprobando que mis desdichas caniculares nada son comparadas con las mayores de aquel gran sufridor que Ulises fuera, y escribiendo algún que otro haiku bajo la sombra de algún árbol piadoso y en compañía de un aperol spritz bien preparado.

Sin embargo, he comprobado que entre mis amigos, conocidos y saludados – que decía Josep Pla- la tecla está rielando sobre la pantalla más que la luna sobre la mar salada.

Así, mi viejo amigo el catedrático de la UNED Paco Martínez ha escrito una interesante aproximación sobre los nuevos rumbos de nuestra exterioridad centrándose en las cuentas pendientes con Oriente y particularmente con China.

Por su parte ,el reconocido historiador Fernando Miquelarena ha profundizado en la investigación sobre la conspiración franquista en Navarra aportando nuevos y relevantes datos.

Y finalmente el recientemente nombrado Consejero de Universidades e Investigación del Gobierno Vasco, Juan Ignacio Pérez, nos ha proporcionado una sugerente reflexión sobre la íntima patologización general básica en la que sobrevivimos.

Y supongo que es de agradecer que , a pesar de la canícula, se mantengan firmes gentes como las mencionadas para que nuestras neuronas no se adormezcan más de lo necesario y terminemos por ser víctimas de una galbana absoluta…

(c) by Vicente Huici Urmeneta

EL TENDEDERO ( un relato de Juana María Castro)

Publico hoy este delicado y sugerente relato de Juana María Castro, participante del Taller Literario que llevo animando desde hace unos años.

EL TENDEDERO

Un comentario radiofónico fue suficiente para que una luz de realidad cotidiana me hiciera reflexionar sobre lo poco que atendemos u observamos lo que nos rodea, trivialidades que ni siquiera percibimos por la velocidad en la que transcurren nuestras vidas. Esto sucede con los tendederos que suelen encontrarse en los patios interiores de las comunidades de vecinos.

Dicho sea de paso, nunca he prestado mucha atención a lo que cuelgan los demás en sus tendederos. Quizá porque lo hago deprisa, para terminar cuanto antes, porque no me parece una actividad muy enriquecedora ni trascendental, más bien lo considero una mera obligación de intendencia. Jamás hubiera creído toda la información que se puede obtener sobre las personas que conviven con nosotros en la comunidad, pero lo que escuché en ese programa hizo que abriera la ventana de mi cocina y mirara para ver, para encontrar vidas ajenas colgando en alambres, sujetadas por pinzas en la seguridad de que no se irán volando lejos. Vidas infantiles y adultas, en algunos casos mezcladas, como flores textiles coloreando los frontales de las ventanas. En unas casas había vidas en evolución, distintas generaciones compartiendo emociones y experiencias.  En otras solo vi ropa de adultos, personas solitarias por elección o solas por imposición vital.

Detuve la observación en unas lentas manos huesudas y arrugadas. Trataban de colgar un vestido bien estirado. Poner las pinzas suponía una hazaña épica para mi vecina. En su tendedero, con el viento bamboleando la solitaria prenda, pude ver su melancolía. Ella, la mujer que hacía diez años llenaba sus alambres con vidas diversas, ahora tiende su soledad. Sus dos hijas se independizaron, se fueron a vivir lejos. Su marido murió cuando paseaban por un parque de la localidad, de repente. Lo peor llega por la noche, cuando la llave de su nostalgia cierra la puerta dejándole con el doloroso silencio del recuerdo y el miedo a morir en soledad. Todo me lo contó ella dos días después, cuando coincidimos en el rellano y, por fin, charlamos. Vivimos aislados en comunidad, indiferentes a nuestro alrededor, en el anonimato del educado saludo diario.

(c) Juana María Castro

¿INVESTIGACIÓN (qué?)

Es de esperar que se tenga más en cuenta el ámbito de investigación human´ístico-social, pues es en su ámbito donde se van a mostrar con mayor claridad y distinción las grandes cuestiones de la conflagración cultural que está detrás de muchos problemas socio-económicos y politicos que tanto nos acucian.

En 1987, siendo coordinador del Departamento de Historia de UNED-Bergara, salió el primer número de la revista LA(S) OTRA(S) HISTORIA(S) en la pretensión de llevar a cabo una reflexión sobre los métodos y los temas de la investigación histórica en un momento en el que predominaba todavía la Historia política y la metodología oscilaba entre un marxismo de manual y un positivismo general básico.

La publicación tuvo un cierto éxito y en los sucesivos números que vieron la luz hasta 1994, se trataton, siempre desde una perspectiva histórica, temas por entonces novedosos como la sexualidad y el matrimonio, la vida cotidiana o la actitud ante la muerte, así como algunas derivas metodológicas escasamente conocidas en estos lares como las de Annales o la de la obra de Michel Foucault. Entre el elenco de participantes destacaron autores y autoras como Antonio Campillo, Isabel Pérez-Villanueva Tovar, Antonio Morales Moya, Amparo Moreno, Juan Aranzádi, Juan Madariaga o Carlos García Gual.

He recordado estas circunstancias al escuchar por la radio una entrevista con Laida Arbizu Agirre, que investiga en su tesis doctoral en Filosofía las raíces y desarrollo del negacionismo científico.

Y si lo he recordado ha sido porque de nuevo, me ha parecido sugerente poner de relieve este tipo de investigaciones del ámbito de las humanidades o de las ciencias sociales que frecuentemente son ninguneadas a la hora de hacer un balance global, llevándose siempre la primacía aquellas del mundo fisico- técnico de base empírica por corresponderse a una definición autorreferente de lo que puede ser La Ciencia.

Aquella iniciativa de LA(S) OTRA(S) HISTORIA(S) fue al cabo muy limitada, pero es de esperar que desde las instituciones correspondientes se tenga más en cuenta este ámbito de investigación human´ístico-social, pues, sin menospreciar el de las ciencias llamadas puras o, en el mejor caso , «aplicadas», es aquel en el que se van a mostrar con mayor claridad y distinción las grandes cuestiones de la conflagración cultural que están detrás de muchos problemas socio-económicos que tanto nos acucian.

(c) by Vicente Huici Urmeneta

EL NUEVO FRENTE POPULAR ( y los bárbaros)

El objetivo final es el predominio de la etnia blanca y de sus supuestas sanas costumbres.

El NFP ha resultado mayoritario en la segunda vuelta de las elecciones legislativas francesas. Para muchos y para muchas, los bárbaros han sido detenidos a las puertas del Ágora.

Pero mi amigo Mikel, el sociólogo, dice que probablemente ha sido una victoria tan pírrica como táctica, porque el programa de la extrema derecha tiene «un alcance estratégico en el hexágono y en el resto del mundo» (sic).

Y en ese programa, continúa, una de las puntas de lanza es el restablecimiento demográfico de la etnia blanca ante el avance de las otras etnias que por diversos motivos se han ido sumando a la población occidental:

«Así, las discrepancias sobre el derecho al aborto entre Macron y Meloni, el repliegue político-sanitario ante el mundo LGTBI + y su repercusión en el movimiento feminista, o incluso la más reciente discusión sobre la difusión de la pornografía, apuntan a condenar toda actividad sexual no reproductiva, mientras, por otro lado, se hipersexualiza la moda de niñas y adolescentes y se comenta la alta reproductividad de los inmigrantes».

A mí todo esto me recuerda las consideraciones de Historia de la sexualidad, de Michel Foucault que ya advirtió que la política acerca de lo que en Occidente se ha denominado «sexualidad» no es sino una manera de regular la población ,ejerciendo un «bio-poder» que abre o cierra la mano según las coyunturas socio-económicas y que puede pasar de la represión más estricta a la libertad más absoluta.

Así pues, convengo con mi colega, habrá que mantener la atención, pues del objetivo final de hacer predominar a la etnia blanca y sus supuestas sanas costumbres, es muy posible que se vayan derivando progresivas y sutiles restricciones que se intententarán manifestar como «de sentido común » , que, como se sabe, es el menos común de los sentidos…

Y advertidos y advertidas quedamos …¿Inmóviles esperando a los bárbaros?

(c) by Vicente Huici Urmeneta

¡HA ESTALLADO LA FIESTA! ( ¿qué fiesta?)

La derecha impuso a lo largo de los años su modelo sanferminero hasta el punto de que hoy, como en tantos otros casos, parece «el de toda la vida».

He quedado con Koldo a la sombra de la terraza del Café Iruña para vernos un rato.

A estas horas, primeras de un tarde que será larga, la ciudad yace muerta tras la convulsión de las vísperas sanfermineras. El suelo todavía está pegajoso y de todos los rincones llegan efluvios de orines y vomitonas, a pesar de los esfuerzos de varios equipos de limpieza que, disfrazados de verde, dan vueltas sin fin a la Plaza del Castillo. Pronto se oirá el tintineo de los cascabeles de las mulillas yendo hacia el coso taurino.

Koldo –un Koldo de los de siempre que nunca se llamó Luis– es un joven historiador y ha llevado a cabo lo que él llama una “arqueología de los sanfermines” porque siempre le extrañó que bajo un régimen tan autoritario como el franquista –“¡El Régimen”!– se permitiera tamaño desmadre colectivo como las Fiestas de San Fermín, unas fiestas que convertían a Pamplona en una ciudad sin ley durante ocho días al año. Koldo dice que la clave de todo está en la Cruz Laureada de San Fernando – popularmente llamada » la berza»- que le fue otorgada a Navarra “por su contribución al Alzamiento Nacional de 1936”.

Esta Cruz, continúa Koldo, sirvió a la derecha navarra para hacer de su capa un sayo y, poco a poco, gentes como los Baleztena, los Pérez Salazar o el mismo Maestro Bravo, fueron diseñando toda una parafernalia festiva que incluía canciones como el “Uno de enero”, el uniforme blanco con el pañuelo rojo o la ceremonia del cohete el día seis de julio.

La derecha impuso a lo largo de los años su modelo sanferminero hasta el punto de que hoy, como en tantos otros casos y lugares, parece «el de toda la vida», y cuando el modelo oficial se torció políticamente, y así fue en 1978, no dudó en sacar de nuevo las armas a la calle, desalojando a tiros la plaza de toros (Vaya aquí un recuerdo para Germán Rodríguez, compañero de clase en los Hermanos Maristas, asesinado de un balazo en la cabeza ).

Yo escucho a Koldo atentamente porque veo que se ha ido enfadando mientras me participaba sus hallazgos: nunca resulta fácil abandonar los mitos familiares y más aquellos tan arraigados desde la infancia. Pedimos otro pacharán con hielo que nos sirve un camarero medio dormido.

El pacharán hace su efecto retardado y Koldo se serena. Algunos, muchos creo yo, somos hijos de las dos partes que en su momento helaron los corazones.

Un viento flojo, denso y mal oliente, me aparta de mis pensamientos. Koldo se ha dormido, A mi izquierda se abre una ventana en el Hotel La Perla y asoma por ella un gran barbudo que parece la reencarnación de Ernest Hemingway. Saluda tímidamente y yo le devuelvo el saludo…Desde la calle Chapitela se va oyendo subir un pasodoble…

(c) by Vicente Huici Urmeneta

CHILLIDA-ORTEGA MUÑOZ ( o la apertura de un poema)

La muestra evoca más la apertura vertical de un poema que la narrativa horizontal y deambulante que se suele ofrecer habitualmente en la mayoría de las exposiciones.

Ayer por la tarde y en el contexto del programa BBKateak, se inauguró en el Museo de Bellas Artes de Bilbao, la exposición Eduardo Chillida – Godofredo Ortega Muñoz.

El programa BBKateak promueve encuentros entre obras de artistas de la colección y en este caso Javier González de Durana, coordinador artístico de la Fundación Ortega Muñoz (Badajoz), ha seleccionado doce obras de Chillida -siete esculturas y cinco obras sobre papel- y nueve pinturas de Ortega Muñoz, ofreciendo un singular diálogo.

En principio, la distancia cronólogica – Godofredo Ortega Muñoz (1899- 1982) Eduardo Chillida ( 1924-2002) – y estilística entre ambos parecería más bien apuntar a registros muy alejados entre sí y , sin embargo, la muestra manifiesta una sutil conversación de líneas, colores y vacíos.

Probablemente estas confluencias se deben a que ambos participaron, cada uno a su manera, de un impulso común de modernidad, ajeno a las viejas contraposiciones entre realismo/ abstracción o tradición / vanguardia , formalizando una obra un tanto ajena a las modas, y de connotaciones diversas, como sugerí en su momento en relación a Ortega Muñoz.

La muestra permanecerá abierta hasta el 30 de setiembre y merece una visita detenida y reposada que evoca más la apertura vertical de un poema, en palabras de Gaston Bachelard, que la narrativa horizontal y deambulante que se suele ofrecer habitualmente en la mayoría de las exposiciones.

(c) by Vicente Huici Urmeneta

EL PASEANTE ( 8 años y un día)

Con la que estás leyendo, querido amigo ( y querida amiga, of course) alcanzo el número de 1.500 de entradas en este blog, desde que se inició a finales de la primavera de 2016.

Antes de nada quiero agradecer a DEIA la mano abierta que ha mantenido a lo largo de estos ocho años aun cuando lo que aquí haya podido publicarse fuera en algunos casos divergente del tono general del diario: supongo que esta actitud es una consecuencia más de unos tiempos en los que algunos y algunas estábamos del mismo lado frente a la arbitrariedad censora de la dictadura franquista.

Repasando estos apuntes, mayormente escritos a vuelapluma tras un paseo o una conversación, me he dado cuenta de que he ido tocando casi todos los palos, desde la vida cotidiana de barrio hasta la actividad cultura o la dinámica política, procurando que en algún momento  asomara la sonrisa ante el absurdo o  el delirio ( individual o colectivo) y que me lo has agradecido.Y de los personajes que han ido apareciendo ¡qué te voy a decir! Que todos  forman parte de mí mismo, como ocurre, según el psicoanálisis, en aquellos más profundos sueños. Así que aquí  también se podría aplicar  aquello de Flaubert : «Madame Bovary c´ est moi» ; salvando, por supuesto ( ¡por supuestísimo! ) , las distancias.

Pero la literatura – que es lo que al cabo pretendo hacer en este pequeño formato – debe generar lo verosímil  lo cual es todavía más difícultoso si se opta por eso que ahora llaman autoficción. De ahí que, de vez en cuando, algún lector o lectora haya comprobado con celo crítico anglosajón  que no había estado donde mis palabras decían o que  donde yo había puesto sol todo era lluvia.

En estas maniobras en la oscuridad y para que brillen las palabras desde sí mismas,  algún maestro se ha de tener , y el mío ha sido Josep Pla, un a modo de japonés nacido en el  Empordá,  que más allá de ser un anarquista de derechas dio a luz un Calendario sin fecha que es al cabo lo que este blog ha pretendido llegar a ser con fecha, en ocasiones de caducidad, y sin suscribir sus principios ideológicos.

En fin, puestas las cartas boca arriba, si a partir de ahora continúas siguiéndome, querido lector, querida lectora, mon semblable, mon frère ( y ma soeur, of course), ten siempre presente que si lo que cuento tiene algo que ver con la realidad, será culpa de la realidad, como decía  con toda seriedad mi tío el novelista Julio Manegat que fue quien me metió   en estos embrollos desde muy chico , rescatando una tradición muy anclada en la rama familiar de los Urmeneta, con mi abuelo el jelkide Ataúlfo – Latz- a la cabeza que ya publicaba sus columnas en La voz de Navarra … Vale!

(c) by Vicente Huici Urmeneta

ABANDO HABITABLE ( 5 aniversario)

De los ocho años que lleva en circulación este blog, cinco han tenido como uno de los protagonistas relevantes a la Asociación Abando Habitable y Saludable que ha defendido desde el principio la ilegalidad del proyecto de construcción de un enorme edificio de ocho plantas y cinco sótanos, en el barrio bilbaino de Abando..

Ya en junio de 2019 mostré mi sorpresa y mi tristeza ante la sospecha de que la operación fuera un simple pelotazo urbanístico que, concertado entre el Obispado de Bilbao y la constructora MURIAS con el concurso de MUTUALIA, se llevara por delante un edificio singular , sede de la Escuela de Magisterio Begoñako Andra Mari (BAM) de la que guardo un cariñoso recuerdo. Pero, por entonces, todavía esperaba que se abriera «un diálogo sincero» para llegar a un acuerdo, antes de que se  provocara «un desastre urbanístico ,así como enormes pérdidas económicas a Murias, a Mutualia y , por supuesto , al Obispado, dejando a BAM ,acaso, en la cuerda floja».

Desgraciadamente aquellas previsiones se han cumplido. Se derribó el edificio, se retrasaron las obras por la irrupción de la pandemia del COVID-19 y por diversos problemas legales ,y finalmente la entrada en concurso de acreedores de la empresa URBAS que había absorbido a MURIAS en plena crisis, ha traído como consecuencia la paralización definitiva del proyecto, dejando, eso sí, un gran agujero en medio del barrio.

Un agujero físico, pero también metafísico. Físico porque se muestra como una herida urbana, mal desinfectada y peor cuidada. Metafísico, porque su razón de ser ha sido reformulada una y otra vez al albur de las sucesivas correlaciones de intereses, pasando de la condición de lugar apropiado para la ordenación de lo espiritual a espacio abstracto y porcentual de pingüe negocio. Y un agujero también moral por el que se han precipitado problemáticas recalificaciones urbanísticas de la mano de quienes se supone deben ordenar el territorio -el Trono- y de quienes defienden en otros ´´ambitos una estricta pureza ética- el Altar.

Y, como ya me hice eco en la última reflexión al respecto, nada de todo lo anterior hubiera ocurrido si se hubiera hablado más y mandado menos – pues lo que tenía salir mal ha salido mal- y si se hubiera tenido un poco más de coraje cívico y de verdadero compromiso ciudadano, algo que, hasta ahora, solo ha demostrado la Asociación Abando Habitable y Saludable en estos últimos cinco años de lucha pacífica y reivindicativa…

(c) by Vicente Huici Urmeneta

TEATRALIDAD Y VIDA COTIDIANA (de Carlos Panera)

Hoy, a las siete de la tarde y en la librería FNAC-Bilbao, tendré el gusto de participar en la presentación de Teatralidad y vida cotidiana, de Carlos Panera Mendieta.

Como he dicho lo haré con mucho gusto y por tres razones.La primera y la más importante porque se trata de un amigo de una larga duración en la que hemos compartido avatares varios tanto en lo personal como en lo profesional.

La segunda, en tanto que académico, pues en su momento tuve la oportunidad de formar parte del Tribunal de la Tesis Doctoral en la que se fundamenta este libro y que obtuvo la calificación de sobresaliente cum laude.

Y en tercer lugar como editor, ya que que desde el primer momento me ocupé de encauzar el texto que desarrollaba aquella investigación hacia una obra adsequible que recogiera lo fundamental de esta sugerente y amplia aportación.

Una aportación que desvela, desde un punto de vista multidisciplinar, la trama de roles que desempeñamos en la vida cotidiana así como la sublimación estética tan histórica como por otro lado atemporal que ha supuesto la existencia del teatro como arte y en el que el autor ha estado implicado durante largos años, sobresaliendo su trabajo como director de la famosa compañía Maskarada.

Es de esperar que esta obra , prologada por Carles Sans (Tricicle) e ilustrada con fotografías de Ernesto Valverde, sirva de referencia para quienes han estado , están y estarán implicados directamente en la escena, pero , sin duda, otros profesionales del mundo de la sociología , la psicología o la antropología pueden sacar mucho y buen provecho de ella.

(c) by Vicente Huici Urmeneta