2 comentarios en «De las trampas. Ocurrencia»

  1. Los estrambóticos y estrapados entrampados no malefician al tramposo.
    Incluso les he visto alardear de que su tramposo era más poderoso que el de otros.

    Timorato es el que teme a los dioses, pero valdría para expresar miedo a los banqueros.
    Y de la timocracia, ni hablamos, no sea que provoque subidas en el precio de las medicinas y los combustibles fósiles.

    Nada más. Si se me ocurriera algún nuevo comentario, no dudaría en adquirir un nuevo código CAPTCHA. Un abrazo.

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