Y dijeron que venían a renovar la política

Viernes 13 de abril de 2018

La fotografía es el premio World Press 2018 que ha dado la vuelta al mundo. La obtuvo Ronaldo Schemidt al joven de 28 años José Víctor Salazar en una de las muchas manifestaciones habidas en Venezuela y que el año pasado costaron la vida a 130 personas.

Y quiero que ilustre este comentario pues le he visto hoy a Juan Carlos Monedero, en la manipuladora Sexta, darnos clases de democracia cuando él asesoró a la dictadura chavista y se siente orgulloso de la deriva venezolana que ha pasado de una democracia imperfecta a una dictadura corrupta y ruinosa con el 15% de su población joven huyendo del país.

Y ayer, Pablo Iglesias, ante la petición de Errejón de presentar su candidatura conjuntamente con su equipo salió de mala manera diciendo que “ni media tontería” solo la doble vuelta. Pablo Iglesias era aquel señor que venía a luchar contra la Casta y sus modos de actuar y de momento lo que vemos es un lenguaje y un accionar más deletéreo para la ciudadanía que lo que hacía la famosa Casta. Y para colmo, a dedo, se carga el mejor derecho de la portavoz actual de Podemos en la Asamblea de Madrid, Lorena Ruiz Huerta y trata de imponer a Errejón, pero con equipo Pablista.

Y, para colmo, este Errejón es el sancionado por la Universidad de Málaga por cobrar 1825 euros al mes y no pisar la Universidad de Málaga que era la que le pagaba un trabajo prescindible que no hemos visto. Como aquel espinar el del pisito conseguido por su padre. Consejos vendo anticorrupción que para ellos no tienen.

Ya ven. En pocas palabras: Venezuela, quitarle a la portavoz, imponer como Stalin un candidato pero sin su equipo, y un candidato tan sospechoso como Cifuente. Ante eso la pregunta se impone: ¿eran estos los renovadores de la democracia?.

Que venga Fraga y lo vea.

3 comentarios en «Y dijeron que venían a renovar la política»

  1. Y vosotros decías que erais independentistas, euskaldunes y honestos…

    Ya ves…

  2. Siempre se le puede pedir consejo para renovar la democracia a Alfredo De Miguel o alguno otro de los 25 restantes (el aire fresco del PNV).
    Y si somos nostálgicos, podemos acordarnos de algunos del caso Azpeguitura.
    Saludos,

  3. Ese asunto, el caso De Miguel, va camino de resultar tan largo en el tiempo como el del nada honorable Pujo, la «madre superiora», su camada y sus «misales».

    Del otro no recuerdo nada, en este momento:¿caso Azpeguitura?

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