El Edificio del Tigre

[BILBAO OCULTO] Hoy descubrimos a nuestras leídas lectoras el Edificio del Tigre joya arquitectónica oculta en las playas de la Ribera de Deusto, Bilbao, Bizkaia, España. Instalado en octubre de 1942, este tigre de hormigón fue obra del artista y músico txirene Roca Baretas que por entonces trabajaba de hojalatero en el Circo Price con los elefantes. La instalación artística se llevó a cabo a petición del capataz de la empresa Correas para no bajar el ritmo de producción y evitar a los obreros tener que salir a hacer sus necesidades más perentorias a la Ría. En la actualidad, cuando no sube la marea, funciona como WC en auzolan y curiosamente es lo primero que visitan todos los turistas de los cruceros atracados en Getxo al llegar de visita a la Villa de Bilbao. Domingos y partidos, cerrado por mantenimiento.

Alfred Hitchcock en Bilbao

1959 – Rara estampa del ex-británico y director Alfred Hitchcock de visita en Bilbao. La verdad es que poca gente leída sabe que para el guión de su famosa película de miedo «The Birds», se inspiró observando en Abandoibarra a los bilbainos y bilbainas botando barquillos a las agresivas gaviotas de la Ría mientras les cantaban el hipno «Txoria Txori» de Mikel Laboa para tranquilizarlas. «¡Mira qué txinbos!», se dijo (en inglés, claro). Los bilbainitos y bilbainitas, en agradecimiento al gran director por difundir la marca «Be Basque» en la peli, le montaron al estadounidense un museo en el «Urdaibai Bird Center», dónde además tiene un busto, alpiste y unas bolas navideñas plateadas a las que sacan cantidad de fotos.

La Vuelta terminaba en Bilbao

[HISTORIA DEL CICLISMO ESPAÑOL] La Villa fue final frecuente de nuestra querida Vuelta ciclista a España, es decir, a Bilbao, dónde se escribieron algunas de las páginas web más bellas de la Historia del Ciclismo. Sin embargo, se suspendió 13 veces entre 1955-1970 debido a la increíble dureza de los puertos vizcaínos con abandonos en grupetto. En esta bella estampa inédita por supuesto, fechada en septiembre de 1958, Jesús Loroño, único vizcaíno superviviente de la etapa Barcelona – Bilbao, coronó en solitario la mítica cima del Infernuko Mendi (2.526 m, 30% desnivel medio) en la Sierra del Pagasarri, después de demarrar dejando al «Aguila de Toledo» aka Fermín Bahamontes clavado en la curva de la Neska, a 140 kms de meta. Ciclismo épico CON MAYÚSCULAS, solo para deportistas hechos de una pasta especial que no se metían pastis con clembuterol ni txooorradas de esas, tal como acostumbran los tikismikis di ihiri. VOX Populi es que esta gentuza ensucia el Deporte CON MAYÚSCULAS y solo pedalea a golpe de filete y alardeado solomillo de Irún. Horrela Ez, Be Basque, Be Vegan!