Postureo de Todo a un euro

La controvertida imagen en el yate de C. Tangana.

La foto harén de C. Tangana en plan macho de éxito, rodeado de pibones, está dando mucho de sí. Este fulano, al igual que casi todos los tontubers, instapotxis, gilitokers y demás tontos a las tres, piensan que es mejor que hablen de ti, aunque sea mal. Por eso ha posado en un yate, como Jesús Gil en el jacuzzi, y ha acabado tirando del mismo estereotipo de semental rodeado de macizas para promocionar una canción.

El rapero se exhibe repantigado en la cubierta y rodeado de una decena de chicas en bikini en actitud provocativa y culos en pompa haciendo de posavasos. Todas poniendo morritos con un tipo muy culto que canta letras como “La pego y la araño, en el club o el baño / no voy a dejar de darte hasta que te haga daño”. Lo peor de todo es que ahí posan algunas señoritas que son muy feministas de lunes a viernes, pero el fin de semana libran. Todas, por supuesto, muy progres, hasta que hay pasta y likes de por medio.

Feministas de salón y postureo del todo a un euro que luego se apuntarán al Me too. ¿Qué hace que a diez jóvenes les mole aparecer en una imagen como si fueran trofeos de caza o las escorts de un mafioso? Para aquellas que argumentan que son mujeres empoderadas que hacen lo que quieren, habría que preguntar qué sucedería si en la foto saliera, pongamos, Bertín Osborne. Y si no ¿a cuento de qué se han eliminado las azafatas que entregaban ramos de flores en la Vuelta?

Horteras de bolera, Moet y Don Perignon

Seguro que les suena. Ocho pijos se dan un homenaje en un restaurante de Marbella y acaban pagando 4.098 €. Hasta ahí no tendría nada de especial porque podría ir a cargo de una tarjeta de empresa en el epígrafe «Desayuno de trabajo». Pero va un chulopiscinas, a la sazón usuario de Twitter, cuelga el ticket en la red y comprobamos estupefactos que han tomado ocho hamburguesas wagyu, unos chupitos, y han regado la comida con Moet Ice y un Magnum Don Perignon de 1.000 lereles. Una paletada en toda regla.

Esa cuenta nos dice varias cosas; la soberbia de quién comparte esta factura, la horterada de mezclar hamburguesas con champagne y un postureo de libro. Solo por idiotas, tendrían que haberles cobrado el doble. Es como si van con un Ferrari a echar gasolina al Carrefour. También corrobora el ya habitual timo de la estampita/ alcohol donde facturan tropecientos mil más de lo que cuesta la botella, y te pueden cobrar agua a precio de cubata. Pero el local no engaña a nadie, si no se deja engañar.

El internauta se queja de que les carguen 372 € de servicio y el camarero vaya detrás de ellos porque no habían dejado propina. ¡Criatura! si te gusta hacer el primo, hacer una ostentación ridícula y os han cascado un montón de pavos en los moet y el perignon, hay que ser cutre para no dejar algo a los camareros. ¡Pobrecitos niños pijos. Tendrán que pedirle a papá y a mamá que les suban la paga!

El Fugas. Año I

Ahora que se cumple el primer aniversario de ‘El Fugas’, hemos conocido el último acto del sainite borbónico en el que resulta que Corinna ha demandado al Emérito por acoso y espionaje. La denuncia, presentada ante la justicia británica, sostiene que el CNI le realizó una “vigilancia ilegal” a partir de 2012 y pide una orden de alejamiento para Juan Carlos I. ¿Una orden de alejamiento para un octogenario que está a miles de kilómetros de distancia y se mueve a duras penas?

Desde que el campechano le pidiera que le devolviera los 65 millones de euros que le había transferido desde una fundación panameña radicada en Suiza, la aristócrata no deja de dar la brasa. ¡Santa Rita, Rita, lo que se da no se quita! Hablamos de un culebrón casposo con personajes más casposos aún. Pero no nos engañemos, esta no es la ingenua historia de “El príncipe y la corista”, sino una desgraciada deriva de poder, lujo, dinero y otras cosas.

Con quién se acueste el Borbón, mientras le pague él los vicios con su dinero no es nuestro problema, pero que utilice los medios de Estado, que tenga la pasta en paraísos fiscales, que defraude a Hacienda y sea, (todo supuestamente claro), un vividor comisionista, sí. Es evidente que esta mujer es exactamente lo que parece y él, también. Lo más grave es que Juancar se debe estar partiendo la caja, disfrutando de un dorado retiro, cachondeándose de todos sus vasallos (especialmente de los súbditos de baba fácil) y de la justicia, sabiendo que no le van a tocar un solo pelo de su real trasero porque es inviolable.

Comemos carne por encima de nuestras posibilidades

A ver fanáticos del tocino, entérense bien, ahora también comemos carne por encima de nuestras posibilidades. Dice Alberto Garzón que comer demasiados filetes es malo para nuestra salud y para el planeta. De verdad que con la tarifa eléctrica por las nubes y los combustibles en la estratosfera, ¿el ministro de Consumo tiene que preocuparse de que eliminemos de la dieta el lomo de cerdo y las chuletillas? Claro que sí Garzón, como no controlas el precio de la luz y de la gasolina, toca comer raíces, que la carne está muy cara. ¡Con lo nutritivos que son los brotes de soja con alfalfa!

Aunque el menú de su boda incluía solomillo y foie, según Don Desocupado, si los españoles redujeran el consumo de carne hasta los niveles recomendados, “se evitarían el 50% de las emisiones de gases invernadero y el 20% de las muertes prematuras”. Reconozco que dice verdades como puños, igual que las dijo Escrivá con las pensiones de los del ‘baby boom’, pero no deja de ser un ministro florero. Aunque a mí, lo que me parece increíble es que sentado en el ministerio más prescindible de la democracia, bueno junto al de Irene Montero y al que ¿dirige? el desaparecido señor de las Universidades, esté para estas memeces.

El precio de la luz marca máximos históricos, pero su ministerio recomienda comer nabos de temporada. Sigue habiendo publicidad de apuestas deportivas en prime time pero él conseja darle a la espelta. Yo creía que el chiringuito de Consumo olía ya a humo y mira, por dónde va Sánchez y lo deja vivito y coleando.

Las lavadoras zombies

Todo el mundo habla de lo mismo. Y no son las vacunas, sino la nueva factura eléctrica que nos han plantado porque planchábamos por encima de nuestras posibilidades. Desde ahora, nos invitan a tratar de dormir con el sonido del lavavajillas taladrándonos los oídos. O a tener pesadillas con lavadoras zombies, un clásico de terror. Máquinas que caminan solas de madrugada, salen de la cocina, encaran el pasillo… y como no estés atenta, van a la calle a hacer running. ¡Bendito centrifugado!

Los nuevos peajes horarios son carne de meme. “Quería llamar a mi hija Mariluz, pero me sale más barato llamarla Marisol”, dice un mensaje viral que circula por ahí. “Ya sé porqué el LABI ha retrasado el cierre de hostelería hasta las 00.00 horas. Para que, al llegar a casa del bar, encienda el lavaplatos”. O “Ahora que nos quitan el toque de queda, tengo que estar de vuelta a las doce para poner la roomba”.

Estos tramos valle, llano y punta sentarán jurisprudencia. ¿Qué estaba haciendo a la hora en la que se cometió el crimen, a las cuatro de la madrugada? Planchando. Mierda. Tiene la coartada perfecta. Y hasta van a lograr cambiar el refranero popular. «Quien madruga, centrifuga». A este paso vamos a ser todos ecofriendlies, y nos iluminaremos con antorchas. Aunque cuando empiece la Eurocopa y el fútbol, nadie se acordará de que la luz cuesta un riñón. Ya está. Tengo la solución. Comprar un alargador y enchufarlo en Francia.