El desayuno de los martes de hoy se ha celebrado en casa de Patxi, ya que está convaleciente de la gripe que asola las urgencias. Patxi vive, como ya he comentado en otras ocasiones, con su hermana en una casa de la Gran Vía con vistas a la plaza elíptica- en el padrón, Moyúa. Es una casa muy grande, de la que usan tan sólo algunas habitaciones , un poco al modo – y en escala- como ocurría con el palacio de El Gatopardo de Lampedusa.
Luisa, la hermana, ha preparado un café excelente que compra en Arauca y Mikel ha traído unos no menos excelentes bollos de mantequilla de Zuricalday (no ha especificado si de Martina, Hijos o Sucesores de…
El tema – monotema ha sido, como no podía ser menos, las andanzas del nuevo presidente Trump. Marta ha estado sulfurosa y me siento incapaz de reproducir todas las imprecaciones que ha soltado- algo así como racista, machista, populista…- pero Mikel, no sé si por el efecto sedante de los dos bollos que ha devorado a la vez- esto es posible, como era posible que el amigo Scott-Fitzgeral fumara un par de cigarrillos al unísono- ha dicho que confiaba mucho en los jueces y fiscales estadounidenses para hacer frente al «velociraptor» ( sic): » Se podrá decir lo que se quiera de los yankis, pero es una sociedad que tiene un sistema político donde funciona la división de poderes… Y no como aquí. Y además el cuarto poder todavía pesa mucho: ¡A ver quién le para los pies al The New Yok Times!»
Patxi ha sonreído. Ha dicho que Michael Moore se va a poner las botas y que los documentaries que había hecho hasta ahora – desde Bowling for Columbine hasta Where to Invade Next– se iban a quedar en nada ante tanto , magnífico y nuevo material. Es muy posible. Como también que , por estos lares, el amigo Moore se aburriera porque la corrupción siempre suele ser muy cutre y da poco para la farsa- salvo por ejemplo, el caso de aquel Consorcio de Aguas de no se qué ayuntamiento valenciano que celebraba sus reuniones en…Abu Dabi.
A las diez en punto, Luisa, que tiene una aire- y es- de hermana mayor, nos ha puesto de patitas en la calle, y yo me he ido a comprar otro bollo de mantequilla a la pastelería de otro de aquellos chocolateros guipuzcoanos ( «hijos,nietos o sucesores de «como dice Alberto Santana) que invadieron Bilbao con su dulzura.
Pridie Kalendas Februarias Anno MCDLXX ad Bilbao condita