He quedado con Mikel para desayunar juntos en el Iruña. Ayer llegó de Nueva York, donde ha pasado la Semana Santa con Itzi y su hijo veinteañero,en su primera prueba de nueva familia – ¡prueba superada!
NY le ha decepcionado. En general todo le ha parecido demasiado grande, desde los edificios hasta los precios.
Así el Mid-town, que según Mikel no es sino » un vivero de falos enhiestos y luminosos»,