El sociólogo Max Scheler afirma que uno de los rasgos que caracterizan la forma de pensar de la clase alta en una sociedad es la tendencia a la identidad, frente a la clase baja que tiene una comprensión más dialéctica o interrelacionada de los seres y de las cosas.
Sería interesante definir con exactitud las expresiones «clase alta» y «clase baja» y observar si el peso de la definición recae sobre la renta , sobre la capacidad de decidir políticamente o sobre la disponibilidad de recursos simbólicos , teniendo en cuenta que la posibilidad de una combinatoria triple por arriba o por abajo está en nuestros días muy alterada por la deriva hacia la horizontalidad socio-virtual generada por las redes sociales y la globalización.
En cualquier caso parece que la tendencia la identidad, a ser uno/una (s) mismo/a (s), cualesquiera que sean sus unidades básicas – individuo o grupo – indica un deseo de permanencia en la situación actual y un miedo explícito al cambio de cualquier género. Y también que un punto de vista dialéctico y combinatorio es un manifiesto deseo de disolución de la situación actual y una apuesta más o menos consciente por el cambio.
Algo así como que la clase alta quiere continuar siendo alta y que la clase baja quiere dejar de serlo.
No obstante parece también que los problemas habituales ( de renta, políticos y simbólicos) de una sociedad de clases se agudizan cuando una parte de la clase baja se ubica ideológicamente en las formas de pensamiento de la clase alta contribuyendo al mantenimiento de la clase alta como clase alta y ratificando inconscientemente y humillantemente su condición vicaria de clase baja.
Roland Barthes , en su sugerente ensayo Sade, Fourier, Loyola llegó a decir que este fenómeno era inevitable ya que la ideología dominante es dominante porque domina y , sobre todo, en las clases bajas, pero Carlos Marx advirtió mucho antes que Barthes que sólamente desde la conciencia de la dominación puede nacer cualquier atisbo de liberación. De liberación de una identidad impostada, por ejemplo.
Esclarecedor
Si usted lo dice…Gracias por el comentario.
He retuiteado a mi peña (obviamente, citando autor y blog) añadiendo esta apostilla como comentario personal:
«El menda suele unir a los criterios habituales para establecer la «Clase» este otro: «Inteligencia» (a veces, acompañada de esa especie de banderillero de nombre «Cultura»)
Creo que queda más completo el asunto»
Muy agradecido…