Justicia mangante

ANTECEDENTES, reunidas sus Excelencias para dirimir sus lindezas y flaquezas por si fueran pocas las sospechas que ya barruntaban los eslabones más débiles de la urbanidad sobre su genuino comportamiento en la intimidad que procura la opacidad de su compartimiento estanco en calidad de su independencia, se solicita se suspenda la Audiencia, para no dictar sentencia y para dejar constancia de la abierta diligencia paso a declarar que,

EXAMINADAS las actuaciones actuales de las partes testimonias, siendo hoy el día que es, considerando los hechos denunciados por el denunciante en su denuncia que anuncia la ascendencia de la indecencia a la más alta instancia de la Magistratura que tritura su moral catadura cuya distancia del caradura no parece mediar, disponemos que:
“DISPONEMOS de los suficientes hechos probados, no aprobados por este Tribunal para actuar contra el dispendiante ¡Dios mediante! que el fiscal echando una de arena y cal le exime de toda culpa por ser su conducta de lo más habitual dentro de lo legal, archivada la archisabida causa a causa de lo casual.
HECHOS probados son de este procedimiento que procede de la pieza separada del legajo 1-789, que no rectificados sino ratificados en sus atribuidas retribuciones de nuestras contribuciones retraídas, el intercepto parece ser adepto apto del clepto y ramplo, cuanto de soslayo, al leguleyo le va en ello su condición togada, agotada la venia que le venía dada por vía impositiva, positiva por ausencia, recurrida en recurrencia a la estupefacta observancia de la concurrencia que concurre en lo que ocurre cuando en su computación de la reputación debida no habida imputación de la misma en caja; ¡ni tenía por qué haberla! según norma de la Sala, donde quien no reclama regala factura no explicada por presentada, cobrada y pagada.
CONSIDERANDO, como fundamento de derecho, estar al acecho del malhechor en su fechoría proveyendo, no yendo más allá de lo que haya de suyo el sujeto geta cometiendo, ENTIENDO, que hay razón suficiente para abrirle expediente al Presidente de este jurídico Ente en mor de la Verdad, que, en verdad, no se encuentra presente ni de acusada ni de acusadora por no habérsele cursado en fecha y hora cédula de citación, actuación del todo prevista, para anular la vista ante la diosa imprevista que bajo venda ve que la legalidad va de lista esquivando su quehacer.
EXPONGO que habiéndose presentado el anterior escrito por el procurador en representación del afectado referido por el infraescrito, teniéndose por hechas las vertidas manifestaciones en el cuerpo dimanante de la parte entrante que no saliente del valiente acusante durante el encausamiento, MANTENGO que, no puede no ser, que por la tangente, en acción negligente la inteligencia diligente no le eche el guante al referido mangante por cuanto si de la turba vino el turbante, bien traída está la expresión para el ladrón que de las mangas de su toga y de sus sobresalientes manguitos blancos se le diga mangante que no por falta de caballo deja de ser caballero el dinero gastado por este corrupto de la justicia representante. Por consiguiente, dese por impetrado todo gobernante debiéndose estar a lo que se inste para un mejor impulso procesal en lo que se insiste, de las actuaciones ateniéndose a las consecuencias inherentes de la causa y caso, acaso a causa de su incumplimiento, prometo que miento si reclamo como apropiado el veredicto que no dicto, cuál es:

FALLO, que fallo porque no fallo por no fallar a la falla que separa hacer justicia de aplicar legalidad en esta Sociedad entregada a la molicie confiada como está en falsas instituciones regidas a borbotones por divares y demás, sobre las que se asientan naciones vacías de dignidad.

3 comentarios en «Justicia mangante»

  1. No son intrínsecamente malos. Simplemente han perdido la conciencia. Para ellos, apropiarse de los bienes públicos es algo tan natural como para una vaca pastar en un prado de verde y jugosa hierba. Es un caso más de banalización del mal.

  2. Con la venia:
    Me rindo ante tu verbo sarcástico, Nicola.
    Cuando he empezado a leer me ha venido a la mente aquella famosa escena de los Marx en la Öpera, ya sabes la de «la parte contratante de la primera parte será consierada»…
    No estoy segura de que no sean malos en esencia, como dice Jesús. Con frecuencia la maldad va unida a la estupidez, y extrujar las ubres públicas como si fueran las tetas de una madre especialmente hormonada no requiere mas que una buena dosis de cobardia, molicie y pobredumbre moral, especialmente si uno ha llegado hasta donde está sin excesivo esfuerzo personal.

  3. el cerdo ibérico de pata negra es una especie protegida y abundante en España,además dispone de muchos estercoleros y abundante comida.Desde los tiempos del franquismo es una raza protegida.

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