Entre lo que nos cuentan y lo que nos dejan de contar, no son pocos los mensajes que podemos leer por nuestra cuenta. Así, es admirable la eficacia de la policia en detener incipientes organizaciones clandestinas de resistencia civil como la gallega a la que prácticamente se ha desartriculado en una operación impecable, actuando antes de que sea demasiado tarde. El problema de esta consigna transmitida por todo medio de comunicación, es que puede convertirse en un boomerang cuando el ciudadano se pregunta por qué dicha prontitud preventiva, brilla por su ausencia a la hora de desmantelar las distintas mafias que operan en nuestro país, evitar la fuga de capitales de las grandes empresas o en descubrir las tramas gubernamentales de corrupción.
Una primera respuesta a la cuestión planteada, apuntaría a que los movimientos de base encaminados a la resistencia armada de parte de la indefensa población, a diferencia del crimen organizado antedicho, suelen ser más voluntarista que práctica, o sea, que se pierde en idealismos decimonónicos, en lugar de dedicar toda su energía a eliminar problemas concretos de su barrio o de la empresa, gustando siempre alardear de sus futiles acciones con la excusa de despertar conciencias por medio del consabido algoritmo revolucionario “Acción-Reacción-Acción”, cuando en verdad no les mueve otra cosa que lo que a un artista dar a conocer su obra, para entendernos, su egolatría, de ahí que hoy en día suceda “Acción-Detención-Delación”. Muy distinta entonces de la forma de trabajar que tiene la Mafia cuya actividad se limita a quitar de en medio todo aquello que estorba a sus fines, sin dar explicación alguna, mucho menos reivindicarlo, nunca reconocerlo y jamás de los jamases trasgredir la Omertá. Es la diferencia que mediara entre los antiguos constructores medievales de Catedrales preocupados por lo que importa, el edificio y la gloria de su ciudad, con los actuales arquitectos de renombre, absorbidos por lo que les motiva, el arte por el arte, su particular fama y cuantiosa nómina.
Una segunda explicación estaría relacionada con la falta de medios de la gente común que está prácticamente desarmada para hacer frente a la agrsión de los enemigos sociales, mientras cualquier organización criminal, no digamos ya el Estado, cuenta en su haber con toda suerte de equipación de última tecnología y un nutrido número de profesionales y especialistas para emplearlo; El desarme del Pueblo, no consiste únicamente en falta de armas, también carece de instrucción suficiente para su ducho manejo, desaparecido el logro revolucionario napoleónico del ejército popular y hasta de convicción ética de su acción, jamada la cabeza como la tiene desde pequeñitos por los dibujos animados de Disney y el estúpido pacifismo con el que nos hacen comulgar a todas horas, salvo en las películas de Schwarzenegger, donde los buenos son los que más matan.
Los dos factores apuntados pueden hacer más comprensible la eficacia policial y la capacidad de infiltración de los Servicios Secretos en esta clase de ONGs clandestinas. Pero no lo creo suficiente para explicar cómo contando con el humus necesario para aparecer y reaparecer sin descanso, cual es la continua opresión que padecemos, sucede que no permanece una estructura permanente de combate, aunque cambie el nombre y el logotipo.
Y es que, aunque como bien dijera Don Camilo “ Aquí vence el que resiste” a mi modo de ver las cosas, “Aquí sobrevive el que colabora” más que nada, porque los colaboracionistas tienen garantizada la paz de conciencia, por cuanto su colaboración se traduce en ventajas para si mismos y para sus más allegados, pues no hay axiología sana que castigue mirar por el propio interés. No así los resistentes, cuando de su acción se siguen más perjuicios que beneficios, no ya para los suyos, sino para ellos mismos. ¡Eso sí es un mal moral! en toda escala de valores que se precie. Al menos esto es así, en un primer momento. Cuando los resistentes ganan la partida, las tornas cambian, pero sólo lo hacen en el aspecto moral que no material de lo acontecido, de modo que puestos a elegir, el colaboracionismo es abiertamente preferible en todos los sentidos a la resistencia, como lo atestigua cualquier prueba a la que sometamos a un colectivo humano, sea el francés ante la invasión alemana, sea la de los judios ante su exterminio: La mayoría de los franceses, estaban encantados con el armisticio firmado por el Gobierno de Vichy. La Resistencia francesa es más fruto del cine que de la realidad, si descontamos a los infelices escapados de nuestra contienda que creian combatir el fascismo. ¡Qué diferencia con Rusia! Los judios por su parte se sometian sumisamente a cuantas vejaciones se les hiciera desde la proclamación de las leyes de Nuremberg hasta llegado el momento de entrar a las duchas en el Campo de concentración. Lo del Gueto de Varsovia fue la excepción. Pero que nadie se equivoque…no estoy reprochando nada; Yo mismo hubiera votado a favor de la resolución de Pétain, yo hubiera trabajado de judio de confianza y seguramente, como el pobre jovenzuelo de Benedicto XVI, me hubiera alistado a las SS, porque siguiendo el consejo del Oráculo de Delfos, me conozco a mi mismo y además, nada de lo humano me es ajeno.
La noticia de la detención de varios jóvenes en Galicia pertenecientes a un grupo de Resistencia, dice más de lo que parece, empezando por que existe Resistencia, cuando por lo demás sólo daba la sensación de haber colaboración.
No sé de qué estrato social provendrán estos jóvenes de Resistencia Gallega, pero es altamente probable que procedan de la burguesía; porque las revoluciones las llevan a cabo los sectores marginales de las clases dirigentes, que se sienten frustrados , marginados, ninguneados, y adquieren lo que alguien ha denominado sindróme de hiperlegitimación moral. Se trata de un estado de conciencia que lleleva a sobredimensionar la justeza de sus ideas hasta tal puento, que llegan a pensar que la lucha armada no sólo es conveniente y necesaria, sino éticamente aconsejable.
Por supuesto, no se han molestado en pedir el permiso del proletariado para llevar a cabo su tarea revolucionaria, pues piensan que sus acciones despertarán con el tiempo la necesaria conciencia en las masas, que las llevará a unirse al proceso. Su impaciencia les ha llevado en muchas ocasiones a omitir el trabajo en el seno de la clase obrera, olvidando el dicho de Mao de que: “Un revolucionario debe moverse en el seno de las masas como el pez en el agua”.
Su objetivo sería transferir la propiedad de los medios de producción al pueblo, administrada por un estado socialista, controlado a su vez por una vanguardia revolucionaria integrada en un partido presidido por un camarada guía y faro del socialismo.
Como resulta que toda vanguardia es reducida, estaría formada por unos pocos elegidos, es decir, la crème de la revolución. Lo cual me recuerda que el gobierno de unos pocos recibe el nombre de oligarquía. Justo como ahorita mismo, que dirían en Méjico lindo.
Cuando dices esto: «La noticia de la detención de varios jóvenes en Galicia pertenecientes a un grupo de Resistencia, dice más de lo que parece, empezando por que existe Resistencia, cuando por lo demás sólo daba la sensación de haber colaboración.», pareces asumir que el 15M en realidad está colaborando con «el opresor», en una acción conjunta, inconsciéntemente y de forma tácita.
Según las cosas del Ying-Yan, tal vez en alguna medida se ha creado una cierta «sintonía» con el poder, pero cuatro gallegos y una lata de gasolina no son un hecho tan llamativo como para eclipsar el 15O, sin ir más lejos.
Sea como sea se ve que a la ciudadanía española en conjunto no le da espanto el feudalismo, y está dispuesta a dejarse moldear.
Tener un amo muy poderoso puede ser ventajoso, ya de llegar a esos extremos.
Me despido con la sensación de que nos torean y encima pagamos a las figuras muy bien, y les sacamos a hombros si dejan que nos acerquemos a éllos.
Han dao patrás a la máquina del tiempo…vuelve la boina. (Lo que la boina representa en la Meseta, que no se incomode nadie por el slogan)
Amigos Jesús y Carlos: Recojo la parte que me llega de vustras veladas críticas…y me vais a hacer hablar más de la cuenta.
Lo del 15-M está muy bien para abrir boca, pero nada hay peor en esta vida, que quedarse con la miel en los labios. La gente ya no está para escuchar sermones pacifistas de no ser que los echen por televisión. El problema del 15-M entre otros ya apuntados en el artículo motivo de estos comentarios, reside en que no ofrece una ONG capaz de actuar donde se necesita con energía. Para pasear por el asfalto y gritar a las farolas «Contra el paro lucha obrera!» ya están los de CCOO y UGT que hasta ensayan en Orfeón subvencionado…
Si se desea montar una ONG de servicios, esta debe actuar a domicilio; Para entendernos «Actuar en local y pensar en global» es lo que se ha dado en llamar Glocalización. Es mejor cien ONGs constituidas por afinidad de gente que se conoce desde siempre, a una macroorganización donde la topología es demasiado espesa para saber quién te traiciona.
Dado que las élites son incapaces de compartir un poco de la alegría de vivir, sea entonces que deba aparecer la extensión del sufrimiento. ¡Que nuestro Dios justo y misericordioso se apiade de nosotros! ¡Dios mátalos! ¡Mátalos a todos!
Buenas tardes , sobre el pueblo gallego y sobre la cultura gallega pues tengo la mejor impresion ,a parte de ser un desendiente de gallego considero que una de las comunidades mas prosperas y mas desentes de este mundo es Galicia ,la cuna de la prosperidad ,lo demas son leyendas sres .
Amigo Cantábrico…¡Tienes toda la razón!
Bueeeeenoooo, está bien, a mi también me gusta mucho Galicia, Carallo, y «me llena de odgullo ysaftisdfacion» el hecho de que aunque sea un grupúsculo del que no abía nada hasta el artículo del Sr Lococo, haya ALGO, LO QUE SEA, después del 15-m, que no habrá conseguido sus objetivos, pero creo que en sí mismo es mucho.
Significa que ahora sabemos de la existencia del otro, sabemos que es posible aunar voluntades y actos entre gente joven y no tan joven, que no viven aborregados o aletargados, temerosos de una superhipoteca y de un infraempleo que no les deje mas opciones «intelectuales» que hacer cuentas y números para no enfangarse aún mas, y sobre todo sabemos ahora que el movimiento en si era heterogéneo (¡cómo me gusta esa palabra!) y parece que improvisado.
Para los que ya tenemos una edad es como una bombona de oxígeno cuando se acaba el aire.
Vamos, que hay materia prima aunque la ocasión no sea la propicia para una revolución; o quizás nunca ha sido el momento idoneo para una revolución y ésta se ha producid
o porque no quedaba mas remedio (0 carrallo de nuevo).
De lo que no me cabe ninguna duda es de que en adelante, los sucesivos validos de Goldman Sachs y demás secuaces tendrán que tener en cuenta, aunque sea la cuenta de euna mosca cojonera.
Un saludo.
Un saludo Nicola .