Traficante de armas ¿Condenado?

http://www.youtube.com/watch?v=HuwBEfffU_I

Pero ¿Cómo? No doy crédito a lo escuchado esta semana sobre que en EEUU, una de las mayores potencias en la producción, distribución y empleo de la Industria Militar a nivel mundial, se ha condenado a un Traficante de Armas. Debe haber un error en la información o algo se me escapa.

Y tanto que se me escapa…la noticia ofrecida por activa y pasiva en todos los Tontodiarios, leída con atención arroja detalles suficientes para comprender el titular cuya simpleza ofusca a la mente que se plantea la duda de cómo se diferencia a un representante y responsable de ventas de la Industria Militar de un Traficante de Armas.

Así uno se entera que el tipo bautizado por los medios oficiales de propaganda como “El mercader de la muerte” para distinguirlo de sus otros colegas buenos los “Portadores de libertad”, es un ex militar soviético. Con este dato en la mano, el asunto se parece más a una revancha en cancha propia de parte de uno de los jugadores ante su mayor rival en el negocio de la guerra, que a la desinteresada acción de la Justicia local por castigar una de las mayores fuentes del Mal que existen en la actualidad junto al tráfico de drogas, de órganos, de mujeres, de personas y demás negocios en los que la Banca fundamenta sus altos beneficios anuales amparados internacionalmente por la acción conjunta cómplice de los Gobiernos y partidos criminales como el PPSOE en sus respectivos países.

Pero leyendo un poco más, nos enteramos que dicha operación encubierta que sirviera para capturar a tan peligroso comercial consistió en hacerle creer que estaba tratando con representantes de la guerrilla colombiana de las FARC interesados en adquirir misiles tierra-aire y otros productos de alta tecnología construidos con los fondos oficiales destinados a I+D+i susceptibles de ser empleados en la selva contra miembros de la lucha antinarcóticos de Estados Unidos. Desde esta otra perspectiva, más que una disputa por el mercado entre dos empresas competidoras, la historia apunta a algo parecido a una intervención policial por vender armas a los malos oficiales. Resultaría que el Libre Mercado de armas está reservado para los Estados reconocidos, independientemente de que sean o no democráticos y al margen de consideraciones sobre su respeto a los derechos Humanos. Por eso, vender armas a Arabia saudí, Libia, Siria o Israel es legal y hasta decente, mientras hacer negocios con palestinos, kurdos o tibetanos, raya la colaboración terrorista. Y sin embargo, son los Estados los únicos capaces de emprender y mantener guerras entre sí o en su defecto contra su propia población que ha de mantenerse pacíficamente indefensa a merced de las mismas armas que se les vende a sus atacantes legales que para su mayor desgracia contraen deuda que más adelante se les hará pagar también a ellos como les sucediera a los tontos argentinos.

Visto desde aquí, cualquiera pensaría que los EEUU hacen gala de gran cinismo e hipocresía. Pero no es correcta la observación; A diferencia de nuestra europea moralidad teleológica atraída por fines o virtuosa establecida por principios, es de carácter pragmática y utilitarista que se guía siguiendo lo que le beneficia y rehuyendo lo que le perjudica, sin necesidad de otro debate que el de los resultados sin tener que analizar intenciones o la adecuación de sus acciones a la naturaleza de las cosas, lo que les permite vivir con generosidad y despreocupación su felicidad individual y hasta colectiva, aunque esta última les preocupe menos. Nosotros, en cambio, si que somos cínicos e hipócritas dejándoles cargar con toda la culpa que les atribuimos en indecorosa descarga de nuestra responsabilidad, primero por beneficiarnos de su comportamiento abiertamente rechazable por nuestra conciencia y segundo, por hacer lo mismo pero sin quererlo hacer, que no en vano España es uno de los mayores productores y vendedores de armas internacional y el País vasco uno de los mayores fabricantes de minas del mundo. Claro que como Viktor Bout, podemos aducir en nuestra defensa lo mismo que este representante de la Industria de Armamento Rusa declaró antes de conocer la sentencia, a saber «nunca quisimos matar a nadie».

Países pre-ocupantes

Me ha costado, pero he encontrado un país al que España podrá exportar armas sin temor a que sean usadas para preocuparse de ello. Se trata de Sealand un territorio que no supera lo que se ve en la foto. El Vaticano ha sido descartado por dar hostias.

La ambigüedad del idioma castellano, vuelve a la carga, esta vez, en forma de petición al ejecutivo por unanimidad de todos los partidos con representación en la Comisión de defensa del Congreso, los cuales, tras analizar en detalle el informe presentado por la Secretaria de Estado para el Comercio sobre la venta de armas el pasado Junio, ha concluido que debe evitarse exportar material bélico a países “preocupantes” por estar inmersos en conflictos armados, suponer una amenaza agresora para sus vecinos o contravenir de continuo el respeto a los Derechos Humanos. Todos los grupos coincidieron igualmente en exigir un mayor detalle en el destino y uso del material exportado.
Pues bien, sucede que, aunque el informe que ha suscitado este revolcón ético de nuestros Congresistas, aludía a países como Libia o Irán e invitaba veladamente a pensar en Venezuela o Siria, lo cierto es, que estos Estados no son lo que se dice Países preocupantes en traducción estricta; Antes bien serían Países preocupados. Déjenme explicarlo:
Hubo un tiempo en que el Tíbet y China eran países vecinos. Pero en cuanto China puso sus ojillos en aquel minúsculo techo del mundo, entonces Tíbet pasó a ser un país preocupado y China un país preocupante. Otro tanto sucedió con Rusia y las Repúblicas Bálticas, Alemania y Polonia, el territorio del Sahara y Marruecos, Palestina e Israel, etc. Hoy Alemania y Polonia como Rusia y las Repúblicas Bálticas han vuelto a ser vecinos. No así el resto que reparten su suerte siendo unos países ocupantes y otros ocupados.
Hemos entonces que distinguir entre las naciones actuales, cuáles son merecedoras de uno u otro apelativo para averiguar en qué medida es ético hacer negocio con ellos sin contravenir la recomendación del Congreso, asunto difícil si tomamos en consideración que habremos de descartar vender armas además de a países inmersos en guerras como le sucede a media África, que ejerzan ocupación o combatan por su liberación como los mencionados, que tengan serios conflictos internos o anden en guerra civil como le ocurre a Colombia, que ya era bastante cautela para una industria que vive de ello, ahora tampoco se podrá hacer tratos con Estados tradicionalmente Pre-ocupantes, como lo son las distintas potencias europeas con Gran Bretaña y Francia a la cabeza y por supuesto los EEUU, que llevan ocupando y preocupando al mundo entero varios siglos.
En cuanto a dar un mayor detalle del uso y empleo del material vendido por España…no se lo recomiendo a sus Señorías. Es muy gore. De no ser, que les vaya las imágenes truculentas, cargaditas de morbo, en cuyo caso, es más que probable que la realidad colme sus más exigentes expectativas.