Marchando una de almejas…

Cerca de casa tengo una valla publicitaria gigante. Sale un mejillón. Enorme. El slogan dice; «Enamórate de un gallego». Enseguida imaginé un anuncio con una almeja descomunal… seguida del lema; «Enamórate de una gallega»… (y lo que viene a continuación) fresca, con sello de calidad. Imposible, descarté. Desde que Torquemada se apoderó de la publicidad, todo aquello que aluda a chicas y sexo es políticamente incorrecto. Esta misma semana, han denunciado un cartel de un torneo de fútbol femenino. ¿El pecado? Que aparece una mujer en bikini con un balón en los pechos. La alcaldesa (de Motril) asegura que es una imagen poco adecuada de la mujer que excede el ámbito de lo deportivo.

En la piel de toro, se podría ir de extremo a extremo, pisando cabezas de alcaldes imbéciles. Si cada vez que sale un mozalbete sin camiseta o el anuncio de Adopta un tío (una especie de red de citas) las asociaciones masculinas montaran un pollo del quince, no tendríamos espacio para tanta denuncia.

A todo el mundo le ha parecido muy cool este nuevo concepto de marketing para convertir a los hombres en productos de consumo. Pero si la web en cuestión fuera “adoptaunachorba.es”, las quejas sobre la cosificación femenina llegarían hasta Iparralde. Y todo por culpa del ligue cibernético y por la carestía de flirteos y el agotamiento de los escarceos de fotocopiadora. ¡Ah perdón!, que a eso ahora se le llama acoso.

Magaluf, planeta de mamones

En Magaluf, Mallorca, sede del conocido «balconing», ha nacido una nueva especialidad, el «mamading». Varias discotecas ofrecen barra gratis a cambio de felaciones a los clientes. La práctica lleva a algunas muchachas a participar en un concurso por el que deben realizar un número determinado de felaciones a varios chicos durante un tiempo prefijado. La que consigue sumar muchas logra, a cambio, bebida gratis para toda su estancia, y pasa de amorrarse a un botijo a amorrarse a otro. En Mamaluf y el resto del planeta de chupones, los más puritanos piensan que es sexista y denigrante para la mujer que lo hace y para el hombre que se deja hacer.

Otros creen que eso es prostituirse por un cubata, y además de garrafón. Muchos discrepan y argumentan que todo lo que provenga de la libertad de cada cual, y que no esté condicionado por la necesidad… es solo eso, libertad. Y están seguros de que para divertirse hay que desmadrarse a saco con vacaciones salvajes de sol, alcohol y sexo.

En realidad, no sé a qué tanto escándalo. Es una práctica pactada y voluntaria entre gente adulta. También hay muchos vascos que viajan a Cuba y a Santo Domingo y no es precisamente para exportar nuestro knowhow a otras culturas. Es mucho más grave que entre los aforrados haya tantos que maman de las arcas públicas y sigan chupando en el bar-chiringuito del Congreso de los imputados.

Prohibido el baño en burkini, baserrikini o faralaeskini y… en gayumbos

Para un político que no se la coge con papel de fumar, van y le ponen verde. Y todo porque Javier Maroto, alcalde de Gasteiz, ha mandado sacar de las piscinas a quien se bañe con velo y recuerda que la normativa prohíbe bañarse con ropa de calle. Para todos aquellos manolitopiscinas que han empezado a hablar de xenofobia y de racismo, recordarles que no es un tema de ser de aquí o de allí. Esto no es religión, es sanidad e higiene. Es igual que si sor Josefa apareciese con el hábito remangado dándose un chapuzón en el polideportivo municipal.

El burkini, el baserrikini, el faralaeskini o lo que sea está fuera del reglamento igual que lo está bañarse en gayumbos. La cerdada es remojarse con ropa de calle, esto incluye a los bobos que lo hacen con los calzoncillos debajo del bañador porque está de moda. Ya se puede ser católico, musulmán, marciano o hare krishna. Y que no hablen de libertad porque aquí nadie está ejerciendo precisamente su derecho a decidir. Ir a una piscina no es obligatorio, el que no se sienta capaz de aceptar las normas básicas que no vaya. Yo, por ejemplo, nunca he intentado entrar a una mezquita con zapatos. Otra cosa es que hagan piscinas privadas para baños con burka o similares, o mejor, un espacio de libertad donde las mujeres musulmanas puedan compartir su baño con las de Femen sumergiéndose a pecho descubierto. Aunque no creo que ellas estuvieran muy a gusto en el agua con esas infieles.

Los sermones no se votan en asamblea

Un sacerdote de Ourense ha dimitido tras negarse a dar la comunión a parejas que conviven sin casarse y llamar adúlteras a esas mujeres desde el púlpito. Así que los vecinos le han montado un escrache y han boicoteado los oficios. El cura de Canena, en Jaén, lanzó una homilía machista con su antes pegaban a las mujeres pero no las mataban porque había sentido moral … Pláticas no aptas para progres ni acordes con los tiempos. ¿Pero qué quieren? ¿Desde cuándo los sermones se votan en asamblea? Ir a la Iglesia no es visitar el súper.

Ser católico es pertenecer a un club con doctrinas que hay que acatar. Además hace siglos que es una institución machista que no permite que las mujeres accedan a ninguna cuota de poder. El gobierno eclesial, la toma de decisiones, y la visibilidad de la institución están en manos de varones. ¿Por imperativo evangélico? Sin embargo, algunos quieren una Iglesia a la carta. El que pertenezca a una religión que apechugue con sus dogmas y preceptos, mandamientos, sacramentos o lo que sea.

Todo el mundo sabe qué opina del divorcio, el aborto o los anticonceptivos. Y si no, que copien a algunos que se declaran apostólicos y romanos y hacen de su capa un sayo. Hablo de Núñez Feijoo viviendo en pareja, de Alicia Sánchez Camacho con un hijo “de soltera”, de Soraya Saénz de Santamaria, casada por lo civil, o de Cospedal, casada con un divorciado y fecundada in vitro. Los caminos del señor son inescrutables.

Nunca máis uno del PP en la cárcel

Dar un tartazo en la cara a Yolanda Barcina, nueve años de cárcel (es lo que piden); hundir un barco con 67.000 toneladas de fuel, no tiene precio. La Justicia ha hablado. El caso Prestige se va de rositas como ya ocurriera en el metro de Valencia, el tren de Santiago, el Yak 42 … El calentón se ha quedado en nada. Para una pobre madre que compra pañales con una tarjeta perdida piden prisión, y los que causan cientos de millones de euros de daños, se quedan en la calle. ¿Qué se puede esperar de un país donde por tocar un piano y hacer ruido solicitan siete años y medio de cárcel (después del escándalo, 20 meses), y por causar una catástrofe medioambiental sin precedentes no hay ningún culpable? Puede ser que no haya culpables, lo que no hay, seguro, es vergüenza.

Según los jueces, los petroleros se hunden, los camiones vuelcan, los aviones se estrellan, las casas se derrumban y los corruptos se llevan la pasta… Un fallo a la medida del señor Rajoy y el bulldog Cascos. ¿Cómo van a condenar a alguien por unos hilillos de plastilina? La sentencia deja bien a las claras que en España no hay tres poderes; Ejecutivo, legislativo y judicial, solo hay dos, los del PP y sus amiguitos del alma. Y todos van detrás de la misma pancarta; Nunca máis uno del PP en la cárcel. Ahora lo suyo sería que exigieran a voluntarios, y como no a pescadores, una indemnización por apropiación indebida de vertidos privados, Bueno, pues nada, ¡hasta la próxima catástrofe! Total, sale gratis.