Súper Mario Bros

Ya que estamos en la semana de la libertad de expresión, Súper Mario Bros, Mario Fernández para los titulares de los periódicos y para los empleados de Kutxabank, se ha descolgado con una declaración de impacto: «Salvo un norteamericano que quiere crear una especie de casa de putas en Madrid (en referencia a Eurovegas) nadie va a crear en un día 2.500 puestos de trabajo». Está bien eso de que los presidentes de las entidades financieras sean tipos lenguaraces que califican este tipo de chiringuitos sin eufemismos. Aunque bien mirado, al personal también le gustaría que llamase por su nombre a los gestores de Bankia o a los de CajaSur.

Porque en estos tiempos que corren, la peña opina que las verdaderas casas de putas son los bancos y cajas que han hecho de su capa un sayo. El magnate Sheldon Adelson organizará un superlupanar donde aflorará el dinero de la mafias, mientras Rodrigo Rato se ha forrado como un mafioso y los gestores de las cajas quebradas se van de rositas entre sospechas de corrupción.

Si vamos a echar mierda, repartámosla entre todos. Porque a la gente le sabe mal que vengan los directivos de banca a sentar cátedra, cuando ellos son los primeros en disfrutar de barra libre. Y sobre todo porque, puestos a buscar burdeles, hay para dar y regalar. Como la justicia, el mayor prostíbulo del momento, donde siempre hay un amiguito del alma dispuesto a archivar causas como la de Carlos Dívar.

Gracias amigo

«Gracias amigo lehendakari por tu presencia porque el año que viene…» El ‘afeitado’ de José Luis Bilbao a Patxi López en la asamblea de Cebek, el puyazo de la presidenta del Parlamento, las banderillas que le coloca Basagoiti un día sí y otro también… todo apunta a que los socialistas ya no saben cómo sacar al lehendakari de la suerte de varas.

Desde el callejón, sus asesores se afanan en preparar folletos que loan la excelencia de su gestión. «Hace pases de pecho frente a la crisis», dicen. «Da largas cambiadas a Rajoy y no va aplicar los recortes». «Es un líder astifino», sentencian. Pero con el Sabías que… solo le han metido en un embolado. Porque la ciudadanía vasca ya ha editado su propio tríptico: ¿Sabías que López mintió en su curriculum y no tiene ningún título académico, que está gastando 48.231 euros en clases de euskera y que además hace piras, que le pilló la tregua de ETA en USA sin tomar arte ni parte, que no se le vio el pelo en el conflicto del Alakrana…?

 ¡Qué vamos a hacer!, la gente es muy envidiosa, y un figura que tunea el curriculum, que tiene un affaire con Vanity Fair, que se entera por la prensa de que su cuñado trajina billetes de 500 euros como gominolas… y que, desprovisto de un talento especial, disfruta de un puesto bien retribuido con viajes pagados, pues deja a uno para el arrastre. Mientras el ejecutivo López hace ademán de embestir pero no arranca, tanto aviso provocará que el manso regrese pronto a los corrales.

Divorcio exprés

La pareja Lopebasa tenía los días contados

Era un secreto a voces que, aunque llevaran tres años acostándose juntos, se daban la espalda en la cama. Cuando se juntaron, Antonio, hizo público su temor de que Patxi solo le quisiera para la noche de bodas y luego le pusiera los cuernos. Sin embargo, ha sido él quien ha dado la espantá.

Lo de menos, es si este divorcio exprés es consecuencia de los recursos de inconstitucionalidad planteados por el Gobierno vasco. Es imposible llevar a buen puerto un matrimonio, incluso uno de conveniencia, cuando los padrinos, Rajoy y Rubalcaba, esperan fuera de la habitación para hacer la prueba del pañuelo.

Y eso que demostraron que había sexo aunque no hubiera deseo. No nos engañemos, para sellar un pacto anti natura, o lo que es lo mismo un revolcón en Ajuria Enea, tampoco ayuda que tu pareja te compare con Homer Simpson. Han sido 36 meses cuajados de crisis y riñas tumultuosas, con las familias políticas detrás, calentándoles la oreja, y se ha terminado el amor. La orgía de poder se ha acabado. La novia se ha quedado con la casa, –quizá porque está buscando un nuevo amante–, y no quiere saber nada de custodia compartida. Como en toda ruptura, ya han hecho numeritos y papeles, o sea, cálculos electorales. Seguro que, al igual que sucede con los divorciados, los dos están buscando un nuevo amor para concurrir a las elecciones de otoño. Se comenta que organizarán una cama redonda para encontrar candidatos.

Bolis caídos

Insumisos contra los recortes sociales
El último globo sonda es que habrá que instalar peajes blandos en autovías, hasta ahora gratuitas, porque las carreteras «no se arreglan solas». ¡Ah! debe ser que el impuesto de matriculación de los vehículos se abona para construir pipicans, que el impuesto de circulación se desembolsa para que tengamos el coche en el garaje y que los gravámenes sobre los carburantes son para colocar malabaristas en los semáforos. Sin citar la ITV.

Ya ni se podrá sacar la bici del trastero porque impondrán un canon por el uso de las aceras. Mariano Rajoy ha anunciado que el tema de los peajes no va a ir a ningún consejo de ministros. Ya entiendo, eso significa que irá directamente al BOE. Luego, que a nadie le extrañe que el personal se rebote y llame a la desobediencia civil.

Como todavía circula sangre por las venas del tejido social, algunos han iniciado una guerra silenciosa, sin necesidad de pancartas, ni de salir a las barricadas. En Barcelona, los conductores se han declarado insumisos contra los peajes para montar la gresca. En Madrid, proponen colarse en el metro como respuesta a las mayores subidas de los últimos lustros. Y en Euskadi, los ertzainas han iniciado una huelga de multas, en protesta contra los recortes laborales, en otra clara muestra de querer independizarse de los políticos. Aunque igual, la actual caída de bolígrafos la terminamos pagando mañana con una subida de libretas.

Pan y circo

La polémica escena del beso

¡Guten morgen! Como cada mañana, el lema siempre es el mismo; ya que no podemos garantizar el pan, mantengamos el circo a pleno rendimiento. Por eso, los protagonistas de la semana han continuado siendo los safaris y sobre todo, doña Corinna, la acompañante del rey. Los parlamentarios se han puesto en plan Sálvame y el affaire africano y la caza mayor han triunfado, sobre todo para IU, que además de roja se ha vuelto rosa y preguntó en el Congreso: ¿Quién ha nombrado a doña Corinna representante de su Majestad? ¿Quién la nombró consejera estratégica de la delegación oficial conducida por el rey que fue recibida en abril de 2006 por el príncipe Al-Waleed de Arabia Saudí? Eso sí, la mesa del Parlamento tumbó las preguntas.

No era cuestión de perturbar a Corinna zu Sayn-Wittgenstein, la acompañante del donjuán septuagenario, que es ya la estrella más perseguida de cientos de paparazzi. ¿Y qué pasa con Sofi? ¿Qué escandalazo se hubiera montado si hubiera sido pillada paseando a un concubino por el mundo y se hubiera roto la cadera antes de asistir a un concierto con su ligue? Así las cosas no es de extrañar que visitara al rey en la clínica tres días después y durante solo quince minutos. Lo que no ha trascendido es que le llevó la hoja de jubilación por incapacidad total para que la firmase. Del divorcio ni hablaron porque cómo tienen gananciales, si hay que repartir España, ninguno quiere quedarse con Vascongadas.