BARCELONA 1970

Yo tenía  quince años y aquel era mi primer viaje a Barcelona.Caminaba  junto a mi tío Julio Manegat por el Portal de l´Àngel hacia  la Formiga d´Or, una librería católica de referencia en aquel diciembre de 1970. Ibamos a la presentación de una obra de Fernando Diaz- Plaja , variante de su famoso El español  y los siete pecados capitales y yo no sabía que  comenzaba un largo periodo de mi vida  – que dura hasta hoy- en el que pondría particular atención a la lengua y a la cultura catalanas.

El acto se desarrolló en castellano aunque luego las conversaciones derivaron enseguida hacia el catalán. Yo asistía impertérrito  a lo que para mi era un pequeño tumulto en el que, de vez en cuando,  mi tío me presentaba  a gentes tan diversas como el falangista Ignacio Agustí – el de La saga de los Rius -o a  la novel Ana María Moix  que acababa de publicar Julia.

En un aparte, Enrique Badosa – que luego me dedicaría  cariñosamente sus Baladas para la paz  – me recomendó tras una breve charla que, además de leer y escribir poesía, practicara algún deporte.   A la vista de un par de fotos de aquel acto , no me extraña ahora el consejo, aunque  en su momento no lo comprendí, o mejor, no quise comprenderlo. Pues pensaba que mi palidez cuasi tuberculosa y  mi delgadez cuasi sifilítica, unidas a  mi repudio por cualquier actividad física, que yo vinculaba inmediatamente a la turbamulta de los compañeros futboleros del colegio , eran las condiciones de mi sensibilidad poética.

Acabó el acto y fuimos a cenar a Els  Quatre Gats. Al calor de un vino blanco- que mi tío Julio me dosificaba oportunamente- la conversación, en el catalán que hasta cierto punto yo lograba  comprender, giró hacia un único tema: la conmutación de las penas de muerte impuestas a los condenados por el Juicio de Burgos. Todos se mostraban unánimemente a favor, siendo – supongo ahora- muy conscientes de que se estaba acabando un régimen  -¡ El Régimen!- y que todos y cada uno deberían recolocarse en el nuevo mundo que se avecinaba…

Y de todo esto me he acordado esta mañana, cuando  he oído a primera hora que el enconamiento continúa en Catalunya…

Publicado por

Vicente Huici

Sociólogo, neuropsicólogo y escritor.

2 comentarios en «BARCELONA 1970»

  1. «El español y los siete pecados capitales». Tengo el recuerdo difuso de que fue uno de los primeros libros que leí pero de la certidumbre de que me reí con ganas. Suelo repetir muy a menudo una de sus frases aplicadas a diferentes contextos. «Hay españoles que son capaces de morir defendiendo las puertas de una iglesia antes que entrar en ella»
    «Juicio de Burgos» allí dormía yo en el Gobierno Militar cuando se celebró el famoso juicio. La verdad es que por aquellas fechas se hacían juicios de guerra un día sí y otro también ¡Qué tiempos!

  2. Creo que el libro que se presentaba era en concreto una variante del primero y se titulaba «El italiano y los siete pecados capitales»…Gracias por el comentario, Antonio.

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