Tanto el recientemente fallecido Andrea Camilleri (1) como Leonardo Sciascia (2), coinciden en la opinión de que el matrimonio de Luigi Pirandello fue un fracaso anunciado.
Probablemente no podía haber sido de otro modo, pues fue un matrimonio de conveniencia organizado por el padre de Pirandello y su socio , con el fin de que las familias estuvieran unidas por vínculos de sangre.De hecho ,el escritor agrigentino no conoció a su mujer , Antonietta Portulano, hasta poco antes de la boda.
Ambas familias , y su misma esposa, esperaban que Pirandello se implicara en el negocio común de la explotación del azufre, pero no fue así. Pirandello se dedicó a la escritura , primero a la narrativa, y luego al teatro, obteniendo un tardío pero gran reconocimiento que le llevó al Premio Nobel en 1934. Entre tanto, la familia soportó largos años de privaciones, acentuados, además, por varias quiebras empresariales.
Antonietta Portulano no supo , y probablemente no pudo, aguantar este largo camino, pues había sido educada, como las mujeres burguesas de su tiempo, para parir hijos cuanto antes – uno al año, los tres primeros años- y dedicarse a recibir– contando siempre con el servicio oportuno. Al final , según dicen, enfermó y fue recluida en un psiquiátrico.
Probablemente hubo, hay y habrá – aunque cada vez menos- muchas antoniettas , pero la situación vivida por esta pareja volverá a repetirse una y otra vez, y siempre se podrá recordar aquello que dijo Honoré de Balzac: «Dios preserve a las mujeres de casarse con un hombre que escribe libros»….Aunque quizá ya la frase presente nuevas y novedosas combinaciones…
(1)Camilleri, A.2000.Biografía del hijo cambiado: La novela de la vida de Luigi Pirandello . Madrid:Ed. Gadir.
(2) Sciascia, L. 1989.Alfabeto Pirandelliano , Milano : Ed.Adelphi