Según una reciente investigación que ha aportado Marta, otra de las habituales de La Junta Extraterritorial del Desayuno de los Martes, cuando el Sol esté llegando a su fin y se convierta en gigante roja, dentro de unos 5.000 millones de años, Mercurio , Venus y posiblemente la Tierra se destruirán.
Ante una previsión como esta, y a pesar de la rápida respuesta de «largo me lo fiáis» es difícil resistirse a la sensación apocalíptica de percibir que , hagamos lo que hagamos los seres humanos , todo se va resolver al cabo en la eternidad del polvo de estrellas: «Seres de un día» nos llamó Píndaro y también «sueño de una sombra».
Y, por otro lado, y aunque esa sensación surja en el contexto de una cronología que apenas si tiene sentido para evaluar la vida en la Tierra, como afirmaba Stephen W. Hawking en su célebre libro Historia del tiempo, la perspectiva apuntada devuelve la mirada hacia una cronología corta, apenas acaso la de la generación de nuestros descendientes y , como no, hacia la inmediatez de la duración de cada día, de cada hora, de cada segundo…
Y entre estos penútimos mimbres emerge el futuro que les espera a hijos e hijas , a nietos y nietas, y al cuidado del legado que van a recibir. Y con los últimos a la vivencia p`lena de cada momento, en la armonía lograda, no dada de antemano, con los iguales que nos vienen acompañando desde la infancia hasta la vejez y que han marcado la deriva particular de cada uno y de cada una , individual y colectivamente
Aunque , para hacer justica, y como me ha recordado la sudodicha Marta, que para eso vive de la Filosofía, todo esto ya lo anunció con voz tronante y sin tener evidencias científicas, tan solo revestido de la fuerza de la lógica y de la ambición de las palabras, aquel martillo pensante que fue Friedrich Nietzsche, cuando escribió en su libro Sobre verdad y mentira en sentido extramoral aquello de: «En algún apartado rincón del universo centelleante, desparramado en innumerables sistemas solares, hubo una vez un astro en el que animales inteligentes inventaron el conocimiento. Fue el minuto más altanero y falaz de la “Historia Universal”: pero, a fin de cuentas, sólo un minuto. Tras breves respiraciones de la naturaleza, el astro se heló y los animales inteligentes hubieron de perecer».
Any way, fiel a su reciente tendencia a la copa corta más que al trago largo, la profa, tras la cita, ha soltado un «Sin más», en consonancia con la expresividad post-moderna de su alumnado.
De todo lo cual doy fe ante diem XVI Kalendas Dec. Anno DCCXX ad Bilbao urbe condita…Por si acaso…
Seguro que la solución la tiene Jonan Fernadez.
Ha sido un gran error haber prescindido de el en Glasgow.
Zalantza barik!
Dentro de 5000 millones de años la humanidad tendrá una tecnología inimaginable cuya evolución, la tecnológica, «se caerca a la velocidad de la luz» y acelerándose.
Creo que el hijo del hombre será capz de alterar el funcionamiento del sistema solar, será capaz de revertirlo, y en todo caso, como hizo NOE, será capaz de vivir en planetas artificiales, como la nave de la guerra de las gallaxias, inmensas, y capaces de sobrevivir en el espacio interestalar, y asentarse en planetas como la Tierra, todo ello si no nos destruimos antes.
Yo creo que DIOS creó un proyecto con una finalidad pero sin intervenir, no va a hacer un proyecto que sabe el final, no lo sabe, el futuro no lo sabe DIOS, pues deja que su poryecto inicial evolucione a su albedrío, y además creo que tendrá muchos mas proyectos, (DIOS SÓLO tiene un poryecto? me parece inverosimil) por si de los que fallan alguno no falla.
Estimula unos criterios divinos que seguro que caminan a un final exitoso, pero hay que seguirlos para que llegue el éxito, el primero salavar el planteta, el 2º la conquista del espacio, eso dice la Biblia extendéos, por todo lo conocido:el Universo, o Universos.
Ita sic!
Don Vicente si lo que pretendía es quitarme el sueño no lo va a conseguir. Como todos los días a eso de las 3 y 1/2, servidor se meterá en el sobre para echar una siesta de pijama, orinal y Padre Nuestro
Pater noster qui es in coelis…
Iré comprando crema solar para que no me pase lo mismo que con el papel higiénico. Tengo tendencia a llegar tarde a las hecatombes…
Protección 100%, please…