Así, entre nosotros, y ahora que no nos lee nadie, les contaré que a la pregunta del encabezado yo respondo que no. Es verdad que no puedo presentar credenciales científicas y que mi postura atiende, por un lado, a la intuición y, por otro, a lo que tradicionalmente nos han venido diciendo muchos de los que ahora han cambiado de bando. Por lo demás, y con todo el respeto a los órganos de representación popular, no tengo muy claro que sea el parlamento europeo la institución que decida por votación si sí o si no. Claro que en el mismo gesto nos están aportando la clave definitiva: no estamos ante una cuestión técnica sino política.
Francamente, habría preferido que me lo contarán así. Puesto que soy mayorcito y me tengo por un tipo bastante realista, soy capaz de entender que la cosa energética se está poniendo muy malita. Ahí tenemos a Alemania instando a sus ciudadanos a reducir el tiempo bajo la ducha y la temperatura del agua y tomando medidas para limitar el uso de la calefacción a partir de septiembre. Se avecina una situación más peliaguda de lo que ya estamos padeciendo. En ese contexto, quizá no quede otra que tirar de la poco o nada deseable alternativa atómica. Pero no hace falta que nos la vendan como una opción ecológica del copón.
Por decirlo todo, y mirando a mi propio país, no puedo dejar de señalar la gran hipocresía que supone jugar con mil barajas. Mola mucho abogar por las energías renovables, sostenibles y chachipirulis al tiempo que se impide la instalación de parques eólicos. Y de explorar (¡solo explorar!) si bajo nuestro suelo hay gas, mejor ni hablamos.
Qué bonito sería vivir en un lugar donde no se produce de nada pero se puede consumir de todo. ¿Sería ese el «país de Jauja» de nuestros cuentos infantiles?
Un País en el que no se produce nada que contamine, que genere residuos, que no tenga peligro, que no altere el paisaje, etc. etc.. Y puestos a pedir, un País donde los residuos que generan sus habitantes se manden al Pais de al lado.
Pues sería bonito, pero no es posible. Además de no ser solidario y en cambio si ser muy egoísta.
Pues parece que algunos no ese han dado cuenta de ello o no quieren darse cuenta. Si queremos consumir hay que producir, y eso se hace con los recursos, los medios y la tecnología que hay. Se necesitan materias primas y se generan residuos. Y tanto lo uno como lo otro altera y degrada el ecosistema.
Y si nos centramos en la generación de energía eléctrica, hay lo que hay: Las verdes.. y las otras. Y no hace falta ser ningún especialista en la materia, para saber que la energía nuclear no está entre estas últimas. ¿Qué es una solución? :¡aclaro que si! Pero tal vez la última solución y la menos deseada.
Pero lo que no vale es decir que no a todo, pues como he apuntado, un País de consumir y no producir no es posible.