Noches de viernes, noches frías

Por-Fin-Viernes-JonBilbao-2_foto610x342

 

El viernes es el día más difícil para la noche de la tele. No es carne ni pescado y no sabes si salir o quedarte, si dormir o vivir, dependiendo del cansancio, la economía y las ansiedades afectivas. Por segundo año consecutivo, ETB ha apostado por el debate en esta jornada ambigua. Se supone que Por fin viernes es el sucesor de El Dilema, prematuramente fallecido y por cuya misma senda camina a la búsqueda de un modelo que satisfaga a los que huyen del comadreo viperino de Telecinco y a quienes demandan un poco de cruda realidad para alimentar sus indignadas conciencias. PFV es una combinación de dos tertulias -una más seria y otra más tosca- con cambios parciales de interlocutores; y dos entrevistas a personajes relevantes. Se ha inspirado en La Sexta Noche en el uso profesoral de la pizarra y en la alternancia sin ruptura entre debate e interviú, aunque prefiere la mesa al sofá como diseño de escenario. Una mixtura cuyo atractivo depende de los temas de discusión, más que nada para que la gente, en hora y día de agotamiento acumulado, no se te duerma en el sopor de la dialéctica exquisita. O incendias la contienda o no hay audiencia.

Para que el hablar público sea interesante son necesarios un ambiente propicio y una disposición libre y confiada, sin más requisitos que el respeto, las reglas de la calle. Hay que dejar que la emoción tenga su primacía y alcance cierto equilibrio con la exposición de ideas. Hay un exceso de frialdad distante en los debatientes. Ahí se equivoca PFV, en su opción por el diálogo rígido y estructurado: demasiados periodistas y poca diversidad intelectual de estilos. Y es que la comunicación no es un oficio, es un instrumento del alma para el entendimiento. ¿Por qué tanto miedo a la discrepancia airada y la humanización de los interlocutores? ¿Por estética corriente o por molicie?

En televisión los déficits creativos llevan a la repetición o imitación crónica de viejos esquemas. Como el anuncio de Veranoski, despiadadamente difundido, tan cruel y traidor como una diarrea de verano.

Un comentario en «Noches de viernes, noches frías»

  1. Una reflexión muy intereante., sobre el nuevo programa de losviernes por la noche. Lo cierto , que este tipo de emisiones, es lo mas barato para la cadena televisiva. Pero sugiero que tengan un poco mas de imaginación, ya quedinero no hay, que sean mas cretivos. «Imaginación al poder». Intentar copiar otros programas de debate que están aumentando la audiencia, no esta bien, porque ls copias no son buenas. Estedebate, lo considero que eta muy encorsetado, muy rigido,. Aburre al espectador, dado que es tiempo, y debe ser mas dinamico y flexible. Y no copias baratas.
    Muchas felicidades por su articulo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *