Esperanza Aguirre y Rita Barberá o la autodestrucción del PP

Cuando aparecen los problemas tenemos dos opciones: que las cosas nos vayan mal por un tiempo o nos vayan peor para siempre. El PP ha elegido la segunda alternativa, que consiste en responder a las dificultades con una conducta innoble y desabrida para salir completamente derrotado. La tele nos están retransmitiendo el patético espectáculo de cómo una organización entera, muy poderosa hasta hace poco, se esfuerza en añadir a su final de ciclo su total autodestrucción. Incluso más acelerada que la de Rosa Díez, que ha preferido un callado retiro tras romper los hilos de su guiñol, UPyD. Dos mujeres y un hombre son actores principales de esta tragedia.

Esperanza Aguirre, “vasca por los cuatro costados”, según el programa de ETB «Todos los apellidos vascos», representa el paradigma de la autoinmolación por estulticia. Su actitud odiosa hacia los periodistas, el afán por exhibir una furiosa antipatía, su infundada superioridad y el desdén que le procura su solvencia económica nos han mostrado a una difunta oficiando su funeral como lideresa, entre muecas de desprecio y fracaso ético. Empeñarse en el poco ocurrente insulto a La Sexta, a la que denomina “la Secta”, no es más que el corolario de su indigno fallecimiento político, empeorado hasta el bochorno.

La otra mujer, Rita Barberá, interpreta su propia tragicomedia. En vez de enfrentarse en el tribunal de la tele a su presunta culpabilidad por corrupción con disposición humilde y honrosa, la exalcaldesa valenciana ha optado por caricaturizar su bajeza y remarcar lo más vulgar de su persona. Su sonrisa forzada y los silencios la condenan de antemano por fealdad moral. ¿Es que nadie enseña a los políticos los rudimentos de la estética para tiempos de desolación? Deberían saber que la tele lo capta todo, hasta lo invisible. Y mientras su partido se autoliquida, a Mariano Rajoy le bailan las palabras, le cantan los hechos y aguarda a que los errores ajenos le produzcan un milagro. Eso no es heroísmo, es pura agonía. Veremos esta semana el penúltimo capítulo del sainete.

Un comentario en «Esperanza Aguirre y Rita Barberá o la autodestrucción del PP»

  1. No hombre, no, estás equivocado, como es lógico. Al PP no le destruyen ni cincuenta aguirres y/o barberás. La puritita esencia del PP es la impunidad y el »vivan las caenas».
    Así que res de res, que diría un catalán, en el planeta PP eso no significa nada. Lo realmente gravísimo para España es que para siete millones de españoles tampoco importa.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *