ARDE (¿todo?)

¿Todo arde? Pero,¿qué está ardiendo exactamente ?

Al ambiente canicular que se ha adelantado- ¿ por el cambio climático?- se están sumando calorets diversos , macropolíticos, minideológicos y prepostlaborales.

Así, el número de arúspices sobre lo inmediato político no cesa de crecer, intentando algunos , como Ignacio S´ánchez Cuenca ,dilucidar el futuro según la lógica académica más aquilatada y avezada , y otros, como Iván Redondo ,recurriendo a metáforas sorprendentes en el límite de lo esotérico : la Derecha ya es derecha extrema y extrema derecha a punto de compartir tálamo( y diz que hipotálamo), la Izquierda es una selva con mucha leona sin Rey León, y el Centro, bueno, el Centro en realidad ( dicunt) no ha existido nunca más allá de algunas siglas circulares…

De las profecías anteriores se inducen/ deducen trasvases ideológicos mayores que los pantanos que solía inaugurar S. E. in illo tempore. Las afinidades se desdibujan a pesar de que parecen más selectivas: la socialdemocracia se subdivide una y otra vez entre Socialismo y Democracia; la Democracia Cristiana lleva tiempo abduciéndose a sí misma de particularista a generalista y ahora , en ocasiones, se reclama de Ratzinger y se desdice, con la boca pequeña, del pope argentino ,mientras el evangelismo negacionista y apocalíptico se reorganiza con armas y bagages ( Caesar dixit) allende el atlántico…

Entre tanto, el contexto está tan caliente que no hay ningún Leonardo Sciascia que pueda describirlo sin quemarse o que le quemen: se pide por las ondas que le corten las manos a un veinteañero que ha matado a botellazos a un colega de juerga nocturna, en las playas colindantes no hay duchas porque están en lucha, los representantes de varios cuerpos policiales están reclamando su lugar en unas negociaciones hasta hace poco impensables debido a un apriori identitario, los pensionistas siguen en la brecha callejera abriendo paso a la guía doméstica de manifestaciones varias señaladamente del mundo sanitario y social, cada semana cae una «manada» y «se excarcela a más violadores» ( sic) , y hasta jóvenes y jóvenas manifiestan su impotencia y angustia ante unas pruebas de acceso a la universidad que antes pasaban mayormente desapercibidas…

Sí, ciertamente, habría que ser eso que antes se llamaba un pol´ímata para ordenar, al menos discursivamente, todo lo anterior…¿Todo arde? Pero,¿qué está ardiendo exactamente ?

Dena erretzen da? Baina, zer ari da zehazki erretzen?

(c) by Vicente Huici Urmeneta

Publicado por

Vicente Huici

Sociólogo, neuropsicólogo y escritor.

15 comentarios en «ARDE (¿todo?)»

  1. Viendo todas las desgracias que ocurren y con tanta frecuencia, no queda otra que creer en lo dicho por J. Meslier: Si hubiese un Dios infinitamente bueno y sabio, impediría que existiese el mal, los vicios y las injusticias. Un mundo dirigido por el poder y el gobierno de un ser todopoderoso estaría exento de todo ello, porque si fuese infinitamente bueno y prudente, como dicen, no permitiría que sucediesen. Comprobar que hay tanta maldad, tanto vicio y tanta miseria nos indica de manera evidente que no hay Dios.
    Es incomprensible también que en un Estado laico exista un partido político llamado «DEMOCRACIA CRISTIANA», puesto que una vez hayan alcanzado el poder, nadie en su santo juicio, creerá que respetarán la normativa seglar…por lo que terminarán intentando imponer sus creencias.

  2. A mi modesto entender hay una buena parte de la sociedad que está a la búsqueda de algo, está inquieta, insegura, insatisfecha. De momento la firmeza en las creencias religiosas no han sido sustituidas por otras creencias del mismo tenor. Me parece ver más un cierto desasosiego interior que otra cosa. Le hago una pregunta don Vicente, aquí en Gipuzkoa, HB gobernó el ayuntamiento de Donosti y la Diputación Foral. Su gestión fue desastrosa. Entre otras hazañas hubo que llevar la basura hasta Cantabria para su tratamiento. ¿Qué ha pasado para que BILDU haya incrementado sus votos de manera importante? Mi, no comprender.

  3. A mi modesto entender el ser humano se está buscando a sí mismo, es una mirada introspectiva. Me parece ver más cambios sociales que políticos. Creo que hay mucha gente que ha perdido toda esperanza de que su voto valga para algo porque las grandes decisiones vienen dadas «desde lo alto». Ayer oí en la radio que se había creado una nueva agrupación feminista tendente a desarrollar y exigir derechos para la construcción de una nueva célula de la sociedad, el hogar monoparental femenino. Hay una vuelta clara al individualismo. Pero igual estoy equivocado

  4. Egunon:
    Yo creo que lo único que arde es algún bosque.
    El resto, se lleva quemando, sin llama, desde que la ciencia y la economía comenzaron a sustituir a las ciencias y a las economías que sustentaban la democracia liberal, sin que haya habido en el plano político (ni en la reglamentación social) evoluciones del mismo significado y de la misma profundidad. Me hace gracia cuando oigo, como si fuera un enorme mérito a representantes de algunos partidos hablar de sus ciento y no sé cuántos años de historia. Mi pregunta es: si la evolución que han sufrido esos partidos no han sido suficientes para dejar de identificarse con ese origen centenario… ¿siguen sus propuestas siendo válidas en la actualidad en un mundo alejadísimo del mundo que los vio nacer? Curiosamente «la derecha extrema y la extrema derecha» lo tienen mucho más claro. No alardean de su origen pero siguen siendo fieles al mismo.
    Lo que ha ardido (con o sin llama) han sido los posibles elementos aglutinadores pueblo, ciudad (¿estado?), la fe (cualquier fe), la clase social, la ideología, incluso determinados elementos generacionales… En estos momentos lo más aglutinador que hay es el hooliganismo hacia un equipo de fútbol.
    Las ondas y, sobre todo, las redes sociales, nos venden que cada uno y cada una de nosotros somos «influencers» y aportamos nuestro granito para exigir que se corten manos. Los jubilados que se reúnen/nos reunimos en determinadas exigencias, nos separamos a la hora de aportar soluciones a otros problemas también globales.
    Yo creo que lo que ha ardido, sin llama, es la consciencia de que somos animales gregarios (sin el sentido despectivo del término)… y ninguna solución válida para unos pocos individuos (aunque sean los más listos, los más guapos y siempre los más ricos) apagará ningún fuego, con llama o sin llama.
    ¿revolutio versus totum revolutum?
    un saludo

  5. Estimado colega: su aportación es de las que merecería leerse con detalle y debartirse en cada una de las derivas que se plantean. Y quizá la articulación fundamental de todo lo que se expone sea la indicación final que apunta a la elusión del carácter social de los seres humanos – aquel viejo «zoon politikón» aristotélico- que está generando el neoliberalismo económico y el iliberalismo político, en el marco de una cultura cada vez más narcisista.
    En fin, y una vez más, muchas gracias por el seguimiento y el comentario.

  6. Resumiendo:este texto presenta una serie de deficiencias en términos de claridad, estructura, coherencia y respaldo de argumentos. El uso de un lenguaje complicado y la falta de una tesis o mensaje central claro dificultan la comprensión y hacen que el texto sea confuso y poco convincente.

  7. Estimado Charles Boyer /Aureliano Buendía / ala auskalo nor: para «claridad, estructura, coherencia y respaldo de argumentos» tiene usted muchos textos y textículos a su alcance, así que la solución es muy sencilla: no lea los míos.

  8. Me sumo a Charles B. no comprendo para qué escribe estos textos tan raros y incomprensibles, y tampoco cómo se los dejan publicar.

  9. Como le he respondido a Boyer,no tiene usted porqué leerme . Probablemente pierde el tiempo intentando descifrar lo que tan solo son simples variaciones literarias…

  10. Egunon, Vicente.
    Supongo que no soy el único al que le encanta tu «claridad, estructura, coherencia y respaldo de argumentos», así como tus «textos tan raros y incomprensibles» (sic).
    En cualquier caso, queda claro que «influencers» con acceso a un teclado o a un smartphon de esos, no son, por desgracia, solo manos lo que quieren cortar, sino que prefieren cortar ideas y la posibilidad de que se publique aquello que no «comprenden». Censura que algo queda.
    Un saludo y muchos ánimos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *