No falta “erre” en el título que encabeza estas líneas, de no ser la de “Robar” aunque quién sabe si de la noche a la mañana como sucediera en Argentina, la Banca criminal declara su particular “ERE” de coral introduciéndola en el “Corralito” con la excusa de evitar la bancarrota provocada por bancarotas como el Aurelio Izquierdo que se cubrió las espaldas procurándose para si y los suyos la nada despreciable cantidad de 14 millones de euros en concepto de indemnización – antes parece un premio de la Primitiva – ficha propia de un crack de la Liga de campeones, como corresponde al caché de directivos que como él han llevado a la ruina al sistema bancario español, cuyo Curriculum Vitae: ex-Presidente del quebrado Banco de Valencia intervenido por el Banco de España y Director de Bancaja que ahora será nacionalizada, nada tiene que envidiar al del ex Director de Nova Caixa Galicia José Luis Pego que se marchó con 18,5 millones bajo el brazo, al de la Ex Directora de la CAM María Dolores Amorós que se fijó una pensión vitalicia cercana a los 400.000 mil euros anuales o al de tantos otros colegas del hampa financiera.
A cuantos como yo nos da reparo hablar de dinero o ponerle precio a nuestro quehacer, nos gustaría comprender el proceso de cómo llega una persona de nuestra sociedad, primero a imaginar en la intimidad como posible, luego atreverse a plantear en público, posteriormente convencer a otros y finalmente hacerlo realidad sin el menor peligro físico ni judicial, la idea de que se blinde su situación laboral con dichas cantidades que superan con mucho lo decente y aún lo que hasta ahora ya se tenía por indecente.
En este caso no funciona la noble advertencia de no atribuir a la maldad lo que es fruto de la estupidez, porque cambiaría por entero el sentido de ser estúpido. Mas tampoco sería justo entregar a la fantasía particular de grandeza o al delirio colectivo de su contagio el protagonismo de su desencadenante, cuando seguramente en el fondo de sus corazones no anide otra cosa que la inocente mímesis con que se conducen las pobres almas corruptas guiadas por la sabiduría de sus ancestros que sin sonrojo les indican aquello de “Adonde fueres, haz lo que vieres” que es de provecho entre personas honradas, laboriosas, justas y educadas, pero no entre traidores, truhanes y maldicientes. Dicho principio fue abiertamente declarado por el famoso Roldán alias “El Algarrobo” quien llegara a ser nada menos que Director de la Guardia Civil cuando fuera acusado y detenido por haberse lucrado indebidamente con aquellos Fondos Reservados, a saber: “Yo no sé porqué se me acusa a mí, si no he hecho otra cosa que lo que hacían los demás” Y no le faltaba razón. Principio que también podría explicar cómo un chico de provincias como Iñaki Urdangarín, de buena familia, con dinero de papá, prestigio deportivo y posición social por matrimonio, lo haya arriesgado todo por apenas 10 millones de euros, pues como dicen los alaveses, eso no lo ha aprendido en Vitoria.
Aun así, lo de esta gentuza de la Banca, riza el rizo, porque no contentos con arramblar nuestros ahorros, quieren hacerse pasar por víctimas del sistema – estratagema todavía no empleada ni siquiera por la Casa Real – como se deduce del mensaje subliminal que se le transmite al receptor cuando de continuo se etiqueta de “Indemnización” al botín que estos granujas se llevan con la complacencia de sus cómplices políticos, cuando aquí el daño se le hace a todo el Pueblo ¡eso sí! Siempre de forma pacífica y democrática que para algo se les vota.