Reflexiones desde la soledad

Quince días encerrada en un pequeño apartamento, solo con la compañía de la televisión, internet, libros de arte, y un curso de inglés, y pienso…pero yo lo que quiero es no pensar!, pero pienso!, hago balance de mi vida, de lo que ha quedado dentro de mi, de las alegrías y las desilusiones, del sentido de esta, o el sinsentido a veces!, me siento cuerda y pienso con claridad, de la adoración que he sentido siempre por el arte, las flores, las cosas bonitas…

Recuerdo el jardín de Amama Cristina, creo que ahí empezó todo, los Lirios azules, las Rosas con un perfume inolvidable, Alceas, Clavelinas y tantas otras… al lado un gallinero, cercado con un alambre que he seguido viendo después colocado en muebles, en medio una casita para que las gallinas pudieran resguardarse, cuanto gusto!, que bien hechas estaban las cosas, que buena composición, son recuerdos de la niñez que nunca se olvidan.

El día de mi primera comunión Ella me trajo unas flores, no recuerdo que más me regalaron, pero jamas he olvidado ese ramo construido con las flores más frescas y bonitas, con los colores perfectamente combinados, y aquel olor…

Todas estas cosas me han transportado a un mundo mágico, huyendo del que tenia y no me gustaba, al final me siento una refugiada de la vida que me ha tocado vivir, siempre hay una salida, si no me gusta mi vida, me la invento!, y cuando tengo ganas de llorar abro el libro de arte y me quedo extasiada, y puedo soñar, y no cambiaria nada porque simplemente no puedo!, e intuyo que el futuro no se prevee feliz, ni mucho menos…

Y a partir de ahora? Vivir hasta que me toque, en mi mundo mágico en el que hay muchas más cosas de las que pueda imaginar , deseos, ilusiones, esperanza, mucho amor para dar y días de sol.

Idoia Goiti

2 comentarios en «Reflexiones desde la soledad»

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