Tras la ruptura suelen arreciar los trastos a la cabeza, que ya volaban desde tiempo antes anunciando el inminente e inevitable final. Es una inútil pérdida de energías. Los reproches muerden la mano que los alimenta con mayor saña que el tobillo al que son lanzados. Es mucho más práctico, aunque sea una cursilada del nueve largo, aplicarse el bálsamo Tagore. Si lloras por la pena o por la rabia de no ver el sol, las lágrimas te van a coronar con la cabronada de no dejarte ver las estrellas. Añadamos que no estamos hablando de amor, sino de política -donde los sentimientos son de atrezzo-, y concluiremos que no procede hacer un drama de lo que ha ocurrido con Nafarroa Bai.
A nada nos lleva el sorteo y adjudicación de culpas. A menos todavía nos conduce que el resultado del descasamiento sea aumentar el saldo de rencor entre los que fuera o dentro persiguen el mismo fin. Que si EA ha pretendido jugar a dos barajas, que si el PNV se ha pasado de intransigente, que si Aralar se cree que el juguete es suyo, que si la Izquierda abertzale ilegalizada ha querido cargarse el invento, que si los independientes no lo son tanto… Todos tienen un argumento arrojadizo con su correspondiente dosis de razón y su pertinente contrarréplica. Desde el córner, los adversarios a batir en las urnas sonríen y hasta se dan el lujo de amagarse entre ellos, sabiendo que pactarán tras las elecciones. Hasta ayer temblaban ante la cada vez menos remota posibilidad que se les vuelque la tortilla foralista.
Aritmética
La cosa es que eso sigue siendo igual de soñable tal y como han quedado las cosas tras el último episodio. Hay un miedo cerval al efecto de la Ley D’Hont sobre las escisiones, parejo al mito que circula sobre lo bien que se porta con las coaliciones. Basta estudiar un puñado de procesos electorales con perspectiva para comprobar que esto último no ocurre tanto. En política la suma de dos y dos rara vez da cuatro.
El éxito hasta la fecha de NaBai ha ido más allá de las siglas e incluso de las ideologías que la han conformado. Sus votantes no se corresponden milimétricamente con los que cada formación tenía -o tendría- por separado. Eso no tiene por qué cambiar con la ausencia de EA que, en la hipotética unión con la izquierda abertzale que hasta ahora estaba fuera del juego, puede cosechar también un resultado interesante. Exactamente igual que van a hacer PP, UPN y, con toda probabilidad, PSN, será cuestión de esperar a que las papeletas estén contadas para ver si la aritmética es propicia.
…. y se te ha olvidado en todo esto Batzarre, que ahora se presenta junto a IU con el nombre de Ezquerra-Izquierda. ¡Uy que mala memoria Javier! Si es que al final lo que verdaderamente nos pone es una buena Txapela y lo demás son monsergas «públicas»
Siempre he pensado que una txapela bien colocada,mejor sobre una «tocha» lo suficientemente racial,y una gabardina bien llevada, resulta infinitamente más elegante que una gorrilla manchega y una cazadora de cuero o americana a cuadritos.Donde vas tú a comparar….
Habrá gente que piense lo contrario.
Yo lo único que digo es que al que no le guste la txapela,que no se la ponga.Al que le prive más la gorrilla manchega,pues que se la ponga,pero que no se la quite antes de las elecciones para volver a ponérsela pasadas estas según hayan dado los resultados y las poltronas.Además,al ir la gorrilla manchega «a presión»(mecanismo este mucho más moderno y refinado que la rosca,donde va usted a comparar,pero algo más traumático),el quita y pon puede inducir la jaqueca y hasta en algunos casos,si se poseen factores de riesgo previos y la suficiente troupe de palmeros incondicionales riéndote las gracias,hasta la estulticia ligada a la «ciudadanía del mundo mundial basada en la unidad de destino,Español, por supuesto,en lo universal».
Siempre recuerdo aquellas fotos de aquellas txapelas y aquellas gabardinas que pasaron lo mejor de su vida llevando durante la postguerra civil y mundial la dignidad y la esperanza de lo vasco al mundo.Todo ello con la suficiente categoría como para alternar la txapela y el sombrero según lo requeriera la ocasión.No todos,pero sí la mayoría,eran abertzales,autodenominados patriotas vascos,sin complejos,sin chorradas,imbuidos de la universalidad ya desde entonces.Y ahora nos viene la banda esta de trileros paletos y golpistas Españoles a liberarnos del «parque temático» de la txapela y la endogamia.Desde España al mundo.Y se piensan que han descubierto la polvora la partida esta de nacionalistas Españoles acomplejados y resentidos.
Por mí,que se pongan un casco de astronauta,a ver si así se demuestran a si mismos lo «universales» que son.Y que les vayan dando,que ya vendrá la vuelta.Y no tardando.
PDT:Disculpa el fuera de tema,pero es que el tema este de la txapela y los ciudadanos del mundo me puede.Mi comentario no pretende ser respuesta alguna al anterior comentario,simplemente me ha recordado el asunto.
Te sugiero una nueva sección(tipo cocidito) referente a la cascada de filtraciones y elucubraciones basadas en «anónimos» y en declaraciones del señor «fuentes» que,oh casualidad,siempre van en la misma dirección y cuyo último ejemplo titula hoy el correo Español algo así como «el misterio de la planta tercera».Seguro que el PSE no manda carta alguna a los medios denunciando que desde el «anonimato» se fabula contra un partido.Fijo que no.
Sugerencia para el nombre de la sección:»quién tiró la piedra?».