Después de que el pasado viernes los medios del Grupo Noticias publicáramos que desde EH Bildu se había intentado frenar la denuncia contra Miren Larrion, la coalición soberanista difundió una durísima nota en la que no quedaba títere con cabeza. La idea era que estábamos buscando lo que no había y, además, con la colaboración de instituciones públicas y partidos interesados en embarrar el campo. El comunicado terminaba con una frase lapidaria: “El tiempo pondrá, sin lugar a duda, a cada cual en su lugar”.
Y así está siendo. Ya el propio lunes, un responsable de EH Bildu reconocía que, efectivamente, se produjo ese intento de retirar la denuncia. Aunque lo verdaderamente significativo es que se contara que, tras conocer la gravedad de los hechos, la víctima de la suplantación pidió ampliarla. Eso ya nos sitúa en el meollo del asunto, que tiene fondo personal, pero también una indudable dimensión pública porque, como se está contando desde diferentes medios —ya no somos solo nosotros—, la hipótesis principal es que Larrion intentaba incriminar a su compañera de Ejecutiva en una actividad fraudulenta para provocar su expulsión. Como telón de fondo, las diferencias políticas y humanas entre ambas. Incluso aunque la formación es víctima del turbio caso, hablamos de hechos que merecen ser conocidos.
Pues no deja de ser una lástima que en todas partes cuezan habas y en algunas, calderadas.
Que un representante de un partido en el que en primar lugar buscas honestidad defraude tanto como persona es lamentable y daña la imagen de todos los políticos. Sobre todo si vas de sobrado como estandarte de pureza.
Es por ello que el video «viral de esa periodista de ultraderecha que camufladita de persona sensible y cansada pedia un líder fuerte que «nos guie» en lugar de los políticos, no es ni más ni menos que una maniobra de las cloacas para reclamar en 2021 lo que los españoles sublevados y golpistas hicieron en 1936 y encima dando imagen de modernidad y que ha gustado tanto a cavernicolas de toda la vida como a pijoprogres con pocas luces.
No compitan señores políticos vascos en comportamientos inmorales con la ultraderecha. Ellos siempre ganan por goleada en cuestiones de miseria moral.
Esas cosas las gestiona mejor Villarejo el del parche de pirata.
Pues que mala pinta tiene todo este asunto….
Dime de qué presumes y te diré de qué adolece.
Creo que si, como dicen, es un tema SÓLO personal, su aclaración sería muy fácil: que ambas implicadas lo cuenten todo con pelos y señales.
Así quedarían mucho mejor ante la opinión pública, aunque dirán que si es personal, no le interesa a nadie. Y pueden tener razón, pero que no olviden que son personas que, en determinados momentos han ocupado cargos públicos y han sido votadas para ello, y eso condiciona lo personal.
Lo malo es que, según creo, es algo más que una cuestión personal.
Y ahí está la cuestión…. Y la complicación para decir la verdad.
Pues si eso es cierto menuda es la Carrión ,eso como bien dicen por aquí parece propio de Villarejo .Así que Bildu hace lo propio defenderse atacando …
Madre mía, esto empieza a parecerse a Dallas….¿os acordáis de JR?