El Athletic, con Llorente de nuevo titular, superó a un Albacete muy valiente en un partido que se decidió en al segunda parte y que quedará para el recuerdo el gol de tacón de escuela carioquinha que se sacó de la chistera Toquero. Puso La Catedral boca abajo. La imaginación es la loca de la casa. El miércoles toca el Mallorca de Caparrós. Que siga la locura.