Los leones merecieron mejor suerte pero los errores defensivos, convertidos ya en una lacra, les condenaron al empate. Un clamoroso fallo, hacia el final del partido, de Unai Simon en un balón aéreo impidió el triunfo rojiblanco.
Los leones merecieron mejor suerte pero los errores defensivos, convertidos ya en una lacra, les condenaron al empate. Un clamoroso fallo, hacia el final del partido, de Unai Simon en un balón aéreo impidió el triunfo rojiblanco.