Desafortunado boicot a un concurso de diseño

Siempre he sido muy crítico con los concursos de diseño, lo he comentado varias veces e incluso he escrito algún post hablando del tema. Desde graffica.info llega una nueva vuelta de tuerca, en forma de protesta, de un grupo de profesionales que se propuso boicotear un concurso en Alicante.

El cartel de la  Feria del Libro de Alicante 2017 contaba con un «suculento» premio de 500€, lo que indigno a buena parte de los diseñadores, además la forma de elegirlo era a través de los likes de una página de Facebook. Aunque esto no puede ser peor que un jurado con el concejal de turno junto con dos coleguitas que le den el premio a un tercer amiguete.

Tras poner el grito en el cielo se formó un grupo con el fin de ridiculizar el concurso, aprovechando que se trataba de un número elevado, eligieron un cartel de baja calidad para promoverlo como ganador a modo de reproche, y lo consiguieron.

Cartel_FeriaLibroAlicante

Mi desacuerdo con el método viene dado por el hecho de que para poner el valor una ofensa a un colectivo se inclinan por ofender a un tercero, en este caso el autor del cartel, que no tiene ninguna culpa de la situación.

Buena parte de las mofas y críticas no han ido dirigidas a la organización, sino al aspirante a diseñador, que después de la afrenta malditas las ganas que le van a quedar de formarse en este campo.

¿No hubiera sido mejor que alguien con formación y prestigio hubiera presentado una obra de ínfima calidad, para denunciarlo a bombo y platillo y donar el premio a una organización benéfica?. ¿O es qué nadie se atrevía a quedar en ridículo y han buscado un cabeza de turco que cargara con las bromas a su trabajo, mientras ellos se jactaban de su profesionalidad?.

 

 

Concursos de diseño. Anova, JovesPV-Compromís y Podemos

Comparto la opinión largamente defendida por graffica.info de que los concursos de diseño son un modelo especulativo en la que los convocantes quieren comprar barato y vender caro. Es inimaginable llamar a un grupo de médicos, abogados, fontaneros…. para que hagan un trabajo y sólo pagues al que más te ha gustado, sin valorar siquiera cuál ofrece mayor calidad. Además abonarás una cantidad muy por debajo del precio de mercado.

Esto es lo que viene sucediendo habitualmente en el mundo en que nos movemos. Busquemos ejemplos en el campo de la política:

Anova – Irmandade Nacionalista, organización gallega asamblearia enmarcada en la tradición nacionalista ha convocado un concurso para diseñar el logo y la creación del manual de identidad corporativa. El premio 500€, evidentemente muy por debajo de lo que cualquier profesional cobraría por el desarrollo de un trabajo de este calibre. Incendiadas las redes sociales y con el rechazo de la Asociación Gallega de Diseñadores nos encontramos con la ironía de un twittero (@troleadagalega)

anovaOtro ejemplo, más sangrante, es el de la formación valenciana JovesPV-Compromís. Lanzó un concurso de diseño «abierto a la ciudadanía» para encontrar el nuevo logo que identifique «visualmente los valores, principios e ideas» de la organización. La remuneración por este trabajo, 0 €. Ante el aluvión de críticas retiró la propuesta.

Pues bien, ahora la formación política Podemos el 21 de enero hacía pública a través de su Facebook la convocatoria «para la contratación del servicio de diseño, implantación, y supervisión de ejecución de las sedes sociales de Podemos». Está dirigido a estudios de arquitectura y diseño de interiores.

0-Podemos-ConcursoEntre todos los requisitos arquitectónicos y de interiorismo en el punto 7 de las bases  aparece:

• Propuesta de nombre y logotipo para las sedes. (vectorizado, B/N y color). (…) teniendo en cuenta criterios de marketing que garanticen la viabilidad del proyecto y la concordancia del nombre con los objetivos planteados…

• Propuesta de elementos corporativos distintivos y constantes: elementos de libre creación que aporten solidez, presencia e identidad a las sedes sociales, siempre inspirándose en el libro de estilo  (Ejemplo no vinculante: mascotas, ciertas texturas o materiales que aporten sensaciones acordes al concepto de las sedes sociales, etc)

• Infografías del diseño de una sede tal como la concibe y diseña el candidato, en 3D formato digital compatible con Microsoft.

Para terminar hay que señalar que «El presupuesto para el concurso queda dividido en tres fases. 1. Fase General: entre 800 € y 2.000 € (más IVA). Fase de Implantación: Proyecto de implantación y ejecución de obras, entre 175 € y 340 € por metro cuadrado (más IVA). Fase de Supervisión: entre 800 € y 2.000 € (más IVA)».  

Me da la impresión que la formación de Pablo Iglesias se suma a un proyecto especulativo en el que los profesionales no pueden marcar un precio justo por su trabajo,  van a invertir sin ninguna seguridad de que van a ser remunerados y no se valora en absoluto el diseño gráfico.