¿Qué pinta Ciudadanos montando un acto en campaña electoral en una localidad donde no presenta candidatura municipal y en la que en las recientes generales apañó 37 raquíticos votos? En la lengua de mis ancestros se dice foder por foder, aunque lo podemos traducir con mayor finura como tocar las narices o, en llano, provocar. A nadie se le escapa que el numerito de hoy en Ugao-Miraballes es la enésima versión de los autos sacramentales de Iruña, Altsasu o Errenteria. Y como en todos esos lugares la jugada les salió de cine, todo hace temer que los informativos de la jornada vuelvan a abrir con las imágenes de la gresca de rigor.
Precisamente, el éxito cosechado en las funciones precedentes debería actuar como escarmiento o entrenamiento. Por más eficaces en la bravata que sean el figurín figurón y sus secuaces naranjas, esta vez sí, la respuesta debe ser la indiferencia. Si puede ser absoluta, mejor. Hay que evitar el contacto físico a toda costa. Diría que incluso el visual. Ni media mirada. Que vengan, que se suelten la chapa a sí mismos y a los innumerables cámaras que habrá aguardando alpiste, y que se larguen sin que nadie les toque un pelo y, en consecuencia, con la sensación de fiasco.
Hago mis votos para que así sea, y veo que en ese sentido van los llamamientos de instituciones y partidos razonables. Me temo, sin embargo, que el ventajista Rivera encontrará el roto para su descosido, el hambre para sus ganas de comer notoriedad facilona, o lo que es lo mismo, los cómplices indispensables para que su mascarada transcurra con la épica prevista. Si no ocurre así, prometo ser el primero en aplaudirlo.
Hace unos años, en la etapa más bronca del Basta Ya, Foro de Ermua y demás business, la ultra ortodoxa e inmaculada derechona española convocó una manifestación en Donosti, no se sabe si a favor o en contra de alguien, que con estos nunca se sabe.
Pero un conocido mio, que vivía en La Parte Vieja por aquel entonces, me contó que decidieron, entre comerciantes y vecinos, echar la persiana, bajar tb las de las viviendas y abandonar las calles por unas horas hasta que pasara la marabunta rojigualda.
En aquellos años fue todo un logro, si es que realmente hubo un desplante tan exitoso.
Hoy en cambio creo que sería mucho mas inteligente la indiferencia más absoluta y además, creo que saldría 0 coste a los vecinos de Ugao.
Está por ver si algunos nostálgicos de la Kale Borroka, que los hay, tienen demasiado mono de protagonismo, o algún infiltrado pikoleto o similar se gana un sobresueldo con otro numerito histriónico, que la Ertzaintza en su día detuvo a más de uno.
Propaganda irresponsable y taimada, de VICTIMISMO enaltecedor de abuso antivasco, ya que ellos son de origen COLONIAL CONQUISTADOR, de Engreidos y Altaneros, sin pudor ni ética, ni gallardia y respeto a los ciudadanos de una ciudad a la que de antemano los tachan de TERRORISTAS, y ellos se autodenominan pacificistas, cuando solo son Bomberos INCENDIARIOS disfrazados de democratas, en busca de protagonismo mediatico ULTRA ESPAÑOLISTA, muy AGITADOR y PERTURBADOR, de su escuela de impunidad FALANGISTA Franquista impune Totalitaria.
A mi estas performances ya como que me dan mucha pereza…., catalanes y vascos es todo el «argumentario» que tienen algunos, en fin, que ya miramos al futuro, que todo eso está adulterado…… Soy partidario de la indiferencia absoluta, previa decoración del lugar del miting con ikurriñas en los balcones y algún mensaje en una pancarta y a cascarla (algún «calvo» desde el balcón sería a valorar….., aunque no es imprescindible) , que el Riverita chapoteé en su bilis y que descarguen sus neuras. Ongi etorri, agur y no vuelvas (siempre que no sea para jod… la marrana).
Again…
Ciudadanos, cabe recordarlo, nació en Barcelona con la intención de atacar la lengua, la cultura y el autogobierno de Catalunya, con una especial obsesión contra la inmersión lingüística en las escuelas. Inmersión que, tampoco va mal recordarlo, fue impulsada por padres andaluces de Santa Coloma de Gramenet que no querían que sus hijos vivieran al margen de la realidad catalana.
Esa es su única ideología y su solo objetivo: la destrucción, la desaparición de Catalunya como nación.
Y, como son incapaces de construir y proponer, se dedican a la bronca. Cierto es que sus votantes (franquistas de la parte alta de Barcelona, funcionarios españoles y, sobre todo, obreros de los barrios pobres de Catalunya) no les piden más.
Y así llevan años y no les ha ido mal: fueron el partido más votado en Catalunya en las elecciones ilegales que el corrupto M. convocó el 21-D de 2017 aunque no les valió para nada y ahora se disputan con los herederísimos del Caudillo el trono de la derechona española.
No son sólo ultranacionalistas españoles: son etnicistas. Su fuente de inspiración es el nacionalismo serbio de los 80 y 90 hasta el punto copiar – con aquel globo sonde de Tabarnia – la República Srpska de Bosnia-Hercegovina.
Su idea, como bien expuso un periodista catalán es «Una Catalunya sin catalanes».
Son mucho más peligrosos que el PP y, si me apuráis, que Vox.
Menuda sobreactuación. De un lado los que no creen que los otros tengan derechos y en el otro lado… pues mira, los que creen que los otros no tienen derechos.
Y es muy humano pero, ¿En serio que no os pasa a ratos lo del final de Rebelión en la Granja (el libro) que ya no se les puede distinguir a unos de otros?
Pero ir a Madrid a pitar el himno de España, al Rey, corear Esperanza, hija de puta, etc, es ejercer la libertad de expresión, no?
Para AJ,
Siento por ti que no puedas ver la diferencia entre RIverita y los suyos y los que protestan contra ellos.
Pues no ha sido posible; una vez más…le han hecho, algunos, el juego , le han regalado la imagen que querían, le han puesto en bandeja la frase resultona y nos han hurtado a los demás la apetitosa imagen de la celebración del acto en medio de la indiferencia y la normalidad más absoluta (ese heroico acto en medio de gente paseando al perro, andando en bici, regando las plantas, echando un pitillo en distendida charla, como si no hubiera nadie).
Y me parece muy preocupante. Muy preocupante que… una de dos (o las dos); que no les dé para entender algo tan obvio o/y que tengan tan arraigado ese concepto de matón de barrio, de pandillero, de posesión del territorio, que no sean capaz de resistirse a la necesidad de demostrar que ellos sojn los que permiten o no los que pueden venir a su territorio, lo que se puede decir o no en sus calles, etc. El chulo del barrio, vaya, que no puede dejar que otros vengan a su barrio a que le desafíen.
Porque, al igual que la última vez, además de la evidentísima obviedad de la intención de la provocación y del infame uso de la cuestión, hay que volver a repetir que Rivera tiene derecho a venir a Euskadi sin que ser acosado por ello en la calle ( y no me gusta a lo que viene como no me gustan otras cosas que hacen otros en ñas que creen sus calles, que también son las mías y no voy a reventarles sus performances), que Marta Sánchez tiene derecho a ir a cantar a Catalunya lo que le dé la gana sin que le tiren huevos, etc.
Un grupo que no hace nada cuando parte del mismo homenajea a asesinos vergonzosamente; que cree que la calle es suya y que puede definir quién cumple los criterios de pureza.
Incluso en ese chillido agudo y asustado de «no es lo mismo» que acabas de soltar hay taaaaantaaa familiaridad.
Podemos darle vueltas y vueltas a los derechos. Si Riverita tiene derecho a ir donde quiera, también la gente de cada pueblo tiene derecho a protestar.
Y, no nos engañemos: Alberto Carlos y su troupe neofalangista no van a Vic o a Altsasu o a Miraballes a ejercer sus derechos.