No soy de los que regresan al tajo arrastrando los pies y maldiciendo su mala estampa. En los tiempos que corren y viviendo muy decentemente de lo que (todavía) más le gusta a uno, resultaría obsceno. Es verdad que tampoco vuelvo al teclado y al micrófono como lo hacía en mi más o menos lejana mocedad, con la adrenalina hirviendo y rebosante de ganas de pisar mil charcos, entonando el “a mi, Sabino, el pelotón, que los arrollo”. Se templa uno —o lo van templando los hechos—, de modo que aprende a dosificar el entusiasmo para que dure todo el curso o, en el caso más realista, para que llegue, como poco, hasta el control de avituallamiento de navidad. En el éxito de la empresa ayuda mucho un buen látigo de siete colas —que sean nueve— para mantener a raya a la pérfida pereza, tentación omnipresente de los que, además de ser natural galbanoso, llevamos decenios con la sensación de voltear indefinidamente la misma noria.
Sensación falsa, me apresuro a anotar, pues si bien es cierto que muchos de los asuntos a los que dedicamos tinta y saliva parecen una repetición en bucle de lo ya vivido y ya contado, también lo es que cada equis se van incorporando al menú platos de estreno. Y lo mejor, muchos de ellos, inesperados, para pasmo y congoja de los que creían tenerlo todo bajo control. Su incertidumbre atribulada da sentido a este, mi oficio de trasegador de noticias y similares. El principio del fin del bipartidismo en España, el ocaso del foralismo rancio en Navarra o las urnas catalanas precedidas (casi ya) de las escocesas se nos insinúan en el porvenir inmediato. Aquí estaremos para contarlo.
Oye, con ganitas de verte de vuelta.
No puedo dejar de pensar en la cola (perdón) para el puesto de cómitre (perdón otra vez): y yo que tenía tan buenos propósitos para este septiembre… Me han durado dos días…
De nuevo con los mortales eh? Y como para venir encima cabreado. Obreros con vacaciones pagadas van camino de ser una rareza laboral, como los contratos fijos y bien remunerados. Ya estará Rajoy y la virgen de turno pensando la nueva reforma laboral: las vacaciones las paga el obrero al patrón, que ya está bien de tanto comunismo proletario… En cuanto a lo político, hombre que se nota mucho, a ver, el principio del fin del bipartidismo en España, no se, después de oír al Guerra, si, pero porque su fusionan en uno solo, como dios y la santísima trinidad; el ocaso del foralismo rancio en Navarra dependerá de Bildu y PODEMOS, los demás dudo que trabajen o hayan trabajado alguna vez por su “ocaso”; las urnas catalanas precedidas (casi ya) de las escocesas se nos insinúan en el porvenir inmediato, e ilusionante. Solo falta la CAV, esa que ha estado casi siempre en manos del PNV con algún que otro ¿Habrá que decir algo? Ah si, la “novedad” es que pretenden aliarse con el PSE y desarrollar el estatuto en su totalidad. Joder, como en los 80 tú.
Pues nada, bienvenido. Se echaba de menos la columna.
Dado que, efectivamente la realidad gira sobre los mismos ejes, me permito sugerir un tema relacionado también con el tema del fin del bipartidismo y el fenómeno «Podemos» que creo que fue de tu interés en la recta final del pasado curso.
Pido disculpas si este no es el sitio por ser simplemente una entrada de salutación post vacacional…pero es que no me resisto y siento curiosidad por tu opinión al respecto, a la luz de tus reflexiones pasadas sobre «Podemos».
Me refiero a la andanada que les ha soltado Willy Toledo; de las que hacen daño porque le abre un frente por la izquierda con el que no contaban.
No sé qué pretende el tal Willy o si sólo responde a las necesidades de un ego desmesurado pero uno diría que la jugada podría estar pensada por el más pérfido estratega de la derecha (si tuvieran estrategas tan finos).
Ver a los acusadores de la casta ser acusados a su vez desde su izquierda de «castosos». Qué placer para muchos. Un poco de su propia medicina; quizás se lo tengan un poco merecido; por soberbios.
De todos modos, yo al bueno de Willy, que arremete contra discursos y declaraciones porque quiere hechos, casi le diría que ya, si eso, se ponga él también con los hechos, en vez de rajar tanto y con tanto eco. Que coja el las riendas de la verdadera izquierda y la lidere y consiga en poco tiempo un número de votos que ponga nervioso al establishment, en vez de hacerles reír, como ha hecho él.
Perdón de nuevo si este comentario está de más en esta charla.
Ongi etorri Javier !
Larry: Lo de Willy lo estoy viendo con palomitas desde butaca de patio. Después del tuit incendiario, escribió una torrencial diatriba en la que mezcla barbaridades de sonado con tres o cuatro verdades… que lo son porque él conoce el paño de primera mano. En todo caso, es muy gracioso ver cómo un pequeñoburgués de libro como él se pone de ejemplo de proletario. Lo mismo que sus contricantes dialécticos, por cierto. Peroi cuando les dice a Pablo, Monedero y Echenique que ellos también son miembros de una casta (la intelectual/oide), pues creo que no anda muy desencaminado.
Je, je; sabía que te estaba entreteniendo el culebroncillo. La verdad es que es una pelea de tartas, como las del cine clásico, en la que todos tienen un merengue que tirarle a otro a la cara.
El otro día en una de las tertulias de Cuatro (o de la Sexta, no recuerdo) le preguntaban a Monedero por el tema y vino a decir que Willy mejor que se dedique a lo suyo, a tratar de hacer buenas películas.
Claro, la puso tocadita, templada, rasita y al punto de penalti; sólo hacía falta rematar a bocajarro. Y eso hicieron en plancha el resto de tertulianos recordándole que ese era el mismo argumento de la derecha para desacreditar a los actores, artistas, etc de izquierdas que criticaban sus políticas.
Yo creo que con algo menos de soberbia, con algo menos de dogmatismo y con algo más de respeto hacia otras opciones políticas (que, vale, están como están y han hecho lo que han hecho, pero que tienen sus miles de votantes, que tienen gente tb honesta) se evitarían caer en estos renuncios y se evitarían a tanta gente deseando verles caer en los mismos (sin renunciar a nada de sus principios, contenidos o aspiraciones).
Y de Willy Toledo, otro tanto. Desconozco hasta que punto tiene razón o a qué se refiere exactamente ni cual ha sido su experiencia. Pero creo que esas declaraciones suyas le hacen más daño a Podemos que cualquier ataque anterior que hayan recibido de otras trincheras. El sabrá por qué quiere hacer semejante daño a la única opción que, sin ser perfecta y pura (lo acabo de explicar), sí que se parece algo a la izquierda.
Y…lo que decía antes; si a Willy no le vale nada ni nadie, si pone a parir a todos, si critica que estos partidos no hacen más que hacer discursos si hechos, si él representa a la auténtica izquierda…pues a lo mejor debe ser él quien pase de las palabras a los hechos, de las críticas a los demás a la acción y entrar en política a salvarnos a todos.
Me ha encantado lo de «de natural galbanoso», coño, si es que vamos a ser familiares y todo…
Cómo se nota qué neuras tiene cada cual, señor qué guerra con los de Podemos, nadie se da cuenta que la alternativa al bipartidismo en Francia son los ultras? Hacía falta un soplo de aire fresco a la dictablanda en los países europeos, ni tan mal los de Podemos (por lo menos por ahora).