Indudablemente, la pifió el speaker del BEC, y la abrasadora conciencia de ello es, me atrevo a porfiar, la peor de sus penitencias. Más dolorosa, incluso, que haber perdido el puesto o verse como pasto de los devoradores de basura informativa alta en proteínas y huérfana de nutrientes. Seguro que en su moviola interna no deja de reproducirse en bucle el infausto momento en que se le ocurrió pespuntar la letra de la canción de Enrique Iglesias (eso sí es que es denunciable) que sonaba con la presencia ornamental de las cheerleaders (y eso, ni te cuento) en la cancha. Como bien sabemos los que piamos sin red y tenemos una larga lista de bochornosas melonadas soltadas frente a un micrófono, las transiciones las carga Satanás. Ocho de cada diez te salen rana, y algunas, como la del desventurado Charly, resultan un gambón épico. “¡Quién pudiera pasar una noche con una de las Dreamcheers!”, soltó ante miles de espectadores que, por cierto, tampoco parece que se revolvieran en sus asientos. Ni los que comprendían el idioma ni los que no.
Sí se quedó con la nada ejemplar copla una periodista, que lo publicó —por lo visto, con algún adorno— en un modesto y meritorio medio digital. Luego llegaron las réplicas en cabeceras de postín a la caza del click facilón, la torrentera en las redes sociales y, por resumir, el despido del autor del desafortunado comentario.
En el minuto exacto en que escribo, se han formado dos facciones de inquisidores. Unos quieren crucificar al speaker, y otros, siguiendo el clásico de apiolar al mensajero, a la periodista. Menos mal que muchos permanecen en la bendita sensatez.
Otro tema que también me dio mucho que pensar.
Y yo hablaría de dos vertientes. Una es la del hecho o comentario en sí. ¿Es para tanto? ¿no? ¿Nos estamos pasando? O al revés…¿es importante cortar de raíz cualquier tema, aunque nos parezca nimio, en ese sentido por aquello de que por ahí se empieza?
La verdad es que no estoy seguro. El comentario pues..me parece casposillo, cutre, de otro tiempo; sí. Pero el propio concepto de cheerleaders o la cancioncita de Iglesias (no el de Podemos, eh?)…¿por eso no echan a nadie?
Y aquí enlazamos con la ora vertiente; las ganas de cortar cabezas que tiene el personal. La intransigencia, la mala leche. ¿Esta persona se tiene que ir al paro, a la calle por esta chorrada? ¿No vale un toque de atención? ¿o una disculpa y una reunión para fijar unos criterios y unas pautas?
¿En qué situación queda esta persona? ¿Somos todos tan perfectos e inmaculados en nuestros día a día? ¿Estamos dispuestos a que nos apliquen a todos el mismo rasero, la misma exigencia? No quedábamos ni uno.
Y la crítica va también hacia los responsables que han tomado la decisión de echarle. Yo hubiera aplaudido que algún responsable dijera por ejemplo:
«Pedimos disculpas porque ha sido un error y un comentario fuera de lugar. Vamos a tener mucho cuidado en temas como este en el futuro. Pero no vamos a despedir a una persona, que tendrá una familia (no sé si es el caso) a mandarla a la calle, por un error. Hablaremos con él pero a la gente hay que darle la oportunidad de corregirse y perder un puesto e trabajo creemos que sería una medida demasiado dura para esta persona»
Estoy un poco pesada pero como acabo de comentar lo de Rotherham pues sólo decir que damos demasiada importancia a algunas cosas y poca a la violencia verdadera. En todo caso el problema es que algunos hombres se creen con derecho a pasarse por la piedra a estas decorativas cheerleaders (lo de siempre, ellas lo son porque quieren) y si no están a mano, se las coge por la fuerza o se va algún local, piso como en Rotherham, se paga y te quitas el cargo de concienzia porque pagando no se viola ¿no?.
En todo caso no hay que crucificar a la gente, yo también pienso qué maravilloso sería pasar una noche con Johnny Depp pero no voy a violentar a nadie para cumplir una fantasía mía. El problema es que algunos hombres sólo nos ven cómo un posible trofeo sexual, ya sabes que érais cazadores en el Paleolítico y eso, sólo hay que escuchar algunas conversaciones de algunos grupos de hombres cuando se creen que están solos.
En fin, la fantasía es lo único verdaderamente libre, igual debería haberse cortado un poco pero no hay para tanto. Por último los lemas sociales son muy contradictorios, llevamos casi una década diciendo por la tele, hay que ser sexy, hay que follar que aquí no se folla … y éste pobre pensó que decía que lo que se esperaba de él y luego viene la quema. Ya me callo, que ya me vale.
Señorrrrr, he puesto concienzia en vez de conciencia, lo siento, cada día escribo peor. Necesito volver al cole como los críos. Sorry.
BBB, bienvenida de vuelta. Lo que comentas sobre Rotherman y este caso también me pasó a mi por la cabeza mientras escribía.
Lo que dices de los grupos de machirulos bravuconeando cuando creen que está solos (o no) es rigurosamente cierto. Pero también lo es que la situación inversa (mujeres hablando de tíos como si fueran carne) también se da muy a menudo, y hay quién ve eso cómo una muestra de emancipación.
La metedura de pata diferida ,creo yo, es porque era sólo pasar una noche, con una mujer.
Si el hombre micrófono, hubiera dicho: «Qué bueno sería pasarme toda la vida con una dreamcheer» seguro que le hubieran aplaudido, Rouco hubiera celebrado la misa, y todo lo demás.
Estaría la periodista digital, en contra también de : toda una vida??
No sé, la verdad trabajar en lo que trabajaba, igual mejor hasta cambiar,¿ no? como el baloncesto por estos andurriales…
De acuerdo contigo. Estamos llegando a un punto en lo que no se va a poder contar ni un chiste porque seguro que hay alguien que se siente ofendido…es lo que tienen los chistes. Respecto a lo del speaker pues flaco favor le ha hecho la periodista? al movimiento feminista porque puestos a denunciar porque no denuncia a las propia cheerladers, ejemplo claro de la mujer florero (ojo, eso no lo digo yo ). Que hacer de un comentario sin ninguna connotación machista un ejemplo de modelo a seguir pues que quieres que te diga. Porque se puede pasar una coche con una cheerlader tomando unos potes, bailando, cenando e incluso hablando pero nuestra querida periodista denunciante se imaginó la peor versión del comentario . De la directora de Emakunde que decir, aconseja que denuncie por los comentarios vejatorios recibidos , lógico, pero se olvida que en los Alardes mujeres que desfilan reciben las mismas vejaciones o peores sin que yo vea muy implicada a la susodicha directora ¿…?. Recalcar que la concejala de igualdad del consistorio bilbaino declaró recientemente que había que acabar con los piropos hacia las mujeres en la calle, no nos estamos volviendo un poco locos…o locas ?
primero, no debería haber animadoras ni animadores bailando para animar al personal en deporte, ni el negocio!
segundo, la música y video clips ultimamente son muy sexistas a más no poder, pitbull etc… es repugnante que para vender una canción tengan que salir chicas exhibiendo su cuerpo y a su lado el machito.. o las letras de regetones y demás música basura como es el caso!
tercero, pero el comentario del speaker fue muy INAPROPIADO y de mal gusto! fue un error como él mismo ha reconocido, y no es lo mismo que lo diga el speaker trabajando, que si estuviera en la grada con sus amigos!
Que porque bailen con poca ropa no da derecho a decirles de todo como mucha gente piensa! es su trabajo y eso no va en su sueldo!
como el ciclista ese que le tocó el culo a la azafata, maldita la gracia! pues much@s piensan que sí, que como está alli «luciendo palmito» y entregando premios con su sonrisa, hay barra libre!
por cierto, que el ciclismo también debería desterrar las azafatas dando premios como reclamo publicitario!
Que ahora con las redes sociales se agranda más, es cierto y el señor speaker ha sido valiente y ha explicado su versión en onda vasca, ha reconocido su error y pidio disculpas a la animadora, eso le honra!! Pero las barbaridades que se están diciendo sobre la periodista bloguera que lo contó es repugnante! desde feminazi a orco etc… y luego esa gente no se considera machista!