Efectivamente, Rajoy puede ser todas las cosas que parece que es y algunas más, pero hay una que se le atribuye gratuitamente. No es el único que impide encontrar una salida a la cuestión catalana. Ni de lejos. Es más, ojalá lo fuera, porque la solución sería extremadamente simple. Pasando por alto la evidencia histórica de que este asunto viene incluso de antes del nacimiento de los bisabuelos del actual inquilino de Moncloa, carece de todo rigor darle la exclusiva del encabritamiento creciente de la ciudadanía en Catalunya. Puede ser verdad que sus actuaciones —o, según los casos, su falta de ellas— sean la materia prima para fabricar independentistas en serie y a tutiplén. Sin embargo, eso no ocurre porque Rajoy sea Rajoy, sino porque es el presidente del gobierno español. Cualquier otro ser humano de su partido o, incluso de uno de los históricamente mayoritarios haría prácticamente lo mismo. No es una conjetura. De nuevo, es un hecho documentado.
Conclusión: dejémonos de timos de la estampita y autoengaños. Basta ya de concederle aura de estadista al fulano, basta de usarlo como comodín y excusa. No puede colar lo de “Primero quitemos a Rajoy, y luego se verá”. Llevamos las suficientes caídas del guindo como para haber aprendido que hay que pedir la pasta por delante. En este caso, la lista de propuestas concretas para satisfacer lo que parece la demanda mayoritaria de la sociedad catalana. Recalco que han de ser precisas. Ya pasó el tiempo de los peines evanescentes del tipo “Nos sentamos y hablamos”. Se debe señalar qué, cuándo y cómo.
Ya… Obviamente, es más fácil echarle la culpa a Rajoy.
Hombre, está claro que Mariano y sus huestes no hubieran conseguido mucho más que encrispar la situación si no hubiera sido por la ejemplar aportación de prohombres de la talla de por ej, Alfonso Guerra cuando soltó ufanamente aquello de «nos hemos cepillado el estatut» y otra aportaciones de la singular progresia española.
Podria decirse aquello tán castizo de que entre todos la mataron y ella sola se murió.
Ni siquiera estoy totalmente convencida de que toda la culpa la tenga exclusivamente el bloque hispanistaní.
Hablo de culpas por que creo que cuando la amenaza de que pinten bastos es real, tal vez la parte más necesitada de apoyos por ser más frágil ( en este caso, CAT) hubiera podido jugar otras cartas además de enarbolar exclusivamente el estandarte de su legitimidad y de las adhesiones que han conseguido, entre ellas la de esta modesta tecleadora.
A mi me han seducido, desde luego, el pueblo catalán en concreto, quizas un poco menos algunos de sus representantes.
Pero es que desconocer cómo se las gastan los diferntes poderes fácticos de España es pecar de ingenuo, y confiar a su vez en los apoyos incondicionales de esa entelquia casi descabezada de verdadero liderazgo que es ahora mismo Europa, pues también.
Alguien vio la mini entrevista que le hizo K Landa el pasado viernes a Arcadi Espada donde el estirado fundador (creo) de Cuñadans vino a decir que la letra con sangre entra?.
Dónde están las protestas airadas y el desafio a la brutalidad de la divina intelectualidad española que hace solo unos dias firmó un manifiesto contra la celebracion del referendum del dia 1?.
Puede que esté equivocada, pero no he leido absolutamente ninguna protesta, queja o simplemente nota de horor por la brutalidad policial del pasado domingo.
O es que esperan que los miles de tuiteros y foteros improvisados que registraron las agresiones hablaron por ellos?
Pues, jaunandreok, si «esto» es lo que hacen con una nación tan cohesionada, civilizada y segura de si misma como la catalana, qué podriamos esperar los vascos que somos una tercera parte y cada uno va a su bola?
Después de 42 años de muerto el dictador, 39 de constitución atada y bien atada, 40 de reforma política, hoy llamada transición, del movimiento inmóvil , y 0 años de real reforma administrativa-policial-judicial, ya somos mayorcitos para darnos cuenta de que el llamado régimen del 78 consistió en presentar con un envoltorio de formalidad democrática y celofán constitucional el mismo paquete del botín conseguido en el año 39: una estructura socio económica reducida a cuatro empresas oligopolísticas que mandan a unos políticos que se lucran como ganado bien alimentado, a cambio de mantener unido y engañado el corral de ganado menor. Rajoy no es un gestor, no organiza, ni gestiona. Obedece. Como obedeció el de Otan de entrada no pero sí, y que condecoró al bombardeador de Otxandio, o el otro de las Azores que estaba siempre trabajando en ello, o el que corrigió corriendo el articulo 135 de la norma máxima para que los acreedores del corralito no vieran peligrar su inversiones… Efectivamente Javier, no debemos llevarnos a engaño. A Rajoy le ha tocado ésta, pero otro capataz (por ejemplo el que reconoció que el Ibex 35 no le dejaba coaligarse con Podemos) protegería igual a sus borregos. Y el continuador del régimen, se ha comportado como lo que es: La cabeza visible del Estado, de ese estado que nos legaron al mando de un Rey caza-elefantes a sueldo de los del Golfo Pérsico y que quería ser pijo y al que, por lo que se ve, le ha salido el hijo menos pijo, pero de extrema derecha.