Por más que ensayo ante el espejo, no me sale la cara de solemnidad que, según el manual, requiere el momento. Llego a algo parecido a una jeta de sota, pero enseguida me viene este o aquel tic, y derroto por la risa floja, el rictus de úlcera duodenal, la pedorreta, la lágrima amarga pensando en los que no están o, para qué engañarles, el gesto de la más absoluta de las indiferencias. Todo mezclado, claro, con la sensación de estupor y despiporre infinitos al asistir a la chapuza ceremonial. He perdido la cuenta de los comunicados, cartas, mensajes, proclamas y/o partes para anunciar el sanseacabó a los diferentes públicos. Y nosotros, los cuentacosas, que somos unos benditos y nos va la marcha (bueno, y que necesitamos rellenar nuestros blablás), venga dar pábulo a cada una de las chapas, como si fueran algo más que los esfuerzos postreros de la decrépita prima donna por llamar la atención.
A ver si es verdad —empiezo a dudarlo— que el festejo aguachirlado de Kanbo es el definitivo. Qué papelón, siento escribirlo aunque me consta que los aludidos son conscientes de ello, el de los que van por el qué dirán o porque a estas alturas qué más da. Ojalá sea, copiando mal a Neruda, el último sofoco que ETA les causa, y esta, la última Fanta que les pagan a los entusiastas de la bicha y a los profesionales de la conflictología parda.
Y sí, estoy seguro de que serán muy bonitos los discursos apelando al empuje de la sociedad y a no sé qué futuro que se abre. Como si no tuviéramos la certidumbre de que esto no ha sido más que una liquidación por cese de negocio. Tardía, además. Dicen que se van. Pues agur.
A ver, yo lo de los irlandeses y Powel…pase…por aquello del conflicto irlandés y tal…pero la presencia de Michel Camdessus da una idea exacta de lo que ha sido esto.
Me imagino la secuencia de cómo se eligió este nombre entre eta y Currin.
«Oye, Bryan, entonces a quién tenemos para hacer bulto y dar toque internacional»
«Pues está jodida la cosa…porque he llamado a un montón y me ponen excusas…vamos…que no vienen. Y otros que podían resultar…se van de precio».
«¿Ni uno?»
«Hombre, siempre está Michel Camdessus, que por salir en la foto se apunta a un bombardeo. Y por el viaje y la cena»
«Hostia; internacional y extranjero sí que suena. Pero…¿ese quién es?»
«Fue director del FMI»
«Ah, no, pasamos de jefes de cuerpos policiales»
«FBI no! joder. Fondo Monetario Internacional»
«Ah! bueno. Lo que pasa es que…tampoco me convence mucho. En el manual del buen militante se recoge claramente que el FMI es una herramienta al servicio del capitalismo y el imperialismo. Unas marionetas para fometntar guerras, mantener en la pobreza a los pueblos, expoliar sus recursos, esclavizarles con la deuda…la de Dios, lo peor»
«Ya…pero entonces tampoco nos vale Powell; capitalismo, OTAn, foto de las Azores….y si seguimos así le digo a Willy Toledo, que no para de llamar y vendría gratis y hasta leería la declaración»
«Bueno, vale, si no hay otra cosa…»
«Os quejareis…todavía»
Hacen cola por ser entrevistados por Evole, por el exquisito trato que les dispensa.