La curva no es una curva. Pasará tiempo hasta que podamos llamarla así. De momento, sigue siendo casi un muro vertical que avanza imparable de día en día. Las comparaciones son escalofriantes. En el estado español ya se ha se ha superado el mismo número de casos que tenía Italia en el mismo día de la crisis. La cuestión es que no podremos decir que no fue porque no nos lo advirtieron. Y hago precio de amigo con esa primera persona del plural. Me aterra, me descompone, me encabrona enormemente pensar que los que ahora lideran los linchamientos a los memos irresponsables que se saltan de uno en uno el estado de alarma son los que hace dos semanas despreciaban las conminaciones urgentes a tomar medidas desde los lugares donde el virus ya hacía estragos. ¿De qué se quejan, qué denuncian hoy esta patulea de ventajistas?
Estoy de acuerdo. Seguro que esta no es la actitud en un momento como el presente, pero intuyo que tampoco lo es exhibir impúdicamente unos principios cambiantes y de conveniencia. Especialmente, cuando sabemos, y ya no solo de oídas sino por cercanía, que hay personas que se van quedando en el camino. Por no hablar de las heroínas y los héroes que siguen luchando hasta la extenuación y más allá por combatir la cruel pandemia. Qué balsámico sería, por lo menos, pedirles perdón.
Un detalle a tecordar ahora.
La fabula del pastorcillo y el lobo. Hemos pasado tantas alarmas y avisos múltiples colores que cuando el lobo era realmente serio, perdimos el tiempo con la puerta abierta.
La magnitud de esto ha pillado a todo el mundo con el pie cambiado. Era inimaginable. En Febrero veíamos a los chinos construir hospitales en 24 horas y hacíamos gracietas.
El 6 o 7 de marzo ni siquiera alcanzábamos a medio prever cómo ibamos a estar en 6 días y… lo que queda.
Yo por eso…critico lo que haya que criticar a las autoridades, sin distinciones, pero…sin saña. Esto era inabarcable y la reacción puede que haya sido mejorable pero no mucho más. Ahora sí cabe exigir más.
Sí comparto que quienes hace 15 días llenaban sus perfiles de redes sociales de publicaciones llamando directamente borregos y títeres a quienes se mostraban asustados por el virus y nos decían que el poder nos manipulaba con el miedo y los medios a sus servicios hoy son los más virulentos que suben videos del runner interceptado por la policía e insultan a los que se están más tiempo del preciso paseando al perro. Actitudes muy censurables pero…que parten de la misma pose descreida, outsider, y sobrada que ellos, quizás nosotros, adoptaban antes.
Hay muchos mensajes bienitencionados que dicen que esto nos va a hacer mejores. Y aplausos y performances en los balcones, algunos gestos y actitudes solidarias muy elogiables y por supuesto mucha gente dándolo todo en servicios esenciales.
Pero..al margen de eso…soy muy pesimista. Creo que la ruindad, el egoismo y la mezquindad ganan por goleada y la goleada va ser de escándalo cuando superada la emergencia sanitaria y llorados los muertos…afrontemos la económica.
Ahí se va a ir a cara de perro.
En el ámbito profesional ya a día de hoy hay cientos de miles de emails…faxes…burofaxes y comunicaciones de un lado a otro que encabezados con un protocolario deseo de que «usted y sus allegados se encuentren bien» van a lo suyo a cuchillo…a cancelar pagos (hay devoluciones de recibos de enero y febrero a manta) o a exigirlos, a suspender contratos y servicios, a despedir trabajadores y en la mayoria se adivina la mano de abogados midiendo cada palabra para pillar o evitar ser pillados en renuncio a futuro. Cada email…cada llamada…cada consulta es sospechosa y se busca una trampa con una segunda intención.
Pedir perdón debe servir de algo, debo pensar, pero ahora mismo no quiero pensar eso, mucho menos leyendo tus argumentos irrebatibles…
Un fuerte abrazo, admirado amigo.
Egunon:
Me imagino que en esa recua incluirás aquí a Boris Johnson.
Terorífica la situación que se está encontrado el ejército español en las residencias de ancianos de la Comunidad de Madrid.
Han descubierto cadáveres abandonados en las camas de las residencias.
El partido que saqueó España mira para otro lado o se ríe directamente del sufrimiento de sus gentes, del que son plenamente responsables.
¿Eso era una monarquía parlamentaria y moderna, ejemplo para la comunidad mundial?
Y una mierda, sinvergúenzas.