El equipo de Berizzo estuvo valiente, le jugó de tú a tú a los culés y rascó un punto en el Camp Nou catorce años después. Un punto de cine que sabe a gloria.

Al Barcelona de Valverde le valió con una gran primera parte para derrotar a un blando Athletic que si no llega a ser por los palos y las paradas de Kepa hubiese encajado una goleada de escándalo. En la segunda parte los culés bajaron el acelerador con total pasotismo y el Athletic intentó inquietar al líder de la Liga pero no pudo.
Quedan diez jornadas de Liga y el discurso de Ziganda, tras ser eliminados de La Copa ante el Formentera de 2ªB, vapuleados en la Europa League por un Olympique de Marsella infinitamente superior y deambulando sin punch por la Liga, hace aguas por todos lados. El calvario continúa y para más INRI jugamos contra el todopoderoso Barça de Valverde que pensará «quién te ha visto y quien te ve Athletic».
En la primera parte el Athletic jugó como nunca…pero al final perdió como siempre. La falta de puntería y un errático Iraizoz pusieron en bandeja la enésima derrota de los leones en el Camp Nou. Messi nos volvió a marcar otro gol, en definitica un dejávu, lo de siempre. Como en el diálogo de la peli «El día de la marmota» de Bill Murray: «¿Quieres vomitar aquí o en el auto?-Creo que en ambos». Pues eso.
Un golazo genial de falta del Messías a falta de doce minutos para el final cuando el Athletic soñaba con el Cielo de la prórroga y pasar la eliminatoria mandó a los leones al Infierno del apeadero copero. Solo el Messías pudo con los leones. Aupa Athletic!