Miércoles 30 de noviembre de 2011
Reunión de Diputados y Senadores – Zafarrancho de combate parlamentario – Ya ni articulan España – El busto de Azaña en el Congreso – Mi hermano en Laos – La interesante reflexión de Txema Montero
Pensábamos ir Cazalis y yo a Madrid el jueves, pero nos han cambiado el plan. Tendremos mañana jueves en Sabin Etxea reunión de los cinco diputados con los cinco senadores. Iremos a Madrid el viernes. No piso la Villa y Corte desde el desayuno en el Ritz de Urkullu al inicio de noviembre y el Senado desde el 21 de septiembre. Fue durante el último pleno de la novena legislatura. Día de pleno escoba con intervenciones, despedidas, cajas en los pasillos. Disolver unas Cortes Generales es toda una revolución. Se pone la casa patas arriba por los arreglos a hacer, la pintura que pintar, el vaciamiento de los despachos, y en este ambiente se interrumpe la actividad parlamentaria tres meses, y políticamente se crean problemas humanos con aquellos o que no son elegidos por su partido o por el ciudadano. Y la casa queda en silencio con los funcionarios que son la estructura y nosotros la coyuntura. Ahora, de nuevo, todo está en zafarrancho de combate. Las acreditaciones, las fotografías, las presentaciones, el conocer los pasillos, el esperar al pleno de elección de las Mesas el 13 de diciembre con una semana rara de puentes. Martes 6, día de la Constitución y jueves 8, la Inmaculada, fiesta de Euzko Gaztedi. En los días hábiles, que quedan pocos, 350 diputados y 270 senadores tienen que pasar por el aro de la burocracia. Todos. Hasta Rajoy.
Oigo hoy por la mañana que a la dirigente saharaui Aminatu Haidar el gobierno vasco le entrega el premio Rene Cassin, este bayonés redactor, entre otras cosas de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre. Y me parece bien. No me parece tan bien lo que ha hecho el gobierno del PSOE estos ocho últimos años. Y son el mismo partido. El que nos dice que articula España. Y es que le vimos a la ministra Trinidad Jiménez con su pegatina polisaria, en tiempos de oposición pero en tiempos de gobierno, le vimos en la actitud contraria, es decir con una indigna obsequiosidad hacia la política marroquí. Ahora volverá a cambiar. Este tipo de políticos/as son los prescindibles.
Otro partido que dice que vertebra España es el PP. Pero le acabamos de escuchar al presidente de la Rioja, Pedro Sanz, una chulería más sobre los pacientes vascos de su muga. Y el PP gobierna en Araba y hay que recordar que Alonso y Oyarzabal fueron a Logroño en campaña a consolar, abrazar y justificar al alcalde de Oyon en una huelga de hambre de menos de 24 horas. Como ya no estamos en campaña, el partido que vertebra España, no dice nada.
Me llaman de Amnistía Internacional. Me suscribo con una pequeña cantidad mensual. Es la quinta plataforma humanitaria que cotizo. Y al final de año hacen un montoncito. Pero esta Amnistía vale la pena. Están en campaña de socios.
Con gran pereza comienzo a buscar direcciones, sobres y tarjetas de Navidad. Cada vez se utiliza más el ordenador pero una tarjeta siempre es una tarjeta. Son las fechas. Por ejemplo. Le mando una al gudari Moreno. Con sus 93 años sigue disparando balas de letras defendiendo sus posiciones. ¿Cómo no le voy a felicitar las fiestas y desearle siga así?. Y mientras esta generación, en rampa de extinción, sigue defendiendo sus valores, ahí está Bono poniendo un busto de Azaña en el Congreso regalo de Izquierda Socialista. El busto no me parece muy logrado. Parece Gorbachov. ¿Y por qué no coloca los bustos de todos los presidentes empezando por Alcalá Zamora, al que la derecha no podía ni ver, terminando con el último Don José Maldonado, al que nadie le hizo el menor caso?. ¿Y por qué no quita los cuadros de los presidentes franquistas Bilbao, Iturmendi, Rodríguez de Valcárcel?. Para colmo Bono se ponía campanudo contra Carmen Chacón a cuenta del PSC y del PSOE y decía que «un socialista moderado, debe ser el líder del PSOE» pero un socialista sin ningún complejo territorial, de edad, ni de clase, y al que no le de vergüenza gritar !Viva España!». Le replicó Egiguren que además de eso debería gritar Gora Euzkadi y Visca Catalunya. La cosa pues es cuestión de gritos. Esta Mesa del Congreso, la que se va, no se ha atrevido a nada. Como no se ha atrevido Ramón Jauregui para sacar a Franco del Valle de los Caídos. Ahora hablan de lograr un consenso. ¡Como si Franco, un asesino cruel, hubiera sido hombre de consensos!.No me extraña que hayan perdido las elecciones con tanto pasteleo.
Tengo un hermano médico en Donostia-San Sebastian y en Hernani. Una vez al año con su amigo Eduardo Jiménez, otro médico tan chalado como él en esto de los viajes raros, se van a un sitio del planeta que cuanto más inhóspito, mejor se lo pasan. Cada cierto tiempo se reportan. Nos acaba de mandar este mensaje:
“Laos es durito. No hemos hecho nada de lo que teníamos planificado por las dificultades de movilidad, no hay carreteras o están en un estado lamentable, pero hemos encontrado alternativas.
El medio de comunicación es el agua pero el barquito que queríamos no era todos los días por lo que hemos cambiado plan.
Fuimos al norte y pillamos un guía para meternos en la selva.
Ha sido como de peli.
Aproximación en canoa de las que si te descuidas vas al agua, bordes sobre el agua y manteniendo el equilibrio.
Navegamos río arriba y tras el culoroto a patear maleza.
El guía llevaba un plano en la mano y evidentemente nos perdimos.
Pidió ayuda en la aldea y unos nativos descalzos que nos miraban raros (no hablaron nada en todo el camino) nos metieron 6 horas de caminata, deskjonaos, hasta llegar a una aldea.
Imaginaos sin luz ni agua, chozas, palafitos, pero buena gente que nos acogieron en sus casas, hablando con señas y a través del guía.
Duermes con ellos (salón corrido) pero pusimos mosquitera y llevábamos sacos de seda.
Cena de arroz con la mano, pastilla para la malaria y a las 6 15, ya oscuro a la cama, para las 5 en planta.
Y así tres días.
Paisaje genial, cascadas, ríos, montañas, tribus, aldeas.
Hoy hemos cogido un bus con gallinas y hemos tardado 12 horas en hacer 300 kms.
Carretera (eufemismo) sin asfaltar con socavones sacaempastes.
La ciudad más grande tras la capital, tiene 25.000 habitantes”.
Y finalmente reproduzco parte del final del trabajo de Txema Montero aparecido en Deia este martes. Lo que dice es relevante. Txema es hombre que reflexiona con acierto. Decía así:
“Si de poder institucional se trata, el PNV no puede eludir su encrucijada: o una puja por elevación ideológica con la izquierda abertzale, para ver quién es más abertzale, o una manera diferente de hacer Nación vasca. Lo primero sería fácil, se trataría de una constante reivindicación nacionalista contra España con el resultado previsible de ser cada vez más los mismos, quiero decir más abertzales los mismos ciudadanos. Hacer la Nación vasca es mucho más difícil. Primero, porque el hacer implica actuación, propuestas, gestión y resolución, no simple retórica. Segundo, porque, en una sociedad democrática como la vasca, la aceptación por una mayoría de los objetivos y fines propuestos es condición necesaria para el éxito. Se trataría de ser cada vez más ciudadanos nacionales. Es ahí donde veo al PNV, un partido que nació para construir políticamente la Nación vasca y precisamente por eso, de ser afiliado, habría votado por el nombre Nacional para denominar a un partido que debe dirigir su actuación a buscar los comunes denominadores de sociedad vasca, proponer modelos y valores generalmente aceptados y llevar a la práctica políticas basadas en la experiencia”.