O Felipe o Aznar. Tú eliges.

En 1996 este fue el lema que sacaron en campaña los socialistas catalanes en las elecciones de  marzo de 1996. Y no les fue mal ya  que  acortaron distancias. De diez puntos a la “dulce derrota”. Pero éste slogan encerraba una cuestión envenenada que esbozada además  por los socialistas de una  Comunidad Histórica no dejaba de tener su miga. Se trataba, de polarizar hasta el  paroxismo la campaña. González era el progresismo. Aznar la carcundia. Y desde el punto de vista español no estaba nada mal. Desde  el punto de vista de un estado autonómico esa polarización era matar el espíritu, el fondo y la forma de una contienda que no elige presidentes sino parlamentarios, de no ser que haya que cargarse al rey y eso sería otra cosa. Elecciones pues con  trampa. Como lo son ahora.

Este sábado tenía interés en conocer como informaba ETB del 75 aniversario de la aprobación en el Congreso en Madrid del primer estatuto vasco de la historia. Todo un hito y una fecha redonda. Pues bien, no dijeron nada.

La primera  noticia fue darle  mucho bombo a la desaparición de EKIN que no deja de  ser noticia pero no para abrir un informativo. Y claro, sobre este  asunto comentó lo suyo Patxi López, pero también José Blanco. Dos socialistas por el precio de uno. Al PP lo representó Damborenea con cara de hombre con úlcera gástrica y tras él Garitano, que está muy contento. Nadie del PNV, el partido mayoritario. Y digo de antemano que esta noticia debería haber sido la sexta y dicha sin más. Pero hay intención de meternos a todas horas una  campaña encubierta de Bildu y de los éxitos del PSOE.

Seguí viendo el informativo y tras la  noticia sobre EKIN nos informaron ampliamente sobre el Congreso del PSOE en Madrid y de un acto, del PP, en España. Después las andanzas del «madracismo” un Narciso político apellidado Madrazo que nos dijo se iba para siempre pero amenaza volver y darnos la taba a todas horas. Después llegó la movida del intento de resucitar Udalbiltza frente a Eudel y los Municipios euskaldunes. Finalmente el premio Mario Onaindia a una de estas comentaristas que están por encima del bien y del mal como Arantza  Urretabizkaia. Esto fue la parte política de un informativo sabatino. No se herniaron. Siguieron consignas pero de trabajo de ambientación histórica, nada de nada. El uno de octubre de 1936 no se aprobó en Madrid el estatuto vasco. ¿Por qué?. Seguramente porque el discurso del día lo  pronunció un joven de 32 años llamado José Antonio  de Aguirre. Pero aquí como en 1996 no hay más  que   Rubalcaba o Rajoy. O Felipe o José Mari. Todo un fraude.

¡Paren este carro, que me quiero bajar!.

La campaña es una historia de gatos y ratones

Hubo un Nuncio del Vaticano en Madrid, el cardenal Agostino Casaroli, que decía, que  en un discurso no se pueden incluir más de tres mensajes, porque  el auditorio no es  capaz de captar más. «Fíjense ustedes, decía, incluso nosotros los  diez mandamientos los   tuvimos que resumir en dos (Servir y amar a Dios por sobre   todas  las cosas  y al  prójimo  como a tí mismo), porque diez mandamientos  eran demasiados  para  recordar”.

Me ha  venido este recuerdo de Casaroli  cuando veo un inicio de  campaña electoral tan polarizada  y excluyente y ante ellos tenemos una necesidad perentoria de  hacer llegar al elector, de forma muy sencilla, lo que es  nuestra opción. Y para ello, aún a  riesgo de rozar el  mundo  animal y sabiendo  lo  peligroso que  es compararlo con los humanos, lo voy a  hacer.

Bien es verdad que  Walt Disney humanizó animales en figuras como Pluto, Mickey Mouse, el  Pato Donald, Rico Mc Pato y  que sigue existiendo  el ratoncito Pérez, el pato Lucas, Tom  y Jerry, el  gato Félix, Piolín  así como a veces se habla de tal  personaje como  animal  político, o como  animal televisivo sin connotaciones peyorativas. Pero ojo con llamarle a alguien  víbora, rata, perro o culebra. Por eso cuento  una bonita historia que ejemplifica  bien  las  cosas  hablando  de  gatos y ratones.

Sucedió en un mitin de  Tomas  C. Douglas (1904-1985), que  era un orador muy claro  y fogoso y que  resumió con un ejemplo muy plástico sobre lo que se  trataba. Dijo  así:

¿Por qué votas lo que votas?

“Es la historia de un lugar llamado Mouseland . Mouseland era un lugar donde los ratoncitos vivían y jugaban donde nacían y morían, y vivían de la misma manera que tú y yo lo hacemos. Incluso tenían un Parlamento y cada cuatro años tenían una elección. Caminaban rumbo a las urnas y votaban. Algunos incluso tenían una confusión con las casillas, una confusión que les pasaba cada cuatro años, para ser verdad. Tal como tú y yo. Y cada día de elecciones todos los ratoncitos acostumbraban ir a las urnas y elegían unos representantes de los que salía un gobierno.  Un gobierno formado por enormes y gordos gatos negros. Ahora, si piensas que es extraño que ratones elijan un gobierno de gatos, solo mira la historia de Canadá por los últimos 90 años y entonces verás que ellos no son más estúpidos que nosotros. No estoy diciendo nada en contra de los gatos. Ellos eran buenos compañeros y conducían su gobierno con dignidad. Aprobaban buenas leyes, es decir: leyes que eran buenas para los gatos. Pero estas leyes que eran buenas para los gatos no eran muy buenas para los ratones. Una de las leyes decía que la entrada a la ratonera tenía que ser tan suficientemente grande como para que un gato pudiera meter su pata en ella. Otra ley decía que los ratones solo podían moverse a ciertas velocidades para que el gato consiguiera el desayuno sin mucho esfuerzo físico. Todas estas leyes eran buenas leyes para los gatos pero eran muy duras para los ratones y cuando los ratones lo tuvieron más y más difícil,  y cuando los ratones no pudieron aguantar nada más, decidieron que había que hacer algo al respecto. Entonces, fueron en masa a las urnas y votaron contra los gatos negros  y eligieron gatos blancos. Los gatos blancos habían hecho una genial campaña. Dijeron: “todo lo que necesita Mouseland es más visión”. Habían dicho: “el problema con Mouseland son las entradas redondas a las ratoneras”. “Si ustedes nos eligen estableceremos entradas cuadradas” y lo hicieron. Y las entradas cuadradas fueron el doble de las redondas. Y de esta forma el gato podría meter sus dos patas y la vida era más dura que nunca para los ratoncitos y cuando no pudieron soportarlo más… votaron contra los gatos blancos y pusieron a los negros de nuevo. Para luego regresar a los gatos blancos y de ahí otra vez a los negros. Incluso trataron con gatos mitad blancos-mitad negros. Y lo llamaron: COALICIÓN. Incluso intentaron un gobierno hecho de gatos con manchas. Eran gatos que intentaban aparecer como ratones pero que comían como gatos. Verán, mis amigos, el problema no estaba en el color de los gatos. El problema estaba en que eran GATOS. Y porque eran gatos, ellos naturalmente velaban por los intereses de los gatos y no de los ratones. Finalmente, llegó desde lejos un ratoncito que tuvo una idea. Mis amigos, estén atentos al humilde compañero con una idea. Él les dijo a los otros ratones: “miren compañeros… ¿Porqué seguimos eligiendo un parlamento hecho por gatos?”. ¿Porqué no elegimos un parlamento hecho por ratones?. “OHH”, dijeron, “está pidiendo el derecho a decidir”. Así que lo metieron en la cárcel. Pero quiero recordarles que pueden encerrar un ratón o un hombre pero no pueden encerrar una idea”.

Hasta aquí lo  dicho por Douglas. Volvamos  a  casa. Está claro quiénes son aquí los dos  gatos gordos  y agresivos. Lo son el  PSOE y el PP. Es más, una vez  viajó a China Felipe  González siendo  presidente del gobierno y volvió encantado  de una frase que le  había dicho  Den Xiao Ping: «No importa si el gato  es   blanco o si el gato es  negro. Lo que importa es  que cace ratones». Más gráfico fue el  escritor catalán Josep Pla cuando  afirmó que “lo  más  parecido a un  español  de derechas es  un español de izquierdas». Los dos son  los gatos de  esta película del 20N. Y nosotros  somos  los ratones que nos tenemos que dar cuenta  que votar a uno cualquiera de los dos gatos  es poco   rentable para Euzkadi. Que nosotros tenemos que votar a  los ratoncitos del PNV.

Y vuelvo a recordar que el  20-N no hay  que  optar o por Rubalcaba o por Rajoy. Este no  es  un  régimen  presidencialista. Hay  que votar para  elegir 350 diputados y 270 senadores (en listas  abiertas).Y ahí está la madre del cordero.

A su manera, el  escritor Francisco Umbral, resumía éste  bipartidismo español, que tanto les gusta de la siguiente forma: «EI bipartidismo no  es solo un vicio político peligroso, sino un sistema  que a España le va mucho, puesto que aquí solo hay dos clases de españoles: católicos y rojos. Con un partido católico y otro   rojo  ya  tenemos democracia. Lo demás son churriguerías y pecados de la  vanidad. O nidos de avutardas ideológicas  que quieren vivir del presupuesto y entre dos aguas».

Bueno pues a eso quieren llevarnos, a  votar a Papá o a votar a Mamá. Terceros fuera y ya están en ello TVE, Telecinco, A3, Cuatro, la  Sexta y ETB  que reproduce lo que dicen  los del PSOE en Madrid y lo que dicen aquí, lo mismo que el  PP. Toda una Brunete mediática  vendiendo  bipartidismo y machacando con  la   idea de que los demás no existimos  o nuestro voto no es útil.

Por ello vuelvo a las tres ideas del principio que decía Casaroli y que tenemos que  barajar los ratones vascos:

1.- Hace cuatro  años en Euzkadi ganó el PSOE. Pregunten a los diputados  y senadores socialistas que  han hecho en cuatro años por Euzkadi salvo chupar rueda en todas las votaciones de lo que les decían votaran en Madrid. Háganlo y comparen.

2.- Es mentira que hay que optar o por Rubalcaba o por Rajoy con ese culto a la personalidad del líder muy propio de países analfabetos, sin analizar para nada su programa y en que redunda para Euzkadi

3.- Analizando los resultados de las últimas elecciones municipales  y forales en Euzkadi y a las Comunidades Autónomas en España, el PP no obtendría mayoría absoluta. Y de eso  se trata, que no la tenga. Solo en éste campo de juego podemos meter goles en el  Bernabeu y meter goles a los gatos en  beneficio de los intereses de todos los vascos, de los que  votan  al PNV, a Bildu, al PSE, al PP,  a IU, y de los  abstencionistas y de  cualquiera que se presente. Desde 1917 somos lo Vasco en Madrid, no el Grupo del PNV, porque lo  nuestro allí es lo vasco y los intereses de  los   vascos. Por eso el PP no debería  sacar mayoría  absoluta, y por eso  el PNV debe tener un Grupo  en el Congreso y en el  Senado muy fuerte. Hemos demostrado en  esta legislatura, y lo demostraremos en  la que se abra en la  siguiente, que solo trabajamos para Euzkadi.

Por eso no hay  que votar a ninguno de  los dos gatos.

La inutilidad del llamado voto útil

Convocadas las elecciones para el 20 de noviembre si uno se asoma a los medios de comunicación de ámbito estatal podrá ver una manifiesta polarización entre los dos grandes partidos que según ellos «vertebran España». Lejos quedan las reflexiones de Esteban González Pons, portavoz del PP, pidiendo se convenza al PNV para lograr unas elecciones anticipadas. Ahora de lo que se trata es de polarizar el campo de juego eliminando no solo a los partidos nacionalistas y regionalistas sino a una IU que se presenta asimismo en todas las circunscripciones estatales. «Terceros fuera» podría ser la consigna del momento.

Y para ello se apela al voto útil. “No hay que desperdiciar ni un solo voto apostando por aquellas opciones que no tienen la menor posibilidad de gobernar” como si estuviéramos en un sistema presidencialista del tipo norteamericano y no en uno europeo donde no se elige un presidente sino 350 diputados y alrededor de 270 senadores (depende del censo). Y aquí cada voto es determinante. Y si no que se lo pregunten a Zapatero que sin el PNV no hubiera llegado hasta hoy.

Pero es que además semejante planteamiento en una sociedad tan plural y eligiendo parlamentarios en un estado plurinacional y plurilingüe es algo profundamente antidemocrático y, lo más grave, es que además se ayuda desde el Ente Público RTVE que omite cualquier noticia que pueda apuntar que además del PP y del PSOE existen otros partidos como por ejemplo el PNV que lleva en las Cortes Generales desde 1917, sin contar los años de la dictadura.

Es curioso que si antes los vascos éramos desgraciadamente noticia por acciones terroristas de ETA, ahora no lo seamos para casi nada a cuenta de que podemos ser el fiel de la balanza, la clave del abanico, el partido bisagra, que a fin de cuentas condiciona, una gobernabilidad de ámbito total. No. Ahora de lo que se trata es de una lucha de dos carneros. Rajoy-Rubalcaba.

Y a eso le llaman el voto útil cuando para un vasco no puede haber mayor utilidad que votar por una organización que trabaja de manera exclusiva para los que vivimos en un determinado territorio.

Ese es el verdadero voto útil. El del PNV.

Es preciso recordar que aquel año 1977 fue crucial. Tras la muerte del dictador había que montar el armazón democrático  y había que dar urgentemente pasos. EI primero, pasar por taquilla. Nosotros lo hicimos en  abril, pero el mundo de la IA se negó. Posteriormente hubo que presentarse a  las  elecciones. La IA en Txiberta nos dijo que no lo hiciéramos. Nosotros no solo decidimos participar sino que, en el hotel Maisonave de Pamplona, conjuntamente con el PSE (que incluía al socialismo navarro) y ESEI presentamos lo que se llamó el «Compromiso Autonómico». Se llamaba así porque fuera cual fuera el resultado la apuesta que íbamos a hacer los tres partidos era recuperar el estatuto del 36 y ponerlo nuevamente a funcionar.

EI 15 de junio de 1977, copamos los puestos en el Senado y en los cuatro territorios. Manuel Irujo, Ramón Rubial y Goyo Monreal lograron su acta. A la semana en Gernika, y bajo la presidencia de edad de Don Manuel, se reunió la Asamblea de Parlamentarios Vascos para hacer realidad lo acordado. De dicha Asamblea salió la Amnistía, el Consejo General Vasco y la redacción del Estatuto de Gernika. Los socialistas navarros trabajaron también en ello. Terminada la legislatura en l979, Urralburu y sus gentes dinamitaron el Comité Socialista de Euzkadi  y formaron su chiringo en Navarra. El tiempo demostró que lo hacían para robar mejor. Pero hay que decir que aquel acuerdo transversal del PNV, PSOE y ESEI para las elecciones del Senado en 1977 dio buenos frutos. Tenía un programa serio.

Nacida HB despreció siempre ir a Madrid a hacer política. El PNV era un traidor por hacerlo. Lo de ellos era apoyar la lucha armada y argumentar su decisión como lo hizo Karmelo Landa junto a Arnaldo Otegi, Olarra y Barrena en 1999, diciendo que «no tiene mucho sentido que la izquierda abertzale defienda la participación en unos comicios en los que se elige a los máximos representantes del marco político español. La coherencia nos exige cortar con las elecciones españolas. Cerramos el paso a la intromisión del Estado Español en el proceso democrático vasco».

Efectivamente sonaba muy bien. Pero 34 años después, «cumplen la  ley de partidos a rajatabla» y si hay que ir a Madrid, se deja la coherencia en  casa, se pone uno la hoja de parra del Imperativo Legal y proponemos ir todos de la mano a  las  Cortes para acumular fuerzas y plantar cara. Y de  autocrítica, nada. El votante, como el cliente, siempre tiene la razón.

A todo esto hay que decir que el PNV en estos 34 años siempre ha ido  solo a las elecciones salvo  hace cuatro años en el Senado en Navarra donde fuimos  con Nafarroa Bai y apoyando al candidato Koldo Martínez. De ahí que nos haya extrañado esta propuesta de  plataforma hecha pública sin más por parte de la IA, para formar candidaturas conjuntas  y con el único  programa de plantar cara. Se va  a Madrid y se debate en una Proposición de ley la Independencia de Euzkadi. El PP y el PSOE, como hicieron con el Lehendakari Ibarretxe, la tumban. La semana siguiente se discute sobre el  derecho de  Autodeterminación. El PP-PSOE, la tumban. La siguiente acudir a Naciones  Unidas. El PP-PSOE la  tumban. Y la cuarta semana, ¿que?. ¿Pedir como  ha hecho Izaguirre algo que hemos pedido ocho veces en estos treinta años como revertir para Donosti el Cuartel de Loyola y los terrenos de la  antigua Yeguada de Lore Toki?. ¿Es ese el programa?. Urkullu, marcó inmediatamente el campo de juego y Ortuzar lo ha definido con claridad: eso es enredar.

A las Cortes Generales hay que ir a trabajar, no a hacer testimonialismo vacíoi. De aquel trabajo en  tiempos de la República, nació el primer estatuto vasco. Del duro trabajo de estos años, se está logrando consolidar el segundo. Si, ya sé que  se me dirá que es un parche, que Navarra no está, que se queda corto, que nos coloca en el ámbito español. Ya lo sé. Pero ¿cuál es la alternativa?. ¿ETA, a la que Bildu ni Sortu le han invitado a desaparecer?. 

No se si ustedes recordarán aquel anuncio donde aparecía un señor vendiendo un detergente para lavar diciendo: «Busque, elija y compare y si encuentra, algo mejor, ¡cómprelo!». Algo así debería ser el acto de votar, algo por otra parte muy serio porque hay gente que vota sin pensárselo mucho, con las vísceras, contra esto y lo otro, porque me cae bien o me cae mal, porque son gente maja y cosas así sin percatarse que cada voto refuerza una idea que tratará de ser llevada a la práctica.

Respeto, a quienes en las últimas elecciones del 2008 votaron al PSOE y al PP. Los primeros nos ganaron por goleada. Cuatro años después sería bueno analizar cuantas preguntas, interpelaciones, mociones, proposiciones de ley y no de ley han presentado en el Congreso y en Senado. Cuantas negociaciones han hecho y que han conseguido en beneficio, no de una sigla, sino del conjunto de la sociedad vasca y, después de esto, analizar cuál es el verdadero voto útil para un vasco de buena voluntad. Solo podíamos pedir esto y como el vendedor de jabón, «si encuentra algo mejor, ¡vótelo!”. Le será difícil encontrar nada en el mercado electoral que haya hecho en cuatro años tanto trabajo práctico para Euzkadi en todas sus apuestas. En todas.

Tras una legislatura brillante para los intereses vascos gracias  al PNV que ha sabido aprovechar los resquicios que teníamos ante un Zapatero debilitado, el ciudadano vasco puede optar o por el testimonialismo y la marginalidad, o por el españolismo y la dilución en  aquel océano  o por  barrer para casa y reforzar Euzkadi. De ahí  nuestra reivindicación del voto  útil para una opción que sabe donde le aprieta el   zapato y lleva recuperando poder para los vascos  en cada legislatura.

Nosotros proponemos: Hacer nación día a día sin  olvidarnos quiénes somos y mucho menos, nuestras aspiraciones, pero con  los pies en el suelo, el corazón caliente, la mirada larga y la cabeza fría. Por eso somos el eje del país y lo seguiremos siendo.