El Pacto de Santoña setenta y cinco años después

Lunes 9 de abril de 2012

Cuando los batallones nacionalistas se retiraron hacia Santander, habían perdido ya su territorio y el objetivo de su lucha. En esta situación, el Ejército vasco rindió sus armas, para evitar un derramamiento de sangre inútil y que al mismo tiempo asolaría las tierras del norte.

Los orígenes del Ilamado pacto de Santoña se remontan a mayo del 37, cuando el cónsul italiano en San Sebastián, el Marqués de Cavaletti, se pone en contacto con Alberto Onaindia en San Juan de Luz, para pedir su intervención como mediador ante el presidente vasco, José A. Aguirre.

Esta entrevista fue una iniciativa personal del cónsul italiano. Italia tenía mala prensa en el mundo: su carácter de régimen totalitario, los contactos y pactos con la Alemania de Hitler y la intervención en Abisinia «afeaban» su imagen. En vista de ello, Cavaletti, consideró que un acto humanitario en el frente del norte, en favor de los vascos, que se hallaban en situación difícil y profundamente agraviados por la destrucción de Gernika, podría convertirse en un triunfo diplomático para la Italia fascista.

Primeras conversaciones con los italianos

En esta entrevista, Cavaletti propuso la mediación italiana para la pacificación de la guerra en los frentes del norte, redactando allí mismo una nota sin firma, a la que hizo acompañar de una tarjeta suya, dirigida al Lehendakari.

Las conversaciones con los italianos continuaron en las semanas siguientes. En este tiempo la situación se hizo cada vez más difícil para el ejército vasco. El 16 de junio, Juan Ajuriagerra, presidente del BBB se pone en contacto con los italianos, quienes se sorprendieron de que no fuera el presidente Aguirre, quien contestara, y de que Juan Ajuriagerra, en nombre del Partido Nacionalista Vasco, comenzara una nueva re­lación.

A partir de este momento se iniciaron una serie de entrevistas de forma directa entre ambos bandos. Así se preparó una entrevista el día 24 en Algorta, que no se llegó a celebrar debido a un error: al existir dos playas en dicha localidad, los vascos esperaban en una, mientras los italianos llegaban a la otra. Aclarada la confusión se intentó acordar otro encuentro el día 25 por la noche, teniendo lugar esta vez, la entrevista, a la que por parte vasca acudió Ajuriagerra con un secretario particular. A esta reunión siguieron otras, cada vez más complicadas.

Los barcos no llegaron

El Lehendakari Aguirre, el 2 de agosto, en una entrevista que tuvo lugar en París, encargó que se contrataran barcos con idea de evacuar una gran parte del Ejército vasco, 27.000 ó 28.000 hombres con la idea de trasladarlos por Francia hacia Catalunya, donde él abrigaba la idea de iniciar un ataque contra Navarra.

 Los barcos contratados eran 14, pero, inexplicablemente, sólo llegaron dos: «Seven Seas” Spray», y el «Bobby».

A petición de los nacionalistas, los italianos, lograron que del día 21 al 24 de agosto, el mar se encontrara libre, alejando del norte a las unidades navales franquistas, e informando a los vascos que podrían salir para Francia. El problema se planteó al no llegar las embarcaciones. Cuando los italianos se enteraron que los vascos no se hacían a la mar se sorprendieron y alarmaron, sin que pudieran comprender lo que ocurría.

Sin esperarlo, las autoridades italianas, se encontraron con varios miles de gudaris y milicianos que en principio no debían quedar en Santoña, lo que cambió por completo el panorama de la situación. Ajuriagerra y Lucio Artetxe, marcharon a negociar un nuevo plazo de salida con los italianos, que se enfrentaban con el grave problema de proteger a los gudaris. Pasados unos días, los italianos fueron obligados por los españoles a retirarse, quedando, el Ejército de Euzkadi, prisionero de las autoridades franquistas.

Condiciones de capitulación

Las condiciones de la capitulación sobre la que se mantuvieron interminables conversaciones, fueron en términos generales:

Por parte de las fuerzas vascas:

–          Deponer ordenadamente las armas, entregando el material a las fuerzas legionarias italianas, que ocuparían sin lucha la región de Santoña.

–          Conservar el orden público en la zona que ocuparan.

–          Asegurar la vida y libertad de los rehenes políticos de las cárceles de Laredo y Santoña.

Por parte italiana:

–          Garantizar la vida de todos los combatientes vascos. Tenerlos hasta la terminación de la guerra bajo su mando, sin entregarlos al general Franco.

–          Garantizar la vida y autorizar la salida al extranjero de todos los hombres políticos y funcionarios vascos existentes en los territorios de Santoña y Santander.

–          Considerar a los combatientes vascos, sometidos a esta capitulación, libres de toda obligación de participar en la guerra civil.

–          Garantizar que no sea perseguida la población leal al gobierno provisional de Euzkadi.

Todas estas condiciones, no fueron cumplidas, ya que el 26 de agosto de 1937, haciendo a un lado a los italianos, las tropas de Franco entraron en Santander y tomaron Santoña, y haciendo caso omiso de las peticiones de las huestes del Ducce, iniciaron una brutal represión contra los hombres que habían defendido con su vida la tierra de sus padres.

21 comentarios en «El Pacto de Santoña setenta y cinco años después»

  1. Hay que ser realistas, y el hecho es que el tal Eusko Gudarostea solo hizo retiradas, máxime la de la carretera de Irún hacia Francia. O sea, un salir pitando y cagando leches, sr. Anasagasti. Esa es la pura y única realidad.

  2. jejejejeje……ejercito vasco,jejejejejeje,traición a todos,eso fué Santoña¿Por qué no cuentas como salió pitando de Santander,Aguirre’,dejando colgado al que vino a buscarle?.

  3. traición en la única palabra que cabe ante estos hechos.Un hecho muy lamentable del breve ejercito vasco.

  4. Boyd, lo que dices es desconocimiento o mentira, lo que prefieras. Las tropas de franco tardaron un año en llegar a Bilbao desde sus posiciones cercanas en zona «nacional», cuando los gudaris tenían poco mas que chimberas para defenderse, así que algún tiro que otro ya pegaron, no nos vengáis ahora con el «cobarde, gallina», que no somos niños. Y es que a ver si va a resultar que esa fue la única rendición de un ejercito en la historia!! Como los norteamericanos se rindieron a los japoneses en Filipinas!! Se trata de elegir ser masacrados o salvar los muebles. La auto inmolación es muy romántica, pero bastante estúpida si no te queda ninguna oportunidad. Los gudaris luchaban solo por Euskadi, no por la república española, que tampoco les tuvo nunca demasiado cariño. Caída Euskadi, esa era la opción mas racional.
    Aunque tal vez insinúas que la lucha guay, la feten, era la de las milicias anarquistas y compañía, esas mismas que violaban monjas y tal, en un alarde de hombría. Venga, hombre.

  5. De verguenza el tratamiento de Deia a la noticia de la muerte por impacto de pelota de goma en la cabeza de Iñigo. ¿Porque tratan de silenciar a la opinion publica? ¿Porque han baneado cantidad de IP de ciudadanos vascos que trataban de aportar y mostrar su solidaridad con este desagradable hecho?. Iñigo gogoan zaitugu!!

  6. Huyendo como liebres, y dejando tirados al resto de fuerzas de la resistencia antifranquista; una traición en toda regla. ¿La tierra de sus padres?… Si Blas de Lezo, Bazán o los tercios de Vizcaya hubieran visto esa forma de actuar hubieran vomitado de vergüenza… En eso transformó a los vascos Sabino Arana y sus esbirros.

  7. Con qué desparpajo, Senador, airea como mérito y virtud lo que no pasa de mediocridad y escasa generosidad por parte de aquel PNV etnicista.

    Así que aquellos batallones del PNV que no habían bastado para contener a los rebelde y se vieron sobrepasados por ellos en todos los frentes,¿no tenían ningún deber ni legal, ni moral hacia la República de la que emanaban su Estatuto de autonomía?

    Es incrible la desfachatez con que son capaces de presentar, desde el PNV, los asuntos de la derrota militar en el frente norte sin el menor atisbo de autocrítica y, encima, tratando de sacar pecho.

    O sea que el «malo» de la película era el fascistote italiano y los leales y bondadosos peneuvistas de avinieron a hacerle un favor con lo del pacto, al tiempo que trataban de mandar a los muchachos de vuelta al caserío.

    Allá usted con sus fantasías sobre las bondades y los éxitos de aquel PNV. A mí me da grima aquel período y muchos de sus dirigentes me dan arcadas.

  8. Con qué desparpajo, Senador, airea como mérito y virtud lo que no pasa de mediocridad y escasa generosidad por parte de aquel PNV etnicista.

    Así que aquellos batallones del PNV que no habían bastado para contener a los rebelde y se vieron sobrepasados por ellos en todos los frentes,¿no tenían ningún deber ni legal, ni moral hacia la República de la que emanaban su Estatuto de autonomía?

    Es increíble la desfachatez con que son capaces de presentar, desde el PNV, los asuntos de la derrota militar en el frente norte sin el menor atisbo de autocrítica y, encima, tratando de sacar pecho.

    O sea que el “malo” de la película era el fascistote italiano y los leales y bondadosos peneuvistas de avinieron a hacerle un favor con lo del pacto, al tiempo que trataban de mandar a los muchachos de vuelta al caserío.

    Allá usted con sus fantasías sobre las bondades y los éxitos de aquel PNV. A mí me da grima aquel período y muchos de sus dirigentes me dan arcadas.

  9. Saludos,

    Boyd, no es lo mismo ser desbordado que huir, militarmente, esa es la pura y unica realidad. El ejercito vasco, de ejercito solo tuvo el nombre, por mucha fe y duro trabajo que se pusiese sobre el, objetivamente, no dejo de ser una gran muchedumbre, medianamente organizada y mal armada. Un ejercito, es aquello a lo que se enfrento esta muchedumbre, y literalmente los arrollo.

    Quedo demostrado en el avance sobre Miranda, estancado en Legutiano, que este embrion de ejercito, ni mucho menos llegaba a ser una masa de maniobra, ni un contigente capaz de lanzar ofensivas. De forma que el estado mayor, tomo la unica determinacion que se podia tomar con esos medios, «Resistir es vencer».

    De hay a exclamar que «huyenron» va un trecho, resistieron a pecho descubierto, esperando el fin de una guerra que desde su prespectiva terminaria en pocos meses, cuando todavia quedaban años. Y finalmente se vieron desbordados por un ejercito infinitamente superior en medios, conocimientos y efectivos. Hasta hay nada que no fuese esperable.

    Euskadi es un paisito, pagado de colinas y montañas, praticamente en la cima de cada colina y montaña, una pequeña trinchera, desde Albertia a Mello , desde Kalamua a Peña Amarilla. Esta gente no huyo, defendio cada una de sus colinas y montañas, un poquito de respeto a su sacrificio.

    Sobre el pacto de Santoña, recomendaria la lectura de un libro que el señor Anasagasti conoce perfectamente «El Pacto de Santoña» de Xoan Candano.

  10. Probablemente, en el origen de la extraordinaria fortuna de Atenas estuvo su pobreza. Los habitantes del Ática no hubieran podido elegir, como patria, un rinconcito de mundo más estéril, árido y sediento; de sus doscientas mil y pico de hectáreas, una buena mitad no es cultivable, ni siquiera ahora con la aplicación de la técnica moderna. La otra mitad exigía heroísmo y prodigios para exprimir los típicos frutos de las tierras pobres: vino, aceite e higos.

    Fuente: LA BATALLA DE LA DRACMA
    http://www.webhistoria.com.ar/articulos/100.html

    Y los atenienses hicieron, de la necesidad, virtud.

    No es el caso del País Vasco. quizás ello explique algunas cosas, incluida la nada virtuosa forma que tiene el PNV de presentar «los hechos de Santoña de 1937», por usar una terminología blanda.

    Con qué desparpajo, Senador, airea como mérito y virtud lo que no pasa de mediocridad y escasa generosidad por parte de aquel PNV etnicista.

    Así que aquellos batallones del PNV que no habían bastado para contener a los rebelde y se vieron sobrepasados por ellos en todos los frentes,¿no tenían ningún deber ni legal, ni moral hacia la República de la que emanaban su Estatuto de autonomía?

    Es increíble la desfachatez con que son capaces de presentar, desde el PNV, los asuntos de la derrota militar en el frente norte sin el menor atisbo de autocrítica y, encima, tratando de sacar pecho.

    O sea que el “malo” de la película era el fascistote italiano y los leales y bondadosos peneuvistas de avinieron a hacerle un favor con lo del pacto, al tiempo que trataban de mandar a los muchachos de vuelta al caserío.

    Allá usted con sus fantasías sobre las bondades y los éxitos de aquel PNV. A mí me da grima aquel período y muchos de sus dirigentes me dan arcadas.

  11. Para Asier Perez de Eulate (Especialista en armamento de la Guerra (in)civil)

    Habla usted de «muchedumbre» mal armada y medianamente organizada en relación con el hipotético ejército vasco cuyo máximo jefe era Aguirre, que para eso se adjudicó la consejería de Defensa y no tuvo el menor reparo en entorpecer la acción del mando republicano del ejército del norte, sobrepasando por todas las costuras las competencias que el estatuto de autonomía republicano había legislado.

    Se pueden leer muchas exageraciones sobre el hipotético ejército vasco, lo que no cabe es obviar la realidad. Fueran miembros de los batallones del PNV o fueran miembros de los batallones anarquistas, o de la ANV o de la UGT o del PSE, o de los refuerzos llegados de Asturias o de Santander, los caídos y los heridos fueron reales, no «hipotéticos».

    Una de las exageraciones que pueden leerse en internet sostiene que aquel hipotético ejército vasco era una numerosísima muchedumbre: «Bien armados, aunque escasamente entrenados, el Eusko Gudarostea llegó a tener 100.000 soldados»
    En fin, otras fuentes más solventes sitúan en 45.000 el máximo de sus efectivos. Eso sí, tenía sus símbolos, su himno , sus sacerdotes para atender a los creyentes, etc., etc.

    No le preguntaré por la organización, ni por el adiestramiento, ni por los mandos de aquel conglomerado de batallones vascos con ideas muy diversas sobre lo que había que defender, cómo, por qué y para qué.
    Le preguntaré, si me lo permite, por las compras de material de guerra que realizó el PNV, antes de la aprobación de la Ley de la República que aprobaba el Estatuto de autonomía, para su milicia partisana. Aguirre cita en sus memorias una de esa compras, realizada por Telesforo Monzón antes del 7 de octubre de 1936 y que debía de cargarse en Hamburgo y ser transportada hasta el País Vasco, consistente en 5.000 fusiles y 5,5 millones de cartuchos. Usted, que le ha dedicado mucho tiempo a eso del material de guerra, quizás pueda precisar el tipo de fusiles que eran, a quién se compraron, cuánto costaron y cómo y cuándo se pagó tal compra. También sería ilustrativo conocer cómo se transportaron hasta aquí y dónde fueron desembarcados. Hoy por hoy no me cabe duda de que los utilizó para armar a la milicia partisana del PNV, no para repartirlos con sus «teóricos socios» dol gobierno provisional de concertación que encabezaba Auirre.
    Es fácil leer y ver en fotografías de la época cómo aquelel gobierno provisional de Aguirre gastó en uniformes, correajes y botas para sus batallones, lo que induce a suponer que también se gastó los cuartos en material de guerra, no sólo en los primeros 5000 fusiles, de aquella primera compra de Telesforo Monzón.

    Estas son mis preguntas para usted:
    ¿Qué volumen de material de guerra -armamento,munición, aviones, bombas,…- adquirió el gobierno Aguirre (o el PNV por su cuenta) durante el tiempo que mantuvo movilizado a aquel hipotético ejercito vasco? ¿Cuál fue el coste de tales adquisiciones y cómo se financiaron?

    Aguardaré a leer lo que pueda indicarme sobre tales cuestiones, si es que llega a leer este comentario y decide responderlo.

    Haga lo que haga, reciba mis saludos.

  12. Saludos,

    Io, ¿y a quien traiciono el PNV?, ¿a aquellos que les decian a los gudaris que escuchaban misa, que cuando acabasen con lo que tenian enfrente, comenzarian con ellos?.

    El PNV, independentista y hasta esa guerra enfrentado a España, debia su lealtad a Euzkadi, a la que jamas traiciono, la defendio hasta las ultimas consecuencias, hasta la ultima gota de sangre, una vez perdida, no habiendo ya por lo que luchar, depuso las armas.

    ¿O acaso te imaginas a un mendigoixale del Jagi defendiendo Badajoz?, ¿Te suena alguna foto de un batallon nacionalista portando una bandera española?, por favor…

    El «ejercito vasco», no fue ese que se rindio en Santoña, unicamente una faccion politica del mismo fue la que se quedo alli, el resto siguio combatiendo por todo el norte, destacando en lugares como el Mazuco, y acabaron en Oviedo, ciudad que defendieron y desde donde huyeron y o fueron apresados, muchos de ellos siguen en la fosa de su cementerio.

    Otros estaban en Huesca, con la vascopirenaica, a ellos se les unieron los chicos de EGI que hasta el momento defendian la ciudad universitaria, y juntos llegaron hasta Valencia…

  13. Saludos.

    Io, disculpe pero no había leído sus preguntas hasta el momento en que se ha publicado mi anterior comentario, parece que la moderación va lenta. Efectivamente los muertos jamás son hipotéticos, esa apreciación es importante, ni tampoco lo es su abrazo.

    Intentare contestarle dentro de mis menguadas posibilidades.

    1.- Sobre la pregunta de los 5.000 fusiles y los 5.500.000 de cartuchos que llegaron en octubre, la contestación es fácil, el dato proviene de una conversación que está recogida en el libro «Informe del presidente Aguirre al Gobierno de la Republica», y el revuelo de ese tema, repetido una y otra vez desde 1975, proviene de una malintencionada interpretación realizada de la misma en un librito titulado «Apuntes sobre nacionalismo vasco», del centro de estudios históricos contemporáneos Buenos Aires.

    Realmente la cifra oscila entre los 5.000 y los 22.000 fusiles según autores, las facturas (que las hay), indican 16.000. Esos cartuchos y fusiles se compraron en la republica Checa, directamente a fábrica, los fusiles eran Máuser VZ24 de origen checo, nuevos, calibre 7,92, todavía con su grasa, y la munición ídem, procedentes de la fábrica BRNO y en lotes fabricados entre el 1934 y el 36.

    Pese a que en las memorias del lehendakari recuerde que el artífice de la compra fue Monzón (PNV), esto no fue así, se hizo a través de la delegación de Paris, el señor Manuel Epalza (PNV), Jimenez de Asua (PSOE) y el gran Lezo de Urreztieta (Jagi Jagi), que como buen contrabandista, era amigo personal del primer ministro Checo por ende director de la fábrica de Brno….

    Esta operación no fue la primera de este tipo, ni la ultima, se venían haciendo desde julio del 36, antes de la creación del gobierno vasco, esta gente continuaba con la labor encomendada por Echevarria Novoa (PNV), gobernador civil de Bizkaia a instancia de las órdenes emitidas por la republica.

    Las armas las introdujo en el puerto de Santurce, el propio Lezo de Urreztieta , ya que nadie se atrevía a burlar el bloqueo de la marina nacional, el, en un alarde de marino, pidió que se apagasen todas las luces del puerto y guio el barco a oscuras.

    Estas armas, al día siguiente de llegar al puerto (como anécdota una caja de aquellos carisimos fusiles se cayó al agua durante el desembarco), desfilaron por las calles de Bilbao y partieron para el frente, ya que había por aquel entonces muchos batallones constituidos pero sin armas.

    El pago se realizo mediante oro del banco de España, se deposito en un banco de Baiona y ahí es donde si interviene Monzón, ya que el ingreso y transacción de pago la realiza el mismo en calidad de ministro de gobernación, ya sobre el día 15 de octubre, con la autorización del banco de España y el gobierno de la republica.

    Las armas se repartieron por igual entre todos los batallones que partieron hacia el frente, sin hacer ningún tipo de distinción política.

    ¿Porque en Alemania?, fácil, porque los mayores contrabandistas europeos de la época, eran un par de hermanos alemanes, algunos dicen que polacos, que por cierto eran judíos practicantes, vendían material usado de la I guerra mundial, abisinia, chaco, etc.. Incluso de su mano llegaron a estos frentes fusiles Grass coetáneos a la ultima carlistada. El segundo origen de compras para el GV era por supuesto la Republica Checa, por aquel entonces, productora del 32% del armamento portátil mundial.

    Como los cargamentos tenían que salir por algún lado, algunos se hicieron a través de Hamburgo, donde estos dos hermanos (y Lezo) tenían suficientes contactos como para hacer que pasasen desapercibidos, o de Gdynia, un puerto Polonia, cuyo tráfico, por avatares de la historia, en aquella época, se había quedado prácticamente en manos Checas.

    Desde luego no compraron ningún cargamento de fusiles directamente al gobierno alemán de la época, esta interpretación se la dejamos al centro de estudios Buenos Aires, ellos sabrán porque lo indicaron en su día. Y desde luego, ESE cargamento no se compro a nivel particular por el PNV sino por la junta de defensa de Bizkaia, en representación de la Republica Española.

    Si se quiere buscar fantasmas sobre apropiación indebida de armas y fondos de la republica por parte de partidos de Euskadi, la pregunta está mal formulada, igual la correcta es ¿Por qué existía un extenso polvorín ajeno al frente, en el castillo de Butrón y que fue de su contenido? O ¿Qué paso con las armas de los cuarteles de Loyola? O ¿Quién compro al gobierno de Blum 3.000 granadas de mano que llegaron a Irun en tren en julio del 36 y para quienes eran?, le invito a que lo investigue….

    2.- Sobre el volumen de material y su coste, no es un dato tan sencillo de sacar, de hecho es un dato muy complicado, el grueso del dinero obviamente provenía de los fondos de oro de Banco de España, depositados en el Banco de Bilbao, y en parte de fondos de diputaciones y ayuntamientos, del fondo pro avión, etc…

    Conocer el numero de bombas, armas, aviones, etc… que se compro desde gobernación (junta militar de defensa) o gobierno vasco, tanto en el extranjero como a empresas locales, con exactitud, es complicado, es necesario reunir demasiada información muy dispersa y que en ocasiones se ha perdido, por poner un ejemplo, la Babcock de Sestao, según informes de gobierno (Rezola para más señas), fabricaba a diario cerca de 300 granadas de artillería para 105 Schneider , que según Cuartero Larrea (supervisor de la fabricación), no llegaban a las 150, el único que podía saberlo es la propia Babcock mediante sus propios asientos contables, pero fui a preguntar y allí casi ni sabían que había habido una guerra, las cifras bailan enormemente, ese dato que pide, posiblemente jamás se conocerá.

    Si la cantidad es difícil de averiguar… el coste por el estilo.

    Sobre la que compro el PNV por su cuenta, permítame una disertación, si existiese un solo documento en el que se demostrase que el PNV se armo por independiente, y pago esas armas con dinero ajeno, para vaya usted a saber que oscuros y maléficos planes, sin duda alguna hace años que sería portada de periódicos, aparecería en cualquier obra sobre la GC en Euskadi, e incluso se habrían escrito libros sobre el asunto, y sin embargo no ha sido así, porque ese documento o sencillamente no existe, o no se ha descubierto, o porque gracias a un oscuro complot a nivel mundial de los malísimos jeltzales todo aquel que ha tenido acceso a él ha sido silenciado….. Elija una de las opciones, le recomiendo (si me lo permite) que para tomar su decisión emplee el principio de la navaja de Ockham…

    Si se me ha cruzado algún dato, si es incorrecto, lo siento, escribo de memoria, no tengo aquí todos mis archivos.

    Le aseguro que para mí, es un placer poder conversar con usted Io.

  14. Ya leí su comentario, Asier.

    Gracias, aunque mis preguntas siguen a la espera de alguna respuesta, que habré de seguir buscando.

    Es curioso lo que me plantea: «¿O acaso te imaginas a un mendigoixale del Jagi defendiendo Badajoz?»

    Mañana comienza el recuerdo de los combates del Médoc y la Pointe-de-Grave, en las proximidades de Burdeos, en la etapa final del III Reich. Combates en los que participaron españoles y, entre ellos, algunos vascos, encuadrados en los batallones Libertad – con fuerte presencia anarquista- mandado por Santos y el Gernika comandado por Ordoki, con gentes del PNV, de ANV y algunos republicanos vascos.

    Pienso en el arrojo con que participaron en aquellos combates los vascos del batallón Gernika, mendigoixales del Jagi o no, y lo cierto es que se me hace aún más difícil de entender su escasa disponibilidad para combatir en Badajoz, por ejemplo.

    Recuerdo al marino murciano que comandaba el Nabarra, hundiéndose con su bou artillado y su ikurriña frente a Machichaco, por sentido de lealtad hacia el gobierno «provisional» de Euzkadi, y no alcanzo a comprender la imposibilidad metafísica de que un vasco nacionalista correteara por los campos de batalla del resto de España, fuera de las provincias vascas, llevando la tricolor. No lo entiendo, menos aún cuando centenares de vascos, requetés o no, no tenían el menor empacho en ondear la roja y gualda en el bando rebelde.

    Puede que sea demasiado ingénuo y no lo entienda por eso.

    Empiezo a sospechar que el nacionalismo resulta altamente adictivo y quizás más peligroso que la nicotina.

    Saludos.

  15. Tengo entendido que el señor Aguirre compró 10.000 fusiles belgas con su buena dotación de munición, para que, el final cayeran en manos de las huestes de Franco. Y si Euskadi cayó es porque fue mal defendida, porque hubo traidores en sus filas y porque «Napoleontxu» tenía de militar lo que yo de monja. Y basta de historietas, encaminadas, pienso yo, a comer el coco a los jóvenes que no vivieron aquellos días y son presa fácil para un adoctrinamiento «nacionalindependentistafuerista… y de la JONS». Dejen ustedes las fábulas para los Samaniego, por favor.

  16. ¡Vaya sorpresa!

    Será eso, lentitud en la moderación. El resultado es que se cruzan los comentarios de suerte que el orden en que aparecen no muestra la lógica con que han sido redactados ya que aparecen algunas respuestas después del lugar que les corresponderia desde la óptica de quien ha respondido y el momento en que lo hizo.

    Ello hará menos comprensible la lectura del conjunto de los comentarios…suponiendo que se le ocurre hacerla a alguien.

    He pasado por acá y me he encuentro ahora con su extensa respuesta del 13, que no estaba cuando hice mi comentario ese mismo día.

    Aporta tantos datos en sus sagaces y mordaces comentarios, Asier Pérez de Eulate, que ya tengo trabajo para las próximas semanas. Leeré y compararé. No soy muy rápido en esas labores.

    Tomo en cuenta lo que comenta, lo tomo muy en cuenta, incluidas las preguntas que ha dejado flotando.

    El personaje Lezo de Urreztieta es como para tomarlo con pinzas, a lo que deduzco. Le dedicaré un tiempo.

    Agradezco vivamente su extenso comentario y el tono cordial del mismo.

    Escribirá usted de memoria, pero se muestra en plena forma. Voy a ponerme a leer de nuevo.

    Saludos y, una vez más, gracias por su extensa respuesta.

  17. contestando a Lunero:

    hablas de traición al resto de tropas antifranquistas cuando los gudaris, una vez Bilbao y el resto de Bizkaia cayeron en manos nacionales, pactaron con los ejercitos italianos una salida sin represalias. Me permito recordarte que la obligación de todo ciudadano vasco referente a la guerra, era únicamente la defensa de su territorio. Así pues me pregunto ¿desde cuando a un soldado, esté o no entrenado, se le tacha de traidor cuando cumple con su obligación? Ellos solo cumplieron con su deber de la mejor manera que pudieron: defendieron su tierra nada más.
    por cierto siempre que se menciona este tema resulta del todo curioso la forma en que hábilmente se omite que la decisión de no dinamitar ni la industria ni las minas y entregárselas intactas a los nacionales fue determinante para que la postguerra no fuese «tan» dura. Mientras en España habia hambre, paro y destrucción al menos en Bilbao habia trabajo.
    Ahora te pregunto ¿fue tan malo el pacto de Santoña? Los soldados salvaban su propia vida y a la vez salvaban su tierra.
    Lástima que fuesen entregados a los nacionales y Bizkaia estuvo considerada durante 40 años como provincia traidora al régimen y por lo tanto no se la permitiese ningún tipo de derecho.

  18. Los vascos y sus dirigentes eran leales a la república española antes de la guerra civil, por tanto es una TRAICION a esa lealtad. Te recuerdo que antes de Franco hay ríos de historia, y que los vascos por ejemplo votan en masa a favor de la constitución de la pepa. A la TRAICION vasca se la puede disfrazar de muchas maneras, y usted ahora podrá decir que el PNV solo defendía euskadi (mientras la otra mitad del pueblo vasco se batía por toda España en ambos bandos)… Pero la verdad es que lo del PNV fue una TRAICION a la república de una cobardía despreciable. El PNV jamas dijo que se sublevaba del bando de la república (porque el pueblo vasco se los hubiera comido vivos). Simplemente la traicionaron sin sin aviso alguno. Por cierto, todos esos mercaderes, empresarios y burguesitos del PNV luego durante el franquismo vivieron a su sombra estupendamente (no me kiero poner a dar apellidos) y estuvieron levantando el brazo hasta el 75, donde consideraron que donde realmente estaba la pasta y el interés era en ese nacionalismo de campanario inventado por Arana hace 4 dias. Lo que son los tiempos. El PNV se pasa la vida hablando del franquismo (que sufrió toda España con la diferencia de que franco no metió dinero en casi ningún sitio), por los complejos que tiene por su cobardía y forma de actuar en la guerra; enterese.

  19. Por cierto, una forma es la forma de actuar del PNV en la guerra civil, y otra es la forma de actuar de la mayoría del pueblo vasco, que independientemente de sus ideas (franquistas o republicanos), se batieron con honor y no traicionaron a nadie cobardemente. No identifiquemos al PNV con el pueblo vasco, porque no es lo mismo. Igual que no es lo mismo identificar un partido estatal con la globalidad del pueblo español. El PNV tiene muchísimos complejos con la guerra civil (y en privado te lo reconocen), y le aseguro que tienen motivos. ¿sabia por ejemplo que cuando empiezan a salir los barcos para Francia los políticos del PNV sacaban de ellos a las mujeres y a los niños para montarse ellos?… Le aseguro que no es ninguna leyenda urbana, lo puede buscar en internet. Eso es lo que nos trajo Sabino Arana a los vascos. Hasta su nacimiento nos podíamos equivocar o no… Pero comportarnos como unos cobardes, eso nunca. Pues eso es lo que el y sus seguidores nos trajeron a los vascos.

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